viernes, abril 01, 2011

Video: Molinar Horcasitas (alías Herodes) llama mentiroso a López Obrador


http://www.youtube.com/watch?v=jq9CVS2bZOo

La PGR, de mal en peor

Raymundo Riva Palacio / Estrictamente Personal

Marisela Morales fue propuesta por el presidente Felipe Calderón para ocupar la Procuraduría General de la República, y de ser aprobada por el Senado, será la primera mujer que llega a ese cargo en su historia. El tercer relevo en la PGR se dará justo a días de que la arroparan en Washington la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y la primera dama, Michelle Obama, al premiarla como la mujer más valiente de México. Pero no hay que perderse en la celebración y el oropel. Por años ha chapaleado en el lodo, como soldado incondicional del Presidente en turno, a costa de la Ley que está obligada a procurar.

Morales es la metáfora de la burócrata que por disciplinada y gris llega a la cúspide de su carrera. Fue revivida por el entonces procurador Eduardo Medina Mora, que la nombró jefa de la Subprocuraduría Especializada para Delitos contra la Delincuencia Organizada (SIEDO), tras descubrir que sus mandos trabajaban para el narcotráfico. En una paradoja que marcó su destino, estaba tan excluida y arrumbada en la última fila de la SIEDO, que no fue contaminada por la corrupción imperante.

Entró al cargo empapada de miedo. No quería aparecer en conferencias de prensa y en las primeras en las que participó pedía que no le tomaran fotografías de la cara. Entró en la tormenta de la “Operación Limpieza”, pero no tuvo que hacer nada, pues cuando se supo públicamente del caso ya estaba en manos del juez. Lo que sí le encargaron fue el llamado “Michoacanazo”, la acción donde se detuvo a una treintena de políticos michoacanos por su presunta vinculación con los cárteles de la droga. Prácticamente todos los detenidos se encuentran en libertad, en parte porque no se integraron al expediente todas las pruebas de que disponían las autoridades. La jefa de la SIEDO no hizo bien su trabajo, debido a lo cual una operación judicial de gran envergadura se convirtió en un asunto meramente político. Jurídicamente, se puede argumentar que fue un fiasco. No importó en su designación. La forma como se ha prestado a la politización de casos jurídicos, parecen ser hoy una virtud.

El caso más famoso fue el desafuero contra el entonces jefe de gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel Lópéz Obrador, cuando lo acusaron de haber violado la suspensión de un amparo en el predio “El Encino“. El caso, paradigmático en el gobierno de Vicente Fox, lo construyó el procurador Rafael Macedo de la Concha, quien responsabilizó de ello a Morales, que era la coordinadora general de Investigaciones de la PGR.

El alegato de Morales en contra de López Obrador fue que al negarse a detener las obras en “El Encino” -un camino para conectar a un hospital en Santa Fe-, había inutilizado el terreno y ocasionado graves perjuicios a los dueños de la propiedad. Para que pudiera ser juzgado ante el ministerio público, el Congreso lo desaforó. En vísperas de que se girara orden de aprehensión en contra de él, Fox fue persuadido del error político que estaba cometiendo -por una falta administrativa menor que alcanzaba fianza-, y reculó.

El desafuero de López Obrador causó el despido de Macedo de la Concha y el retiro temporal de la PGR de Morales, quien ya había abusado antes de su poder. En 2005 se le abrió una investigación por falsificación de pruebas y delitos contra la administración de justicia, por haber acusado a Benjamín Sánchez Magallán, ex coordinador de la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada -antecesora de la SIEDO-, de sustracción de documentos del caso del crimen del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo. Morales lo acusó en 2003 de desaparecer la declaración del nuncio papal Jerónimo Prigione, por lo que lo arrestaron. Sánchez Magallán se amparó y la denunció por las irregularidades en su consignación.

Tampoco importó. Morales ha probado ser funcional al Ejecutivo, como no lo fueron sus antecesores. Medina Mora, renunció tras negarse a usar a la PGR políticamente y perseguir a gobernadores del PRI en vísperas de las elecciones federales de 2009. Arturo Chávez también se rehusó a politizar la justicia y mejor se fue. Morales no era la primera carta presidencial para la PGR, pero una vez consumado el relevo, dados sus antecedentes, no tendrá problema alguno, cuando sea necesario, de torcer políticamente la ley en beneficio del Ejecutivo. De ser así y el Senado no la frena, la nueva procuradora será el sueño que deseaban muchos panistas para 2012.

