martes, septiembre 07, 2010

Calderón y los priistas

Martha Anaya / Crónica de Política

Apenas salieron los priistas de Los Pinos, Felipe Calderón se sentó a conversar con la conductora de Radio Fórmula Denise Maerker. Ella le preguntó al Presidente cómo le había ido en su reunión con Beatriz Paredes (Presidenta del PRI), Manlio Fabio Beltrones (coordinador del tricolor en el Senado) y Francisco Rojas (líder de la fracción del PRi en la Cámara de Diputados.

La respuesta del Presidente fue poco entusiasta. Al grado que prácticamente pasó por encimita del tema. Acaso subrayó que habían tenido un diálogo franco, constructivo y directo y que el tema principal había sido el de la seguridad.

Más tarde, su oficina de prensa emitió un comunicado reiterando que, en el marco de la agenda legislativa, el principal problema abordado fue el de la seguridad pública y que se resaltó la importancia de agilizar y concretar el diálogo entre los dos poderes –Ejecutivo y Legislativo–, así como entre el Presidente Calderón y los partidos políticos, “para consensuar las iniciativas en materia de seguridad que están en el Congreso y de aquellas que habrán de enviarse en los próximos días”.

Además, indica el boletín procedente de Los Pinos, Calderón “reconoció” el papel que tiene el PRI “en ambas Cámaras legislativas, así como en los estados y municipios del país”. (Frase con diversas y fuertes implicaciones)

Por el lado de los priistas, tampoco ellos se mostraron dicharacheros. A su salida de Los Pinos rechazaron hacer declaración alguna sobre lo ocurrido durante las dos horas que duró el encuentro intramuros con Calderón.

Pero unas horas después del encuentro en Los Pinos la bancada priista en Xicoténcatl anunció que publicarían este martes una Carta Abierta dirigida al Presidente de la República en el que demandarían varias cosas: cifras realistas, un presupuesto que promueva el crecimiento, que se dejen de lado las “simulaciones” y los subejercicios; que no haya aumento de impuestos; austeridad por cuenta de ahorro en el gasto corriente del gobierno; y respecto del IVA –como ya lo venían anunciando—disminución de la tasa del 16 al 15 por ciento.

Diríase, por las reacciones de un lado y del otro –más allá de sus reticencias a explayarse sobre lo que ocurrió durante su encuentro—dejan ver que, en tanto Calderón puso énfasis en el tema de seguridad, los priistas lo hicieron en el tema económico; que mientras el comunicado de Los Pinos salió en un tono formal y discreto, la respuesta de los priistas fue aguerrida y demandante.

Y es que, como bien reconocería el Presidente en su boletín, no es posible desentenderse de la fuerza del PRI hoy en las Cámaras (tienen la Presidencia en ambas) y a nivel territorial.

Quizás por ello, durante su inmediata entrevista con Denise Maerker haya rechazado que el retorno del PRI a Los Pinos fuese una regresión, que lo importante era cómo se llegaba.

La cautela ayer del Presidente no puede ser vista sin embargo como una derrota anunciada para él y para el PAN. Ha demostrado que, a la hora de la hora, saca la garra. Pero por lo pronto, el PRI va por la revancha.

La sucesión de Peña Nieto

Jenaro Villamil

Faraónico, pensado para impactar y no para convencer, el quinto informe de gobierno del mexiquense Enrique Peña Nieto tuvo dos mensajes fundamentales en medio del despilfarro mediático de casi 100 millones de pesos:

1. La exaltación de su figura en el momento en que su gobierno comienza su declive e inicia la guerra interna en las filas priistas para suceder al sobrino de Arturo Montiel y de Alfredo del Mazo. El objetivo central era decirle a todos los adelantados y suspirantes: en 2011 el copetazo será de Peña Nieto, de nadie más.

2. Lanzar una proclama en contra de las alianzas electorales como una forma implícita de reconocer que el PRI puede ser derrotado en el Estado de México si fuerzas como el PRD y el PAN se alían, y también como un reconocimiento claro de que el principal derrotado en las alianzas estatales de 2010 fue el propio Peña Nieto.

Para nadie es un secreto que él apostó por las victorias del PRI en Oaxaca, Puebla y Sinaloa, que invirtió muchos recursos como lo ha hecho en otras contiendas estatales y que “la tasa de retorno” político (es decir, votos y dinero para su precampaña) no será posible.

En otras palabras, Peña Nieto se puso la propia soga al cuello. El mismo determinó que si su sucesión en 2011 no garantiza la unidad en las filas priistas y suceden rupturas de grupos políticos, su proyecto de candidatura para el 2012 se verá profundamente afectado. Así lo reconoció en su última respuesta a la cómoda entrevista que Joaquín López Dóriga le hizo para Canal 2, el lunes 6 de septiembre:

“Quiero ver cómo entrego mi estado y en un año tomaré una decisión”, respondió el gobernador del telepromter al ser cuestionado sobre sus aspiraciones presidenciales.

Distintos medios captaron que la “nota política” del V Informe de Gobierno mexiquense la dio el excandidato presidencial priista, Roberto Madrazo, quien se salió de la maratónica carrera por la sucesión del 2012 y estableció que sólo hay dos posibles candidatos de su partido: Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones.

Aún más, Madrazo les dio el “beso de la bruja” a los dos: afirmó que existe un pacto de no agresión entre ambos políticos. Expresión de deseo o mensaje salido de ultratumba, Madrazo determinaba así que si no existe unidad, la recuperación de la Presidencia de la República para el PRI será muy difícil.

La animadversión de Peña Nieto a las alianzas es directamente proporcional al grado de división que existe ya en las filas del PRI para sucederlo. En torno a la candidatura del Revolucionario Institucional para el 2011 orbitan cinco personajes:

--Alfredo del Mazo Maza, alcalde de Huixquilucan, el heredero en línea directa de la dinastía familiar de Atlacomulco, nieto e hijo de exgobernadores y de excandidatos presidenciales. Sus dos problemas principales son: el caso Paulette y la presencia del capo del narcotráfico, Edgar Valdez Villarreal, La Barbie, en los territorios de este municipio conurbado.

Huixquilucan es la expresión de la peor polarización social en el Estado de México: los más marginados conviven con los potentados y juniors emblemáticos de esta nueva era de los golden boys.

--Ernesto Nemer, coordinador actual de la bancada del PRI en el Congreso local. Se ha convertido en el candidato principal de dos exgobernadores con oficio político y enorme capacidad de intriga: Emilio Chuayfett y César Camacho Quiroz. Nemer tiene el dinero de una comunidad libanesa muy fuerte en la entidad y puede ser el puente entre una generación y otra de políticos profesionales. Por supuesto, no tiene las credenciales de la dinastía Del Mazo-Nieto-Monroy-Montiel.

--Luis Enrique Miranda Nava, secretario general de Gobierno, es el más cercano al círculo personal, político y de negocios de Enrique Peña Nieto. Ambos provienen del gobierno de Arturo Montiel. Formaron parte de los golden boys. De hecho, es el gobernador en funciones mientras su jefe se dedica a promoverse en toda la República y en el extranjero. Su posición está sumamente desgastada por sus desplantes autoritarios, su intromisión en el caso Paulette y la ola de inseguridad que vive el Estado de México. Los secuestros han aumentado 64% y tan sólo en lo que va del año suman 401 los ejecutados.

