Los incendios han aumentado las partículas suspendidas de 2.5, sobre las que no se tiene un programa de contingencia que señale qué medidas se deben tomar.
Los gobiernos de la Ciudad y el Estado de México aún no cuentan con un plan de contingencia ambiental para atender aumentos en la contaminación provocada por los incendios y las altas temperaturas.
En una reunión urgente de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, la jefa del Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, reconoció que las partículas suspendidas de 2.5 sí registran una alta concentración, aunque no hay un programa de contingencia ambiental qué medidas se pueden y deben tomar.
Las PM 2.5 son resultado de los incendios y contienen hollín – que es lo que provoca la baja visibilidad – además de que son más pequeñas que las PM 10 que son resultado de la actividad industrial y la circulación de los vehículos.