¿Tú le crees a Calderón?

Francisco Rodríguez / Índice Político

La democracia tiene sus bemoles. Luminosa, sí; pero también oscura. El pueblo elige a veces seres tan despreciables que uno mismo se cuestiona si la salud mental de los electores será la adecuada o si los partidos políticos están ya tan podridos y enfermos que ni siquiera analizan las trayectorias de los auténticos delincuentes que registran y postulan a los cargos de elección popular.

Nuestra clase política está muy enferma y el país está pagando las consecuencias. Delincuentes, saqueadores, ladrones, deshonestos, y por supuesto los mentirosos. Todos ellos detentan el poder en todos los niveles. Lo peor es que hasta allí han llegado con el voto popular obtenido por vías legales, las más de las veces, y espuriamente, en otras.

Así cualquiera se pregunta, cómo es posible que millones de electores se equivoquen de manera rotunda al permitir a individuos cuya autoridad moral es nula sean quienes presuntamente administren el país.

Dirán lo de siempre: son los riesgos de la democracia. Que el mismo pueblo se encargará de rectificar el rumbo con un nuevo voto, una vez que haya reconocido su error. Pero, mientras, las instituciones se devalúan por la estupidez, la corrupción, el amiguismo y el compadrazgo de quienes han accedido a los cargos públicos para saciar su ambición de poder y engordar sus cuentas bancarias sin la menor pizca de vergüenza. El pueblo observa todo con impotencia y desidia.

La democracia tiene un alto costo político, económico y social. La voz del pueblo no es la voz de Dios. Este no es un asunto divino. Este es un asunto de “marketing” bien utilizado por un montón de “mercenarios” de la publicidad que venden toda su creatividad y talento a políticos que tratan de crearse una imagen de consumo popular que la gente se “traga” como si fuera un producto comercial más. Es decir, nos venden imágenes de políticos como si fueran galletas, refrescos o dulces que debemos consumir para obtener bienestar y felicidad.

Un delincuente, mentiroso, vividor y mantenido, súbitamente es el gran líder, propulsor de la economía, honrado administrador, promotor de obras y alma caritativa incapaz de echarse un peso al bolsillo. Funciona para un alcalde. Igual para un diputado, senador y gobernador. Incluso para quien se dice presidente.

Todo ello no obstante que muchos conozcamos la clase de sanguijuela que es cada uno. Con la ayuda de los medios y muchos millones de pesos transformaran a aquel infeliz, en el “jefe” político, en el líder. Y lo peor es que pocos o ninguno de los líderes de opinión tendrán la valentía de señalarlo como lo que es realmente: un ladrón estafador, un mentiroso que se aprovecha del encargo para satisfacer sus ambiciones personales y las de su grupo o partido político. Y no tendrán el valor, no porque les valga, sino porque entre otras cosas obtendrán privilegios a cambio de su silencio.

Por tal es que, aunque resulte monótonamente aburrido y hasta predecible, hay que señalar cual mentiroso al señor Felipe Calderón. Ya no hay nada en él que nos sorprenda. Es como el personaje de aquella canción, pues “siempre miente, miente, miente”.

Una de sus mayores falsedades: aquella en la que nos aseguró que nunca dijo guerra. Una que perdurará por siempre: la de que se convertiría en presidente del empleo y de la seguridad. Una reciente, que no citó a los dirigentes del PAN para empujarlos a forzar una alianza con el PRD en el Estado de México. Una tras otra.

¿Para qué invita, si no, a los dirigentes formales panistas semana a semana en Los Pinos? Este miércoles, acaso, ¿para comentar el partido de futbol de la también fallida Selección Nacional? ¿Acaso para platicarles que la medianoche previa le ofreció una cena a Plácido Domingo en las instalaciones del hotel Presidente Intercontinental?

Mentira, pues, que el ocupante de Los Pinos no haya hablado ante los panistas de lo que, por el momento, le obsesiona: la elección del Estado de México, que su partido, el albiceleste, no quede en tercer y último lugar –cual sucederá– de no inflarse ese salvavidas que, para él, es la alianza con los perredistas.