--Luis Videgaray, presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, es la opción de la tecnocracia. Alumno de Pedro Aspe Armella, artífice de la reestructuración de la deuda en el Estado de México, Videgaray tiene el apoyo del gran capital que ha invertido en la entidad, pero no cuenta con trabajo ni redes electorales. Jugará un papel protagónico en la negociación del Presupuesto de Egresos para 2011.

--Erubiel Avila, alcalde por segunda ocasión de Ecatepec, la “joya de la corona” electoral del Estado de México, ya que es el municipio más grande del país, representa 12% del padrón estatal, tiene cuatro distritos locales y cinco federales (aunque usted no crea esta contradicción). Avila es un operador clave en el gobierno de Peña Nieto, aunque carezca de las credenciales familiares necesarias para una sucesión dinástica.

Entre algunos de estos cinco personajes se dará la sucesión de Peña Nieto. Puede surgir otro. Y si eso ocurre, Peña Nieto desde ahora quiere conjurar la posibilidad de que una ruptura en el priismo mexiquense provoque el fenómeno de Malova (en el caso Sinaola) o de Angel Aguirre (en el caso de Guerrero). El temor de que esto suceda provocó que el mandatario mexiquense pronunciara la frase más denostada de su Informe:

“La delincuencia no es el único riesgo que enfrenta el país, hay otra grave amenaza: la lucha del poder por el poder mismo que desvirtúa la democracia. Se promueve una democracia sin contenidos, donde por el solo fin de obtener el poder se negocian alianzas entre proyectos antagónicos”.

¿A quién realmente iban dirigidas estas palabras? Sólo Peña Nieto y sus asesores de discurso, tan dados a los mensajes crípticos, lo saben cabalmente.

En apariencia, era un veto a la posibilidad de que PAN y PRD se aliaran, como si él mismo no hubiera llegado a la gubernatura en 2005 como resultado de una alianza entre PRI y Partido Verde. Los partidos pequeños en este contexto jugarán un papel fundamental, pero también las divisiones al interior del PAN y del PRD.

Por lo pronto, este miércoles 8 de septiembre se presenta en el Congreso mexiquense una iniciativa de reforma constitucional para ponerle candados a las candidaturas comunes y coaliciones. Peña Nieto va con todo a nombre, según él, de la democracia. En realidad, el fantasma de que le surja otro Isidro Pastor le recorre el copete.

Quién les manda...

Bicentenario ‘fodongo’

Ricardo Rocha / Detrás de la Noticia

Ahí está la clave de todos los desatinos

Sí, ya sé que la palabreja no existe. Así que ni la busquen en el Diccionario de la Real Academia. Allí lo más parecido que encontré fueron dos términos: fofo, cuyos sinónimos son: esponjoso, inconsistente, blando, hueco, flácido, obeso y gordo. No andamos tan mal si se trata de encontrar definiciones para el aniversario que nos espera. La otra palabra oficial cercana es mucho más de uso común: descuidado, es decir, al que le falta la dedicación y el cuidado que debe poner a las cosas; sus sinónimos más próximos serían omiso, negligente y desaliñado.

La verdad es que creo que todas estas acepciones definen contundentemente las actitudes oficiales respecto a las obligadas celebraciones de este 2010. ¿A poco no?

Pero espérense tantito. Que hay por ahí un valiosísimo Diccionario de Mexicanismos de don Guido Gómez de Silva. Y, ¿qué creen? Que trae una definición que me reivindica con los eventuales extravíos de mi memoria: fodongo, es todo aquel sucio, desaseado y perezoso. Que me parece que, siendo vocablos tan desagradables, son todavía más precisos para describir a este Gobierno federal que ya no sabe cómo lamentar la mala suerte de verse obligado forzosamente, no solamente a conmemorar, sino a festejar dos hechos históricos en los que simplemente no cree. Y por lo tanto no valora.

Porque, díganme si no, señoras y señores, ahí está la clave de todos los desatinos y desaciertos que este pobre Gobierno ha padecido —o incluso ha provocado a propósito— para soslayar y sabotear cuanta ocurrencia ha habido para los dichosos festejos: el arco que terminó en estelita de luz que se achicó en tamaño pero creció en presupuesto de 200 a 690 millones de pesos y que siempre no estará listo la próxima semana sino hasta dentro de 14 meses; la sucesión irracional de comités organizadores; la ridícula convocatoria para la canción más chafa de todos los tiempos; la asignación a capricho a una empresa australiana de 800 millones para un show high tech de luces y láser, todo metido en un fideicomiso escandaloso que ya se elevó a más de 3 mil millones y que desde ahora está bajo sospecha.

En pocas palabras, este Gobierno nunca tuvo ni tiene ganas de festejar ni Independencia ni Revolución. No está en sus orígenes ni en su destino.

Y todavía el maestro Lujambio tacha de mezquinos a quienes nos atrevemos a criticar este vergonzante margallate. No, señor secretario. A los que nos hierve la sangre por este país no se nos puede acusar de mezquindad.

Lo que pasa es que no se nos da festejar con los fodongos, como ustedes comprenderán.

Peña Nieto y Televisa

José Cárdenas

Con esos amigos, que vengan enemigos


Su Quinto Informe trastorna el clima político. Es ruptura pura. Peña Nieto es poderoso. El más. Siete de cada 10 lo prefieren. Lo sabe. Según Roy Campos, de Consulta Mitofsky, las encuestas favorecen de calle al gobernador mexiquense. También al PRI. Pero el PAN repunta. No sólo por los triunfos en alianza. Porque redujo el rechazo. El PRD, con todo y AMLO, está en la lona. 37% lo rechaza.

Quizá por ello el góber decapita el discurso panista. Niega regresión por la vuelta del PRI. No es retorno de brujos, dice. Acusa maniobras desde el poder para desvirtuar la competencia. Tiene a Televisa detrás. Se engalla. Con esos amigos, que vengan enemigos. Televisa apuesta fuerte. El consorcio de Chapultepec tiene favorito. Es obvio. Le monta el tinglado. ¿Televisa rompe con Calderón por la reforma digital? Se rompió una taza.

Peña Nieto reta a Los Pinos. Afirma que las alianzas electorales son tan peligrosas como la delincuencia. Habla de democracia sin contenido. Del riesgo de coaliciones entre proyectos antagónicos. Va más lejos. Reclama al Presidente: “No se puede convocar a la unidad de propósitos y, al mismo tiempo, actuar por consignas o intereses electorales. El poder por el poder es autoritarismo”. Recuerda que México ya vivió una transición política. La hicieron todos los partidos, dice.

¿Peña olvida el papel jugado por el voto ciudadano? Miedo disfrazado. Memoria corta. Enrique tardó 52 minutos en pintar su raya. El caso Paulette no venía al tema. De aquella injusticia omitió palabra. No se atrevió. Tampoco mencionó Huixquilucan. Territorio “Barbie”. Que el narco ha sentado sus reales en el Edomex. ¿Sincero es el que sólo ve paja en el ojo ajeno? Cuánta razón tenía Dehesa. Gelboy se pronuncia igual que Hellboy. Acaso sean sinónimos.

El discurso de Beatriz en el funeral de Rodolfo Torre; el rechazo de Manlio a los Diálogos por la Seguridad y el informe Peña muestran que la guerra viene violenta. Aunque tomen cafecitos. El arrebato priísta de la presidencia de la Cámara de Diputados fue una pequeña escaramuza. El PRI se quedó con el pastel legislativo. Viene el boquete de 30 mil millones a las finanzas federales con el bajón al IVA. Estamos en tiempos de cólera.