Miente en todo, pues. A grado tal que ya hay quienes han revivido, parafraseándolo, aquella frase tan popular hace poco menos de seis años: ¿Tú le crees a Calderón? ¡Yo tampoco!

Índice Flamígero: Ociosa resultará la ratificación por parte del Senado de la República al nombramiento de Marisela Morales como titular de la PGR. El visto bueno fue otorgado hace unas semanas por la señoras Obama y Clinton, en el mismísimo Washington, ¿o no?

Los aviones de la Paz


Tomado de la R e d

La historia en las películas


por silvina / Historia sobre historia

Las películas históricas siempre son una atracción casi irresistible para quienes somos aficionados a la historia. Y, a la vez, los buenos filmes de época suelen ser una buena forma de entrar en el pasado, conocer algunos de sus protagonistas y ver cómo vivían aquellas antiguas sociedades.

Aquí dejamos una selección de películas históricas para diversos períodos. Seguramente muchas podrán quedar fuera, los invitamos a compartir cuáles son sus favoritas.

Prehistoria: En busca del fuego

Egipto: Tierra de faraones; Cleopatra

América Precolombina: Apocalypto

Israel: La Pasión de Cristo

Grecia: Troya; Alejandro el magno; 300

Roma: Julio César; Espartaco; Yo, Claudio; Cleopatra

Edad Media: El Cid; Braveheart (Corazòn Valiente); Enrique V; La pasión de Juana de Arco.

Edad Moderna: El tormento y el éxtasis; La reina Isabel en persona; La vida privada de Enrique VIII; Ana de los mil días; Elizabeth, Elizabeth la edad de oro; Cromwell; Rembrandt; María Antonieta

América Colonial: 1492; La conquista del paraíso,;Yo la peor de todas; La Misión; El nuevo mundo; El último mohicano

Revolución Francesa e Imperio: La inglesa y el duque; Danton; La noche de Varennes; Napoleón; Waterloo; Guerra y paz

América Independiente: El patriota; El Álamo; Amistad; Lo que el viento se llevó; El nacimiento de una nación; Camila

Siglo XIX: Master and Commander; Al otro lado del mundo; Ludwig (Luis II de Baviera); Copying Beethoven; El último samurai; Zulú; Ana y el rey; Juárez

Revolución rusa y URSS: Anastasia; Nicolás y Alejandra; El acorazado Potemkin; Octubre

Primera Guerra Mundial: Adiós a las armas; Gallipoli; Sin novedad en el frente

Segunda Guerra Mundial: Patton; El hundimiento; Rommel el zorro del desierto; La lista de Schindler; El día más largo

Siglo XX: ¡Viva Zapata!; Lawrence de Arabia; Gandhi; El último emperador; Ararat; Trece días; Bienvenido Mr. Marshall; Soldados de Salamina; Los santos inocentes; Eva Perón; Arde Mississippi; JFK; Apocalypse Now; Platoon; La noche de los lápices

Ejército, ¡al cuartel!

Astillero / Julio Hernández López

Ejército, ¡al cuartel!
En corto plazo, pide ONU
PGR: Marisela Michoacanazo
Pruebas y equívocos en Edomex


La cháchara de corte electoral quita visibilidad a pronunciamientos de alta importancia para el país, como el que ayer emitieron los integrantes de un grupo de trabajo de Naciones Unidas que ha solicitado a la administración calderonista que retire de actividades policiacas al Ejército en el corto plazo, pues el embate verde olivo ha hecho crecer las violaciones a los derechos humanos y las mantiene impunes, en particular las relacionadas con desapariciones forzadas o involuntarias.

Luego de dos semanas de recopilar información en nuestro país, el mencionado grupo de trabajo ha elaborado un reporte que será dado a conocer oficialmente en marzo de 2012 en sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Para entonces, miles de mexicanos habrán muerto y otros tantos habrán sufrido secuestro, tortura e incriminaciones dudosas a cargo del aparato nacional de confrontación bélica al narcotráfico, que paso a paso va siendo controlado por mandos militares y que entre algunas de sus definiciones no escritas tiene la de exterminar de manera sumaria a los presuntos delincuentes.

Pero es lenta la capacidad nacional de reacción y protesta ante esos terribles abusos documentados y denunciados. La propaganda gubernamental machaca sobre los presuntos motivos patrióticos que alientan las andanzas militares e incluso hay una campaña de medios para familiarizar a los mexicanos con sus fuerzas armadas. Los partidos y sus dirigentes se mantienen embebidos en la rebatiña electoral mientras la sangre corre a ríos y sin visos siquiera de alguna forma de justicia. Las protestas cívicas son desalentadas por el fundado temor a represalias de los bandos denunciados, desacreditada toda oposición social a la presencia de los soldados mediante el recurso simple de adjudicar autoría intelectual y financiamiento de esas movilizaciones a determinados grupos delictivos.

El retorno de los militares a los cuarteles es una exigencia básica para ir desmontando el sistema de control social mediante el terror institucional que Felipe Calderón ha ido construyendo para disimular las gravísimas carencias de orden civil de su gobierno. El caos enrojecido que es hoy la nación tiene como origen la impreparación del ocupante de Los Pinos para conducir con pleno respeto a la legalidad a un país necesitado de guerrear contra otros males y no, como sucede ahora, de gastar gran parte del dinero público en acciones de casi imposible fiscalización confiable que en lugar de derrotar al objetivo buscado han provocado desbordamiento de la violencia, odio social prolongado, derogación fáctica de lo que quedaba del estado de derecho, fortalecimiento de ciertos cárteles que se van constituyendo en corporativos de control, y florecimiento en cantidad y ganancias del negocio en sí, el del tráfico de drogas.

Difícil y peligroso resulta en ese contexto abogar por el regreso de los soldados a los cuarteles, pues se suele contraponer con ribetes agresivos el hecho real de que la delincuencia organizada se ha desbordado y por tanto no puede haber otra forma de contenerla y reprimirla que con el uso extremo de las fuerzas militares, aun cuando éstas cometan a ojos vistas abusos constantes (entre otras cosas, porque la lógica del soldado es la de aniquilar al enemigo). Pero, así como una parte de la sociedad ha enarbolado la demanda de No más sangre, es necesario también empujar la exigencia de que soldados y marinos regresen a sus cuarteles y que las autoridades civiles cumplan con sus responsabilidades en el marco de la legalidad, sin pervertir el sentido de las acciones de los militares y sin permitir que esas botas, hoy instaladas en el campo del combate al narcotráfico, acaben incursionando en terrenos políticos y electorales ante la incapacidad confesa de los civiles para arreglar los asuntos públicos.

Pero a Calderón lo que le interesaba ayer era darle salida a un procurador federal de justicia al que mantenía en el archivo muerto desde finales del año pasado, cuando el hastiado Arturo Chávez Chávez había presentado su renuncia al cargo para el que nunca demostró habilidades ni capacidad. Acostumbrado a tener un gabinete disfuncional, con secretarios que funcionan a medias de sus posibilidades que de origen no son altas ni fuertes, centrado todo en él, que es un desconfiado, intrigante e insolidario jefe pinolero, Calderón presentó de inmediato, en busca de la ratificación senatorial correspondiente, a una carta de relevo que en realidad ya había sido colocada en ruta por Michelle Obama y Hillary Clinton el 9 del pasado marzo, cuando le entregaron a Marisela Morales un premio al valor, que sirvió para llenarla de elogios que en términos políticos equivalían a un beneplácito público, a una bendición en Washington para el nombramiento por venir. Con la procuradora Morales, si su designación es aprobada por el Poder Legislativo, el perfil de la PGR seguirá en una larga marcha operativa sin más horizonte que balas, muertos y más sangre, aunque sí con un ingrediente de temporada: la utilización de la PGR para fines electorales, como ya lo hizo la propia MM en el michoacanazo que ahora será libro de cabecera para las operaciones Marimor de inhibición o promoción de los intereses del PAN: la PGRRRR.

La cháchara electoral de la que se hablaba al principio de esta columna produjo ayer abundante material. Para empezar, Alejandro Encinas se negó a avalar las revelaciones de López Obrador sobre presuntos ofrecimientos de Calderón para que fuera candidato de la alianza en el estado de México, mientras el tabasqueño se aferró a su dicho e insistió en que tiene pruebas que presentará en su momento, cuando sea necesario. Molinar HorcABCitas, por su parte, reapareció desde el PAN para decir que Cecilia Romero no mintió ayer al decir que Calderón impulsaba la famosa alianza: nomás se equivocó.