EL MONJE LOCO: Reinas de Polanco: Sodi las saluda. Dice que los 275 bares y restaurantes de la zona son legales. Que sólo ha otorgado 11 licencias nuevas. Que todos cumplen. Verificaron 7 veces. Que es falso que ni las vea ni las oiga. Que cada semana hay reuniones. Que por qué no asisten. Que le bajen al ruido… // José Murat llevó al Trife su pretendida expulsión del PRI. Va a ganar la querella. La Comisión de Honor no respetó estatutos.

Los documentos de la traición son recortes de periódico. Columnas de Carlos Ramírez. ¿A Murat le pelarán los dientes? // Muerto Dehesa, Montiel descansa… en paz. Total, ya tiene a su Peña. Ya se sabe. Ya se supo…

Peña Nieto, candidato de la corrupción

Álvaro Delgado

A los miles de conductores que a diario llegan o salen de la Ciudad de México les consta: El tramo del periférico que va del Toreo de Cuatro Caminos, donde termina el Distrito Federal y comienza el estado de México, hasta la caseta de peaje de Tepotzotlán está poblado de criminales que trabajan para el gobernador Enrique Peña Nieto.

No se les puede llamar de otro modo que delincuentes a los policías que asechan a los aproximadamente 300 mil automovilistas que a diario circulan a lo largo de esos 30 kilómetros, particularmente a los que conducen vehículos con placas de los estados del centro y norte del país, víctimas cotidianas de extorsión y robo.

El pretexto para la rapacería policiaca es lo de menos. El conductor que ve aproximarse a un motociclista o patrullero que husmea en las ventanillas del vehículo sabe que, al recibir la orden de orillarse, no hay manera de eludir el abuso de poder que se convierte en despojo patrimonial.

Aun cuando el ciudadano requerido cumpla con todo lo que dispone el reglamento de tránsito y la ley, incluyendo disposiciones absurdas como la calcomanía de verificación anticontaminante de estados donde no existe, la labia de criminal uniformado impone la disyuntiva fatal: Multa y corralón o “lo dejo a su criterio”.

Estas celadas policiacas a los automovilistas se tienden en todas las carreteras que cruzan el vasto territorio del estado de México, como las procedentes de Michoacán, Hidalgo, Puebla, Guerrero y Morelos, y a menudo, hasta para no perder tiempo, el ciudadano termina por caer en el viscoso océano de la corrupción.

Desde los tiempos de Carlos Hank González, cuando en los setenta creó el tenebroso Batallón de Radiopatrullas del Estado de México (Barapem) --del que surgieron delincuentes como Alfredo Ríos Galeana--, hasta lo que hoy se denomina Agencia de Seguridad Estatal, los policías son adiestrados en el robo y son la base de una pirámide de corrupción, en cuya cúspide se encuentra el gobernador en turno y que ahora se llama Enrique Peña Nieto.

Todo el que ingresa a la policía estatal, desde la propia academia, lo sabe, y la mayoría por eso se alista: Ser policía es ser ladrón impune, aunque debe comprarse el puesto y pagar cuotas permanentes al superior, que a su vez da tajada a su jefe y así hasta la cumbre, donde habita la opulenta élite mexiquense.

Por eso el gobernador en turno --ahora Peña Nieto y antes su tío Arturo Montiel Rojas y ahora lo pretende su primo Alfredo del Mazo Maza-- no se hace de la vista gorda ni solapa la extorsión a los ciudadanos, sino que es pieza clave en el mecanismo de la corrupción.

Por supuesto que la extorsión policiaca es sólo una parte de la extendida corrupción en el estado de México, porque el lucro desde el poder abarca todos los ámbitos: Desde los constructores que edifican miles de viviendas populares sin servicios, vías de comunicación, escuelas y zonas verdes hasta la autorización de prostíbulos y toda suerte de giros negros.

Los negocios desde el poder, que se traducen en comisiones a trasmano, involucran también las concesiones al sector privado de obras de mantenimiento a la red carretera del estado y del segundo piso del periférico denominado Viaducto Bicentenario, cuya cuota por recorrer los 22 kilómetros costará 29 pesos y luego de que el usuario adquiera una tarjeta con un transmisor de frecuencia, que cuesta 300 pesos.

Como la corrupción en el estado de México todo lo abarca --y por eso no es casual que desde aquí resurja la figura de Carlos Salinas--, también en la política se hacen también grandes negocios, gracias a que todos los partidos de oposición toman parte en las componendas y muchos de sus integrantes están cooptados por Peña Nieto.

Un ejemplo lo representa el senador panista Ulises Ramírez: Su esposa, Luz María Angélica Alatorre Carbajal, es magistrada del Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA), gracias a una negociación con Peña Nieto, en 2008, mediante la cual se integró por cuotas de partidos el Instituto Electoral del Estado de México.

El presidente de ese organismo que organizará las elecciones para gobernador en 2011, Norberto Hernández Bautista, es panista y amigo de Ulises Ramírez --a quien Felipe Calderón debe su triunfo en la interna panista de 2005--, mientras que el PRD le entró a la componenda luego del nombramiento como consejera electoral a Sayonara Flores Palacios, esposa del diputado perredista Domitilo Posadas, miembros de la corriente de Jesús Ortega.

Por eso el multimillonario despilfarro de Peña Nieto en la difusión de su imagen y sus complicidades con Televisa --y en general con el grueso de los medios de comunicación audiovisual y escrita-- para ser impuesto en la Presidencia de la República, en 2012, no extrañan.

La lógica es la corrupción, la corrupción sin límites, que explica por qué la mitad de los 15 millones de habitantes del estado de México padecen pobreza; por qué se duplicó el desempleo en los cinco años de gobierno de Peña Nieto; por qué esta entidad ocupa el primer lugar en robo de automóviles, y por qué es líder también en feminicidios que están impunes…

Por eso, aun si Peña Nieto no es candidato presidencial y, sobre todo si lo es, la corrupción es el gran tema de debate en la disputa por la nación que está en curso…

Apuntes

Las ansias de mostrar autoridad suelen llevar a los gobernantes fantoches, precisamente por carecer de ella, a la brutalidad contra los ciudadanos que, legítimamente, hacen uso de su derecho de manifestarse contra decisiones arbitrarias o erróneas. Y esto fue lo que ocurrió, el sábado, en León, Guanajuato, cuyo alcalde panista, Ricardo Scheffield, ordenó a la policía municipal reprimir una marcha de más de 100 leoneses que protestaban por el desgarriate en las rutas de autobuses en la ciudad derivadas de la ampliación del Sistema Integrado de Transporte (SIT). Schefield, un expayaso de la televisión local, quiere ser gobernador y por eso emplea los métodos de la organización ultraderechista El Yunque. Tienen razón los manifestantes, cuatro de ellos apresados por los mastines de El Yunque: “¡Protestar es un derecho, reprimir es un delito!”… La guerra demencial de Felipe Calderón sigue cobrando vidas inocentes con balas del Ejército y él atosigando a la población con la sonrisita cínica…

Gobierno mexicano esconde contratos de inversión bicentenaria y centenaria

Omar Sánchez

Para celebrar el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución, el gobierno federal decidió echar la casa por la ventana y eso se reflejará en los próximos días.