Y, mientras Ebrard se ha desesperado y se ha organizado un destape exprés para informar que sigue siendo precandidato presidencial, ¡feliz fin de semana!

Los pueblos indígenas en el discurso de AMLO

Gilberto López y Rivas

El 20 de marzo se presentó el Nuevo proyecto de nación, del cual Andrés Manuel López Obrador esbozó en su discurso 50 acciones indispensables para la regeneración nacional, partiendo de la tesis ya conocida de que la crisis de México se debe al predominio de un grupo oligárquico, que se conformó durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, mediante la entrega a particulares, nacionales y extranjeros, de los bienes de la nación y el pueblo, sin reparar en el carácter sistémico de esta crisis, enmarcada en las características propias de esta etapa de mundialización capitalista.

El discurso es importante porque en movimientos con un dirigente máximo, como el de AMLO, la criba que él hace del Proyecto de nación, un documento de dos centenares de páginas, da una idea de los énfasis y coordenadas reales del precandidato presidencial, del programa mínimo con el que pretende presentarse electoralmente. También, en el discurso se matizan temas candentes, o se dejan fuera (aborto, derechos de minorías sexuales, guerra sucia, etcétera), mientras que otros son tratados dentro de la lógica de la mercadotecnia electoral: ¿qué tanto conviene sostener una determinada perspectiva para las encuestas, para el apoyo, rechazo o neutralidad de los poderes fácticos? Así, lo que podría ser proyecto de nación, se trastoca finalmente en una plataforma electoral negociable.

Tomemos el caso de los pueblos indígenas, tratados escasamente en la pieza oratoria, donde se les muestra como víctimas que esperan la mano clientelar del Estado: 42. Se atenderá a todos, se respetará a todos, pero se dará preferencia a pobres y desposeídos. Empezaremos a pagar la deuda histórica que se tiene con las comunidades y los pueblos indígenas. Es una infamia que donde hay carencias, pobreza y marginación no lleguen los apoyos que necesitan. Pregunto: ¿quiénes son los que tienen que pagar y quiénes son los que recibirán esos apoyos?: Nosotros = Estado-gobierno = sujeto activo, les pagará a ellos = pueblos indígenas = sujeto pasivo. ¿Dónde quedaron los acuerdos de San Andrés? ¿Dónde las autonomías de hecho actualmente en marcha? ¿Dónde la contrainsurgencia y paramilitarización contra el EZLN y el despliegue de las fuerzas armadas (a las que por cierto se ofrece en otro pasaje cuidar su prestigio) en otras etno-regiones? ¿Qué sobre los presos indígenas? ¿Qué acerca de la criminalización de sus organizaciones? ¿Temas electoralmente incómodos?

En el punto 39, en el contexto de la preservación biológica y cultural de México, pasando por prácticas agropecuarias y la no introducción de semillas transgénicas, se llega finalmente a un párrafo que sostiene: Se respetarán y apoyarán las prácticas económicas autogestivas, tradicionales e innovadoras, habituales entre indígenas y campesinos. ¿Es esta la expresión de las autonomías indígenas contemporáneas, o una vuelta de tuerca más del apoyo estatal a las comunidades tradicionales de indígenas-campesinos?

En el punto 33, donde se proponen carreteras para los 362 municipios que no cuentan con caminos pavimentados, nuevamente los indígenas aparecen, ahora como fuerza de trabajo: Nos comprometemos a construirlos con el uso intensivo de mano de obra comunitaria para generar empleos y fortalecer la economía local. Serán empleados, pues. ¿Qué tipo de empleos?

Si estas son las menciones en torno a los pueblos indígenas que el discurso registra, analicemos otras acciones que los afectan directa o indirectamente. Una de ellas es una propuesta que siempre ha formado parte del Plan Puebla-Panamá, ahora rebautizado Proyecto Mesoamérica, al cual se han opuesto tajantemente las organizaciones indígenas: Se mantiene vigente el compromiso de vincular comercialmente el Pacífico con el Atlántico, mediante el desarrollo integral del istmo de Tehuantepec, lo cual implica la construcción de dos puertos, en Salinas Cruz y Coatzacoalcos, así como un ferrocarril de carga de contenedores y la ampliación de la carretera existente. Todo ello tomando en cuenta a la gente (sic) y con la participación de las comunidades de la región (sic). ¿Cómo participarían las comunidades de la región? ¿Nuevamente como mano de obra intensiva? ¿Se beneficiarían del comercio en gran escala a transportar en esos contenedores? ¿La ampliación de la carretera se haría a costa de territorios comunitarios?