El gobierno federal dispuso de 3 mil millones de pesos para las celebraciones.
Si bien, estos festejos se realizan cada 100 años, la situación económica del país al menos amerita una apertura transparente en el manejo del millonario presupuesto.
Pablo Escudero, presidente de la Comisión de la Función Publica, en la Cámara de Diputados, declaró que la SEP, ISSSTE y la Secretaría de la Función Pública han montado una estrategia para ocultar los contratos de los festejos.

Aseguró que hasta el momento van 58 días que solicitan los contratos de los festejos, a lo que no han recibido respuesta alguna por parte de las instituciones, por lo que dijo, es evidente la estrategia de Alonso Lujambio, titular de la SEP, Jesús Villalobos, del ISSSTE y Salvador Vega, de la Función Pública, para ocultar la información y esperar a que pasen las celebraciones.

“Estos funcionario, tienen miedo que los mexicanos nos enteremos de cómo y a quien pagaron 3 mil millones de pesos sin licitar, Les preocupa que los mexicanos sepamos cuanto costo cada evento”, dijo El legislador por el Partido Verde.

Consideró lamentable la complicidad de estos servidores públicos. Ahora resulta, dijo, que Lujambio sólo piensa en ser presidente, Vega Casillas en ser Gobernador de Michoacán y Villalobos en que no lo metan a la cárcel por todas las irregularidades que ha cometido en los festejos.

Arman "tribus" del PRD frente común contra Jesús Ortega

Rosalía Vergara / Apro

Al menos ocho corrientes del Partido de la Revolución Democrática (PRD) acordaron hoy unir fuerzas para impedir una eventual extensión en el cargo –hasta marzo próximo-- del presidente nacional de ese partido, Jesús Ortega, quien sólo cuenta con el apoyo de su disminuido grupo, Nueva Izquierda (NI).

El grupo de las ocho “tribus” lo encabezan Dolores Padierna; el senador Carlos Sotelo; el presidente del Consejo Nacional del PRD, Camilo Valenzuela; el internacionalista Saúl Escobar; el coordinador de brigadas de Andrés Manuel López Obrador, David Cervantes, y el exdelegado Gilberto Enzástiga.

El movimiento se propone, a través de una votación en el pleno del Consejo Nacional del próximo fin de semana, la salida de Ortega Martínez en diciembre de 2010 y la cancelación de eventuales alianzas con el PAN en el Estado de México, Nayarit y Baja California Sur.

Dolores Padierna, de Izquierda Democrática Nacional (IDN), dio lectura a una carta, en la que la militancia recordó que en diciembre pasado, en el 12 Congreso nacional, se acordó renovar la dirigencia nacional el 5 de diciembre próximo.

Sin embargo, tanto NI como Foro Nuevo Sol y Alianza Democrática Nacional pretenden aplazar ese resolutivo hasta marzo del 2011, “sin dimensionar el daño que le están haciendo al partido”.

En la misiva, los grupos perredistas advirtieron que en el próximo Consejo Nacional debe garantizarse la convocatoria para la elección de la Presidencia y la secretaría general del partido, la revisión de los temas del referendo y la afiliación, así como se ratifique la ruta de renovación de los órganos de dirección del PRD.

“Este movimiento habrá de impulsar la reorientación de fondo en la estrategia y línea política impuestas por la dirigencia”, en alusión a las alianzas electorales con el PAN.

“Se trata de apuntalar el polo progresista y democrático de nuestro país, de consolidar el DIA en todas las elecciones locales y la elección federal del 2012, así como de rechazar las alianzas con el PAN en las elecciones estatales y en la federal, de apostarle a la unidad de las izquierdas y tener un candidato único a la Presidencia de la República”, indica el texto.

En el documento, las tribus también arremetieron contra un sector de la dirigencia nacional que encabeza Ortega, al que califican de comparsa del gobierno de Felipe Calderón.

“Se han constituido en un grupo colaboracionista y legitimador de ese gobierno, que el Congreso Nacional de nuestro partido resolvió no reconocer. Han aislado a la dirección nacional de la gente común y sus preocupaciones, se han perdido en el pragmatismo electoral más vulgar que ha desdibujado al PRD como proyecto partidario de izquierda, al impulsar las alianzas con el PAN y la designación de candidatos de una trayectoria altamente cuestionable que atentan contra nuestra historia y militancia”, se acusa en la carta.

Por último, en el mensaje que leyó Padierna los grupos inconformes denunciaron que la directiva de Ortega “ha impuesto una conducción sin visión estratégica y divorciada de los principales liderazgos de nuestro partido, como Andrés Manuel López Obrador y el movimiento que encabeza, y el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas”.

En México reconoce Senado que cerca de 200 alcadías están "bajo control absoluto" del narco

Apro

De manera “silenciosa, expansible, simple y sostenida” los distintos cárteles del narcotráfico ha logrado infiltrar las estructuras de los gobiernos federal, estatal y municipal por medio del “eslabón más débil”, el municipio, según un estudio elaborado por la Comisión de Desarrollo Municipal del Senado de la República.

En el documento titulado “Ayuntamiento y crimen organizado”, la comisión que preside el senador por Chihuahua, Ramón Galindo Noriega, del PAN, señala que la penetración del narcotráfico fue posible debido a que “el municipio le ha importado poco a los gobiernos que han encabezado al país”.

La semana pasada, el senador Galindo Noriega afirmó: “Los únicos que han entendido la importancia del municipio en México, para desgracia de los municipalistas y vergüenza de la clase política, han sido los cárteles de la droga.”

Ejemplo de ello, agregó, es que entendieron que tenían que “echarse a la bolsa” al municipio, el nivel de gobierno más cercano a la población, para favorecer, primero, sus operaciones de narcomenudeo y, posteriormente, “para asegurar infraestructura, logística, apoyo político y silencio cómplice”.

Esta penetración “silenciosa”, de acuerdo con el estudio, ha permitido a los cárteles de la droga operar impúnemente en siete de cada diez municipios y tener el control absoluto en 8% de las 2440 alcaldías del país.

Por si fuera poco, en el estudio también se advierte que 78% de los sectores económicos del país “están infiltrados” por la delincuencia organizada.

“Estos sectores económicos de alto riesgo (construcción, agropecuario, compañías de automóvil, supermercados) en determinados estados deberían estar sujetos a pesquisas de unidades de investigación patrimonial”, considera la Comisión, sin embargo, lamenta que “eso no ocurre”.

Estas cifras, se agrega en el estudio, demuestran el grado de corrupción de las autoridades, no sólo municipales, sino estatales y federales, estas últimas, las únicas facultadas para combatir al narcotráfico y al crimen organizado.

Además, “mediante cañonazos de dólares, las células del narcotráfico mantienen cooptadas a las policías y a miembros de las Fuerzas Armadas; y figuran como fuentes de financiamiento en las campañas de gobernadores, legisladores locales y federales, así como de alcaldes.”

Sobre este tema, en septiembre de 2008, dos días después de los “granadazos” en Morelia, Michoacán, durante la celebración del Grito de Independencia, el presidente Felipe Calderón advirtió ante la cúpula de su partido, el PAN, sobre los riesgos de que las campañas de los candidatos panistas y de otros partidos fueran infiltradas por dinero del narcotráfico, cuyas células, según el estudio, en algunas regiones del país han desplazado la presencia gubernamental y actúan como “benefactores sociales”, lo cual les ha permitido “tener mayor dominio territorial y político”.

Este dominio, les ha permitidos a los grupos criminales diversificar sus actividades delictivas en, por lo menos, 25 ramas, según el estudio: secuestro, piratería, intercambio de personas por droga, tráfico de personas, asesinatos, extorsiones, terrorismo y protección, entre otras.

Al respecto, el estudio de la Comisión de Desarrollo Municipal indica: “En muchas regiones y municipios hay ganaderos, empresarios grandes y pequeños que pagan fuertes sumas de dinero y derechos patrimoniales, que se traducen en una suerte de fiscalización criminal para poder operar con cierta libertad sus negocios.”

Sin embargo, “el narcotráfico es la expresión más rentable y agresiva del crimen organizado y su presencia es ya una realidad en la esfera política del país, a través de las presidencias municipales”, donde por medio de su poder económico los cárteles de las drogas imponen su voluntad.

De acuerdo con cifras oficiales, la guerra contra el narcotráfico ha dejado una estela de más de 28 mil muertes, pese a que en calles de las principales plazas del país están vigiladas por más de 20 mil efectivos del Ejército, la Marina Armada de México y de la Policía Federal. Desde enero de 2008, el crimen organizado ha cobrado la vida de casi 20 alcaldes, el más reciente, Edelmiro Cavazos, de Santiago, Nuevo León, el 18 de agosto; así como 11 expresidentes municipales y un candidato a gobernador: el priista Rodolfo Torre Cantú, en Tamaulipas, en vísperas de las elecciones del 4 de julio.

Anualmente, según cifras del gobierno de Estados Unidos, el narcotráfico genera ganancias de entre 300 y 400 millones de dólares anualmente.

Ante el desolador panorama, la Comisión llama a cambiar la estrategia contra el crimen organizado: “De abajo hacia arriba; así empezó el narco y así nos está yendo”.

“Daños colaterales” y omisiones presidenciales

Jorge Alejandro Medellín / De orden superior

En medio de una fuerte campaña mediática para reposicionar a las fuerzas armadas mexicanas ante la sociedad civil de cara a los festejos del 15 y 16 de septiembre, los muchachos del general Galván y de su Comandante Supremo, Felipe Calderón, volvieron a hacer de las suyas y acribillaron a una familia en un retén ubicado en el municipio de General Escobedo, en Nuevo León, porque no se detuvo para una revisión de rutina.

Esa es la versión oficial. La de los sobrevivientes al ataque señala que no había ningún retén y que los militares dispararon porque el auto en que viajaban las víctimas intentó rebasar a un convoy del Ejército y esto bastó para ser rafagueados.

Este es el tercer episodio de agresión mortal de militares a civiles que protagonizan tropas de a Séptima Zona, con base en Escobedo, bajo el mando, otra vez, del Coronel de Infantería DEM, Saúl Luna Jaimes.

Sus soldados participaron en la balacera en la que murieron los estudiantes de posgrado del Tec de Monterrey, Jorge Antonio Mercado Alonso y Aurelio Javier Arredondo Rodríguez, el 19 de marzo de este año.

El 3 de marzo de 2010, en el municipio de Anáhuac, Nuevo León, fueron acribillados los esposos Juan Carlos Peña Chavarría y Rocío Romely Elías Garza, en un hecho en el que pudieran haber estado involucrados soldados del 16º batallón de infantería.

En el automóvil atacado por los militares viajaba la familia León Castellanos. El vehículo circulaba alrededor de las 10:30 de la noche sobre la autopista Monterrey-Nuevo Laredo, cuando pasó por un retén del Ejército perteneciente a una de las 30 Bases de Operación Mixtas (BOM) existentes en la entidad.

Las versiones oficiales, de la Sedena y del gobierno de Nuevo León, indican que los militares ordenaron al conductor del auto Malibú detenerse para una revisión, pero esto no ocurrió y metros adelante los ocupantes fueron baleados por los soldados. Murieron Vicente de León Ramírez, de 52 años de edad, y su hijo de 15 años, Alejandro Gabriel León Castellanos.

Este nuevo hecho de sangre cometido por tropas en contra de ciudadanos civiles, se suma a al menos cuatro agresiones de militares hacia la población en diversas circunstancias.

En los anteriores acribillamientos la reacción de los gobiernos estatales de Tamaulipas, de Sinaloa, de Nuevo León y de Chihuahua, aspi como de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) fueron tardías, inverosímiles e impertinentes (el 30 de abril, Día del Niño, tras haber disparado y dado muerte a los hermanos Brian y Martín Almanza, de 5 y 9 años de edad, en Tamaulipas) o no se produjeron.

En esta ocasión, la única diferencia con esos episodios ha sido la pronta respuesta de la Defensa Nacional a través del gobierno estatal, reconociendo de inmediato que se cometió un error al dispar contra la familia León Castellanos y asumiendo toda la responsabilidad de los gastos médicos, por los heridos, y funerarios en cuanto a las víctimas.

Eso era lo menos que podían hacer los mandos castrenses luego de sumarle otra raya al tigre al emplear métodos en los que el uso de la fuerza no solo es excesivo, sino criminal. Pero hay más; el secretario del Consejo de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, no perdió tiempo y accionó con prontitud para aplicar una adecuada estrategia mediática de control de daños ante la prensa nacional y extranjera.

El objetivo era que la brutalidad de los militares bajo el mando del Coronel Saúl Luna Jaimes, Comandante del 16 Batallón de Infantería perteneciente a la Séptima Zona Militar, en Escobedo, Nuevo León, no empañara de nuevo la cercana fecha de los festejos Centenario y Bicentenario de la Revolución y la Independencia del país.

Poiré casi lo consigue, porque la versión de los sobrevivientes del ataque comienza a ser difundida con fuerza dentro y fuera de México y con ello se reaviva al fuego de en torno al tema del Fuero Militar, de la pertinencia o no de que en casos como éste, las tropas abusivas sean juzgadas por civiles y no en Consejos de Guerra Ordinarios en los que la Sedena en siempre juez y parte.

También regresa con este doble asesinato, el tema de las medidas de fuerza desproporcionadas con las que militares y navales buscan detener vehículos sospechosos y que terminan produciendo daños colaterales, como los llamó el General Guillermo Galván hace más de un año.

En cualquiera de los dos casos sobre cómo se originó el ataque militar, las versiones terminan confirmando un hecho: que los soldados no fueron agredidos, que nadie les disparó primero y que el fuego a discreción surgió cuando el vehículo de la familia León Castellanos ya había rebasado o estaba por terminar de rebasar o pasar el punto en el que se encontraban las tropas del 16 Batallón de Infantería.

Los militares responsables están detenidos en el cuartel de Escobedo, Nuevo León, y se les trasladará al Distrito Federal en las próximas horas para interrogarlos y presionarlos para que digan exactamente cómo ocurrieron los hechos.

Como en el caso de los niños Brian y Martín Almanza Salazar, en esta ocasión también hubo sobrevivientes pero con un agravante para la Sedena y para el Coronel Luna Jaimes y sus muchachos: ahora no existe el pretexto de un fuego cruzado contra sicarios del Cartel del Golfo (CDG) para tratar de explicar el acribillamiento de otra familia inocente.

¿Y la Trata de Personas?

El presidente Calderón y sus asesores en materia de seguridad y justicia omitieron abordar en el Cuarto Informe de Labores datos, cifras, avances, estadísticas referencias acera de lo que se ha hecho en la actual administración para combatir el delito de Trata de Personas.

La omisión es justificable para los asesores y operadores de Los Pinos, ya que en el documento sobre el cuarto año de gestión calderonista se pondera con todo la agenda de seguridad, iniciando con todo lo referente al combate a los cárteles de la droga y a la captura de capos, operadores, jefes de sicarios y sicarios relevantes.