Ya entrados en proyectos extractivistas y desarrollistas que han dañado siempre a los pueblos indígenas se propone, para fines nacionales, la construcción de cinco refinerías, cuatro de ellas en estados con presencia notable de población indígena: Hidalgo, Tabasco, Oaxaca y Campeche, sin considerar lo que significan semejantes proyectos para la vida indígena y el cuidado del medio ambiente. Igualmente, se propone atender con esmero la actividad turística, sin mencionar sus impactos negativos sobre los pueblos indígenas en su territorialidad, control de recursos naturales, folclorización de sus culturas, migración forzada, etcétera.

En el numeral 21 se afirma que se hará valer el artículo 27 constitucional, pero sólo referido al dominio directo de la nación sobre los recursos naturales. ¿Qué pasará con la contrarreforma salinista que provocó –en parte– una rebelión indígena en 1994?

El debate es necesario, imprescindible. En el caso de los pueblos indígenas, las propuestas de seguir empleándolos, concediéndoles desarrollo y respetándolos discursivamente, resultan, paradójicamente, bastante salinistas. Si lo original es, tomando en cuenta los niveles ínfimos en que se arrastra la clase política, plantear un proyecto de nación, lo menos que se puede esperar, si se trata de una convocatoria, es que se dejen de eludir, por cálculo o simple miopía, aspectos apremiantes y fundamentales. En efecto, México requiere un proyecto de nación, pero radical, en el sentido más claro del término: que verdaderamente vaya a la raíz.

Homicidas de Sicilia habrían trabajado en "instituciones públicas": Procurador de Morelos

El procurador general de Justicia de Morelos, Pedro Luis Benítez Vélez, reveló que entre los asesinos de las siete personas, entre ellas un hijo del escritor Javier Sicilia, colaborador de la revista Proceso, hay personal de “instituciones públicas”.

En entrevista, el funcionario se negó a identificar las “instituciones públicas” a las que pertenecen algunos de los asesinos; argumentó que al hacerlo entorpecería las investigaciones. Sin embargo, dio a conocer que ya se giraron las órdenes de aprehensión correspondientes.

Benítez Vélez dio a conocer también ya se confirmó la identificación de los presuntos homicidas.

El lunes passdo, alrededor de las 7:00 horas, fueron encontrados, a un costado de la autopista Cuernavaca-Acapulco, en el municipio e Temixco, siete personas en el interior de un automóvil: cinco jóvenes y dos adultos, entre ellos una mujer y Juan Francisco Sicilia Ortega, el hijo del poeta y periodista Javier Sicilia.

Los cuerpos estaban atados de pies y manos en el interior del vehículo.

Hoy, el procurador de Morelos señaló que entre los posibles involucrados estaría personal de instituciones públicas. “Puede haber entre las órdenes de aprehensión, personal que estuvo involucrado en instituciones públicas, no las puedo precisar porque ustedes deben de comprenderme: afectaría el trabajo de la policía y pondría en riesgo también a elementos del Ejército que está también trabajando en el tema.”

Asimismo, informó que por lo menos dos personas, Jesús Chávez Vázquez, empleado de una constructora, y el estudiante de Administración, Juan Francisco Sicilia, no estaban ligados con el crimen organizado.

En un comunicado, la procuraduría detalló que sólo cinco de las víctimas del multihomicidio en el fraccionamiento Las Brisas se conocían entre sí.

Informó que de acuerdo con familiares de las víctimas, los hermanos Julio y Luis Antonio Romero Jaimes, el tío de ellos, Álvaro Jaimes Avelar, así como Gabriel Alejo Cadena y María del Socorro Estrada Hernández “se conocen, convivían y compartían en diferentes actividades… No así las personas que corresponden a los nombres de Juan Francisco Sicilia Ortega y Jesús Chávez Vázquez”.