La lista contiene los nombres de 38 personajes del narco clasificados como Líderes Nacionales, Líderes Regionales, Lugartenientes Estatales y Lugartenientes o Encargados de Plaza, de los nueve cárteles de la droga que operan en México.

Pero del creciente delito de la Trata de Personas, íntimamente vinculado a las actividades de los cárteles la droga, el presidente Calderón no citó o escribió una sola palabra pese a que datos de organizaciones civiles han señalado insistentemente que en México las cifras de su incidencia rebasan los 70 mil casos al año, todos ligados a estructuras criminales asociadas al narco.

El dato fue citado por el Ombudsman capitalino Luis González Plasencia durante Cuarto Diplomado “Trata de personas con fines de explotación sexual de niñas, niños y adolescentes con perspectivas de género”.

En el informe de Calderón la incidencia de este fenómeno delictivo no aparece tampoco en los cuadros estadísticos que uno puede hallar en los Anexos del documento. Esto es grave. La masacre de 72 indocumentados centro y sudamericanos ocurrida en la ingobernable e ingobernada Tamaulipas (estado fallido ubicado al Noreste de México) confirmó la presencia y control de cárteles como el de los Zetas en torno a ese delito.

El secuestro, la extorsión, la trata de personas –que acaba de ascender mundialmente del tercero al segundo sitio en la deshonrosa pirámide de los delitos de mayor impacto en el mundo, de acuerdo con la ONU– son las fuentes alternas de recursos para sicarios, operadores y narcomenudistas bajo presión.

Ignorar presidencialmente estos hechos incontrovertibles abre la puerta a percepciones erróneas en las que el combate a un delito central permite la expansión de los otros, convierte en una historia sin fin su erradicación o control y hace posibles nuevas masacres o ajusticiamientos como el ocurrido en Tamaulipas.

Por lo pronto, diputados federales encabezados por la panista Rosi Orozco exigirán a diversas autoridades mediante un exhorto, la urgente actualización de las cifras oficiales en torno este delito ya que los 70 mil casos mencionados por González Plascencia rebasan cualquier estimación que hasta hace unos días se tenía sobre la gravedad de este tema.

Madrazo a Peña y Manlio

Francisco Rodríguez / Índice Político

FUE UN TABASQUEÑO, Leandro Rovirosa Wade, quien allá por 1975 “destapó” a los aspirantes a suceder a Luis Echeverría Álvarez en la primera magistratura del país: Mario Moya Palencia, Augusto Gómez Villanueva, Porfirio Muñoz Ledo, Hugo Cervantes del Río, Carlos Gálvez Betancourt y, last but not least, José López Portillo. Tales fueron los originalmente “balconeados”, pero el editor de un diario capitalino agregó en la lista a un séptimo, su hermano, y fue así como Luis Enrique Bracamontes apareció con (nulas) posibilidades de arribar a Los Pinos.

Tal “destape” de Rovirosa, evidentemente ordenado por Echeverría, tenía un par de propósitos. El primero, “sacar de la jugada” a Emilio Mújica Montoya, a quien meses antes había señalado cual idóneo el entonces gobernador de Guerrero Rubén Figueroa. Fue entonces cuando el mismo guerrerense acuñó aquella frase que, por ejemplo, hoy sienta bien al PAN: “la caballada está flaca”.

Un segundo objetivo tendía a menguar a la llamada “bufalada” que, en tropel, seguía y perseguía a Moya Palencia, a quien la mayoría de los priístas –incluso quienes no militaban en el tricolor– daban como “el bueno” para la sucesión.

Sabido es el resultado de aquellos “destapes”. No fue Mújica Montoya el candidato del PRI, pero tampoco lo fue Moya Palencia, sino un recién arribado a las filas tricolores, López Portillo, quien recibió “la bendición” o, diría Luis Spota, quien escuchó las “palabras mayores”.

Treinta y cinco años después, otro tabasqueño adopta el papel de “destapador”, en un afán de emular a Rovirosa Wade o ¿incluso el de Luis Echeverría Álvarez?

Y es que hoy es Roberto Madrazo quien, desde su autoexilio partidista –que no político–, reduce a sólo dos la lista de “suspirantes” a la candidatura presidencial del tricolor para el muy esperado –a todos nos urge que ya llegue– 2012: Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones. No hay más. Incluso “baja” a Beatriz Paredes Rangel, a quien Emilio Gamboa Patrón –¿el Figueroa de nuestros tiempos?– había enlistado hace pocos meses.

En una entrevista “banquetera” celebrada en Toluca, a donde Madrazo acudió como invitado a la ceremonia en la que el gobernador mexiquense rindió su quinto informe de actividades públicas, el ex presidente del PRI y ex candidato presidencial derrotado en 2006, descalificó a su sucesora en la dirigencia partidista porque, dijo, los resultados electorales del mes de julio inmediato anterior la dejaron mal parada. Si tales hubiesen sido los criterios a seguir hace cinco años, Madrazo tampoco hubiese aparecido en las boletas de la más reciente elección

Pero, amén de “tumbar” a Paredes, ¿qué persigue Madrazo al dejar sin cobijo las legítimas ambiciones del gobernador del Estado de México y del presidente de la Cámara de Senadores?

No quisiera creer que, al apoyarlos, Madrazo estuviese en realidad golpeándolos. Porque, mire usted, ser “candidato de Roberto Madrazo” no es como para presumir, sobremanera por la pésima fama pública que inviste al derrotado candidato presidencial.

Porque, mire usted, Madrazo no sólo dejó fuera a otros priístas que también “tienen su corazoncito” en esta lisa. Lo peor es que colocó a estos en posición de “blanco” para que cualquiera les lance piedras, ajos, cebollas… lo que se acostumbra en estas lides, pues.

Los reveló hasta complotistas: que los dos ya platicaron, en un desayuno celebrado el lunes de la semana anterior, y están de acuerdo en construir una candidatura fuerte y declinar por el mejor posicionado para evitar el “choque de trenes”, porque han aprendido que no pueden competir con pugnas, soberbia, ambiciones, ni “mezquindad”, como ocurrió en otro momento, el del mismo Madrazo.

¿Fuego amigo de Madrazo en contra de Peña y de Beltrones?

¿Por qué no, mejor, el tabasqueño “destapa” a los panistas?

Ya la maestra Elba Esther Gordillo, su archienemiga, hizo su tarea. “Destapó” a dos del blanquiazul: al señorito Lujambio y a la señora Vázquez Mota, quienes dijo están “más preocupados y ocupados en el 2012 que en la educación”.

¿Madrazo a Peña y a Beltrones? ¿Cómo el de Gordillo a Vázquez y a Lujambio?

Índice Flamígero: “El mal llamado crimen organizado es hijo del crimen legalizado—impunidad— y de la conciencia acallada. Esta es una de tantas aberraciones a las que conducela dictadura del relativismo ético y jurídico, propiciado por un laicismo intransigente, que se impone a troche y moche en nombre del moderno igualitarismo, es decir, de las mayorías manipuladas por minorías agresivas e intolerantes”, reza una reflexión del Obispo de Querétaro, Mario de Gasperín Gasperín.

Las consecuencias de la ilegitimidad

Javier Sicilia

La democracia en el México moderno ha sido tan incipiente como inestable. El primer momento en que pudo haberse logrado, se hundió con la usurpación de Victoriano Huerta, la Revolución Mexicana y el establecimiento de una dictadura de partido. El segundo está por hundirse con el sospechoso ascenso de Felipe Calderón a la Presidencia y la absurda guerra que desató contra el crimen.

Aunque uno y otro momentos tienen características diferentes –el primero fue burdo golpe de Estado que concluyó en la guerra y el establecimiento del poder del grupo de Sonora sobre los cadáveres de sus enemigos; el segundo, cuyas consecuencias aún no vemos, se fincó en un juego mediático y de manipulación de votos, que derivó en una guerra contra el crimen, en la ingobernabilidad y en un conjunto de facciones políticas, llamadas partidos, que se disputan no el gobierno, sino el poder para administrar esa misma ingobernabilidad–, ambos muestran que la crisis de nuestra democracia tiene que ver con la ilegitimidad.

Cuando no hay legitimidad –ya sea por usurpación violenta o por fraude electoral–, no hay manera de consensuar. Se gobierna con la fuerza o se vive la guerra. Calderón decidió gobernar con las dos: inventó una guerra para gobernar con la fuerza. Pero, al igual que Huerta, terminó rodeado por la guerra. El primero huyó –las razones políticas de las facciones que se le opusieron eran tan moralmente sólidas, y la poca fuerza armada que tenía a su lado tan débil, que no había forma de permanecer–.

Calderón no lo ha hecho. Las razones de su guerra son absurdas en el orden político, pero moralmente correctas. Sin embargo, las consecuencias son igualmente atroces. En medio de una guerra que día con día se le va de las manos y cuyos costos son cada vez más espantosos; en medio también de su incapacidad para generar consensos políticos, el país no sólo vive el horror de los enfrentamientos entre los cárteles y los que éstos libran contra el Ejército y la policía, sino también el horror de las guerras mediáticas de los faccionalismos partidistas. Lo que en la época de Huerta era, para decirlo con Emilio Rabasa, La Bola, que luchaba por conquistar una grandeza negada: la democracia, en la de Calderón es una Bola sin rostro que lucha por lo más pueril: el poder y el dinero.

En esas condiciones, 2012 se anuncia atroz. ¿Habrá condiciones para un ejercicio verdaderamente democrático que lleve al poder no sólo a un presidente legítimo, sino capaz de hacer los consensos político que requiere el país y pacificarlo? ¿Surgirá, en medio de la ingobernabilidad, la tentación en Calderón de crear un estado de excepción y, a la manera de Fujimori, intentar prolongar su estancia en el poder? ¿O esa tentación surgirá en el mismo Ejército que, imposibilitado para tener un marco legal en esta guerra, querrá tomar su propio camino? ¿El crimen organizado logrará penetrar de tal forma las filas del gobierno y de los partidos políticos que lo que tendremos será un presidente coludido con la barbarie? ¿Asistiremos –como sucedió bajo las consecuencias de la usurpación de Huerta– al ascenso de un grupo de poder que se perpetuará en él mediante la corrupción y la fuerza o, en otras palabras, veremos el retorno de un PRI que administrará la corrupción de las instituciones que creó y que la mediocridad de Fox no supo cómo desmantelar y refundar? ¿Qué sucederá con la izquierda que no logra reunirse; con los grupos disidentes que, como la izquierda de AMLO, el zapatismo chiapaneco o las guerrillas radicales, tienen aún un proyecto político? ¿Cómo jugarán sus cartas en medio de esta Bola más oscura que la de los tiempos de la Revolución?

Es imposible decirlo. Las consecuencias de la ilegitimidad abren un panorama sombrío que no anuncia un futuro promisorio para la democracia y la reconstrucción de un país que entró en el caos.

El lector, sin embargo, tendrá sus esperanzas. La mía es tan incierta y absurda como la de cualquier otro que en medio de la oscuridad del país camina a tientas en busca de una puerta, mientras imagina cómo puede llegar a ella: creo, después de escuchar las conclusiones de los “Diálogos por la Seguridad” a los que convocó Calderón, que su estancia en el poder es más dañina que su ausencia. Calderón debería irse, o bien, las Cámaras debieran destituirlo y colocar en su lugar a un presidente interino cuya legitimidad permitiera crear los consensos que salvaran la vida democrática y las elecciones del 2012. Esos hombres aún existen en nuestra vida política. Sin embargo, ¿las facciones tendrían el valor y la estatura moral de hacerlo? y, en ese caso, ¿tendrían –lo que no tuvieron los hombres de la Convención de Aguascalientes– la altura política para respetarlo y respaldarlo?

¿Quién podría saberlo? Sin embrago, prefiero hacer un esfuerzo de razón que aceptar una política de poder cuya ilegitimidad nos tiene sin sueño. Una buena regla de conducta es pensar que aún hay espíritus libres que pueden encontrar una salida razonable a lo irracional.

Además opino que hay que respetar los Acuerdos de San Andrés, liberar a todos los zapatistas presos, derruir el Costco-CM del Casino de la Selva, esclarecer los crímenes de las asesinadas de Juárez, sacar a la Minera San Xavier del Cerro de San Pedro, liberar todos los presos de la APPO y hacer que Ulises Ruiz salga de Oaxaca.

King y S[a]lim


Via Notimex

Ciudad de México.- El escritor y comunicador estadunidense Larry King aconsejó a los más de 10 mil estudiantes que se dieron cita en su ponencia, que siempre traten de vencer la adversidad por muy difícil que parezcan las situaciones.

En el marco de las actividades de "México siglo XXI", King habló sobre su carrera; asimismo, destacó la historia de unos amigos en la adolescencia, que marcó sus vidas y también los hizo entender que deben luchar por sus sueños.

Imagen: Larry King, de origen judio, es uno de los principales comunicadores de la Cadena de Noticias CNN; y, Carlos S[a]lim, de origen libanes, es el principal accionista de TelMex y esta catalogado como el "Hombre Mas Rico del Mundo."

Mexicanidad y México sin el PRI

© Conciencia Mexicana, Año 1, No.1 (Primavera 1997).

Conciencia Mexicana: Lic. López Portillo, vivimos sin duda una de las grandes etapas de la historia de México, quizás análoga a la Independencia, la Reforma o la Revolución. Desde la perspectiva del México de la antigüedad, del cual es usted un gran conocedor, y del México que a usted le ha tocado vivir, me gustaría saber ¿qué México vislumbra para el año 2015 ó 2020 en los diferentes aspectos sociales, políticos, culturales y religiosos?

José López Portillo: Bueno en primer lugar quiero decir que yo creí en México desde que era muy niño, sin duda por la influencia de mi padre. Especialmente en mi adolescencia viví era creencia casi como una religión que me impulsaba y que se llamaba México. Significaba para mí una fe enorme, una gran esperanza y hasta un principio de caridad. Fé, Esperanza y Caridad, como fenómenos teologales, respecto de mi patria, que me emocionaban hasta las lágrimas y que viví muy intensamente. * * *

La historia de México es al mismo tiempo la de España y la de México, y así, junto con su vida, es tal vez la historia más grande de la humanidad, porque vive planteamientos extraordinarios. Uno de ellos es precisamente el encuentro de esta dualidad, que es un proceso de universalización.

C.M.: En este contexto ¿qué pasa con México en el campo internacional, (gravitacional)? Estos cambios hacia la democracia, ¿qué peligros y qué oportunidades presentan como parte de los intereses globales?

J.L.P.: Casi al formular la pregunta está envolviendo la respuesta; me ayuda con ella. Lo que yo veo es que, si nos percatamos bien, estamos en este momento en un proceso de integración globalizadora, cumpliendo este destino dialéctico de integración del que hablamos al principio y que, ya visto así, cobra sentido con in dato concreto.

Mientras empezamos a integrar, en esta integración, hemos tenido—y esto es muy importante—, hemos tenido que sacrificar una de las grandes características de la Revolución Mexicana, de la cual ya no se está hablando ahora, es más, se está empezando a no hablar para nada de ella. Una de las características de la Revolución fue la gran hazaña de este siglo: conjugar la democracia formal, electoral, que postuló Madero con su “Sufragio Efectivo. No Reelección,” con la democracia social, que justificaba la creación de un partido que siempre tenía que ganar, porque el triunfo de las armas era el triunfo de una serie de ideas que no podían abandonarse sólo por capricho circunstancial de las mayorías, que es uno de los defectos que tiene la democracia formal.

En la democracia al estilo norteamericano, por ejemplo en la democracia electoral, lo que importa es la opinión de las mayorías y nada más. Ese sueño de la democracia americana, y a este propósito sirven los partidos. Entonces, como esa democracia y esa expresión vigente de un modelo político es tan prestigiado por ser la fuerza más fuerte del mundo—, justificaban un partido único como era el PRI, o un partido con las características del PRI, que empieza a ser agua porque ya no se justifica, no hay un ideario que defender.
Entonces vamos a dejar que las mayorías decidan; lo que tiene un peligro jurídico, ya que un capricho de acuerdo de voluntades circunstancial porque las señoras o los señores amanecieron con la ventolera de votar por alguien o por algo… bueno, eso es un acuerdo muy reducido en el tiempo, que quién sabe cuánta vigencia vaya a tener y qué cambios pueda tener mañana. * * *

C.M.: En su opinión ¿existe una relación directa entre Estatismo y Nacionalismo? ¿Cuál es su posición en el debate Privatización-Estatismo?

J.L.P.: Yo no creo que se pierda la esencia de nuestro nacionalismo. Es una pérdida para mí, para mi modelo político, una pérdida innecesaria del patrimonio nacional, pero no una pérdida de nuestra esencia nacional, que está en la esencia de cada mexicano y en cuanto nos sirve para universalizarlos. Hay que recordar que se es mexicano para ser universal, por lo menos eso creo yo, y que en todos los avatares estamos viviendo ha a habido siempre cambios de modelo económico, de estatismo y economía mixta.

Yo, en lugar de privatizar, nacionalicé todavía más, porque era mi convicción estatista y de economía mixta. Ahora ya no creen en ello, porque resultó que los problemas del país no se pudieron resolver ante esta avalancha globalizadota que trae una etiqueta de neoliberalismo; esa avalancha nos impidió resolver nuestros problemas y, entonces, quien ahora tiene la responsabilidad cree que el otro modelo económico es el que debe prevalecer. Ya veremos, ya veremos.

C.M.: Licenciado ¿hay México sin el PRI?

J.L.P.: ¡Sí, claro, claro que hay México sin el PRI! No el México que yo viví y que yo entiendo. Pero sé que las cosas se terminan y hay cambios. Entonces, el PRI fue un broche que cerraba un sistema político, no un régimen jurídico. El PRI cerraba ese sistema político que ahora se autoacota y que va a cambiar a otro. Entonces, claro que sí tenemos México, como lo dije en alguno de mis informes, México es superior a toda crisis, está por encima de muchas tesis, ¡no faltaba más!

José López Portillo fue Presidente de México 1976—1982

La Casa Madero


© CERRUTI, MARIO: “PROPIETARIOS, EMPRESARIOS Y EMPRESA EN EL NORTE DE MÉXICO” Ed. Siglo XXI (2000), pp.49 et seq.

FUE A COMIENZOS de la década de 1870, cuando uno de los más grandes beneficiarios del auge de la Guerra de Secesión, Evaristo Madero Elizondo, se marchó de Monterrey, retornó a Coahuila y se asentó en Parras, en las proximidades de la comarca lagunera. La trayectoria y el comportamiento de Madero desde los años de mil ochocientos cincuenta resulta un auténtico paradigma de las oportunidades de enriquecimiento que brindaba esta economía de la frontera. Residente en Río Grande (Villa de Guerrero, Coahuila, a pocos kilómetros de Piedras Negras), Madero se convirtió a mediados de la década de 1850 en un experto traficante que operaba entre Monterrey, el Bravo y San Antonio. Introductor de algodón, muchas veces imputado de contrabandista, completó su desenvolvimiento mercantil con la propiedad de ganado y vastas extensiones de tierras en plena área fronteriza. Buen amigo del gobernador y comandante Santiago Vidaurri, diputado del estado unificado de Nuevo León-Coahuila, Evaristo Madero aprovechó con notoria eficiencia el sistema de poder político-militar y el ordenamiento aduanal y arancelario que Vidaurri instauró desde 1855.

En enero de 1864 una persona indicaba que “la aduana de Piedras Negras producía a Vidaurri, únicamente por concepto de derechos sobre el algodón, cincuenta mil pesos mensuales, habiendo recibido en el mes anterior 7,000 pacas, por las que se pagaron a razón de ocho pesos cada una. El tráfico con Texas tenía empleados más de tres mil carros en el comercio, y la circulación de dinero texano en Nuevo León, desde el comienzo de la Guerra de Secesión llegaba a un efectivo de tres millones.”

Cuando en Monterrey comienza a configurarse un grupo mercantil se reconocerá en Evaristo Madero un asociado natural. Con Patricio Milmo—el angloparlante yerno del gobernador Vidaurri—y con amigos de San Antonio (Jean-Baptiste Lacoste, John Twohig), Madero constituyó uno de los equipos más prósperos de todo el norte de México y Texas durante la Guerra de Secesión y la Intervención Francesa. Fue uno de los hombres que mejor aprovechó el explosivo incremento del tráfico que vivieron Eagle Pass y Piedras Negras, en especial entre 1863 y comienzos de 1865.

En 1865 se instaló en Monterrey. Organizó entonces la firma Madero y Cía., que encabezó los negocios de la familia Madero hasta la fundación del Banco de Nuevo León, en 1892. Madero y Cía. integró como socio secundario a Lorenzo González Treviño, yerno de Evaristo y componente de otra de las familias que habrían de enriquecerse y destacar en Monterrey, La Laguna y Chihuahua en los años de 1870s y 1880s. Cinco años después de su fundación, en 1870, Madero y Cía. fue trasladada a Parras tras adquirir la hacienda vitivinícola El Rosario y la fábrica textil La Estrella. Los capitales acumulados en el comercio fueron transferidos, muy desde el inicio, a la producción. Y desde el principio tuvieron que ver con agricultura e industria. Evaristo también fue Gobernador de Coahuila de 1880 a 1884. Otro yerno, el Lic. Viviano L. Villarreal, fue Gobernador de Nuevo León en dos ocasiones: 1879-81 y 1911-1913.

No puede extrañar que la familia Madero—como los González Treviño—tuviera una participación significativa en el desarrollo algodonero de La Laguna a partir de 1870. En un triple sentido: como prestamistas de agricultores que se iban asentando en la comarca; como comerciantes de algodón; y, como consumidores industriales de fibra.

Imagen: Francisco I. Madero y Emiliano Zapata