Tania Rosas / El Economista
Calderón reprochó que no defendieran los logros de su administración, mientras que Madero dijo que aceptará las críticas.
Uno de los aspectos que causó más controversia entre los panistas que celebraron este sábado su Consejo Nacional fue el padrón de afiliados.
Hubo acusaciones, recriminaciones y pidieron terminar con la “onda grupera”, la cual tiene el objetivo de afiliar gente para impulsar a unos cuantos a puestos de poder.
El presidente Felipe Calderón fue el primero en recriminar lo que llamó “mecanismos que han llevado al control clientelar de los padrones internos”, mismos que han llevado a la pérdida de calidad de la militancia y al envilecimiento de la democracia interna.
“Hoy, la vida de Acción Nacional gira en torno de quién y cómo controla el padrón interno, sea para elegir candidatos, sea para elegir dirigentes (...) (el partido) se ha convertido en una especie de confederación de comités; de grupos a nivel estatal, a nivel municipal, cada quien con su lógica, cada quien con sus grupos, cada quien con sus padrones y cada quien con sus intereses”, reprochó.
Cuauhtémoc Cardona, exsecretario de gobierno de Baja California y aspirante a la gubernatura de dicha entidad, afirmó que hay “una onda grupera” que se dedica a afiliar gente para conseguir candidaturas.
“Lo que ha venido pasando en el PAN con las afiliaciones es que se ha cuestionado el padrón y esta parte de la onda grupera en cada una de las entidades federativas. No sé de clientelismo, pero sé que existen grupos, afinidades, equipos que se dedican a afiliar gente para efectos de buscar candidatura”, dijo a El Economista el también exsubsecretario de Enlace Legislativo de la Segob.
Juan José Rodríguez Prats adelantó que varios consejeros hablaron inclusive de “empezar de cero”, que quien tenga interés en ser militante pueda ser reafiliado pues, dijo, “desafortunadamente hubo manoseo en el padrón”.
Fernando Canales Clariond, exsecretario de Economía y de Energía, sentenció que los panistas se han alejado de los principios éticos y políticos con las afiliaciones de personas que no comparten los ideales del blanquiazul.
“Para efectos prácticos, hemos tenido enormes decepciones. En la contienda interna por la candidatura presidencial votamos un porcentaje menor de 50 por ciento. No todos los que tienen credencial (del PAN) cumplimos con nuestras obligaciones ni ejercemos nuestros derechos”, externó.
Mientras que Víctor Guerrero, consejero vitalicio y uno de los fundadores del PAN en el Estado de México, opinó que el instituto político tiene a “militantes que son candidatos de otro partido y luego están en el padrón para intervenir en decisiones nuestras”.
Al afirmar que hay “panistas barnizados”, Guerrero comentó que la depuración de miembros activos y adherentes debe ser a nivel municipal, en primera instancia.
La diputada federal Kenia López Rabadán en su cuenta de Twitter escribió que el consejero Santiago Ardavín expuso que en el Distrito Federal “hay padrones amañados y caciques”, por lo que solicitó al Comité Ejecutivo Nacional una comisión especial que tome medidas al respecto.
Mientras que el consejero Roberto Colín solicitó “disolver el Comité Directivo Regional del Distrito Federal” por las irregularidades de los miembros.
Cabe destacar que varios panistas reprochan que Mariana Gómez del Campo, sobrina del presidente Felipe Calderón, tenga el control del partido en el DF.
Poco tiempo antes de que concluyera la reunión, trascendió que Juan de Dios Castro acusó a Rodolfo Dorador de inflar padrones y comenzó una discusión entre ambos.
Calderón reprochó que no defendieran los logros de su administración, mientras que Madero dijo que aceptará las críticas.
Uno de los aspectos que causó más controversia entre los panistas que celebraron este sábado su Consejo Nacional fue el padrón de afiliados.
Hubo acusaciones, recriminaciones y pidieron terminar con la “onda grupera”, la cual tiene el objetivo de afiliar gente para impulsar a unos cuantos a puestos de poder.
El presidente Felipe Calderón fue el primero en recriminar lo que llamó “mecanismos que han llevado al control clientelar de los padrones internos”, mismos que han llevado a la pérdida de calidad de la militancia y al envilecimiento de la democracia interna.
“Hoy, la vida de Acción Nacional gira en torno de quién y cómo controla el padrón interno, sea para elegir candidatos, sea para elegir dirigentes (...) (el partido) se ha convertido en una especie de confederación de comités; de grupos a nivel estatal, a nivel municipal, cada quien con su lógica, cada quien con sus grupos, cada quien con sus padrones y cada quien con sus intereses”, reprochó.
Cuauhtémoc Cardona, exsecretario de gobierno de Baja California y aspirante a la gubernatura de dicha entidad, afirmó que hay “una onda grupera” que se dedica a afiliar gente para conseguir candidaturas.
“Lo que ha venido pasando en el PAN con las afiliaciones es que se ha cuestionado el padrón y esta parte de la onda grupera en cada una de las entidades federativas. No sé de clientelismo, pero sé que existen grupos, afinidades, equipos que se dedican a afiliar gente para efectos de buscar candidatura”, dijo a El Economista el también exsubsecretario de Enlace Legislativo de la Segob.
Juan José Rodríguez Prats adelantó que varios consejeros hablaron inclusive de “empezar de cero”, que quien tenga interés en ser militante pueda ser reafiliado pues, dijo, “desafortunadamente hubo manoseo en el padrón”.
Fernando Canales Clariond, exsecretario de Economía y de Energía, sentenció que los panistas se han alejado de los principios éticos y políticos con las afiliaciones de personas que no comparten los ideales del blanquiazul.
“Para efectos prácticos, hemos tenido enormes decepciones. En la contienda interna por la candidatura presidencial votamos un porcentaje menor de 50 por ciento. No todos los que tienen credencial (del PAN) cumplimos con nuestras obligaciones ni ejercemos nuestros derechos”, externó.
Mientras que Víctor Guerrero, consejero vitalicio y uno de los fundadores del PAN en el Estado de México, opinó que el instituto político tiene a “militantes que son candidatos de otro partido y luego están en el padrón para intervenir en decisiones nuestras”.
Al afirmar que hay “panistas barnizados”, Guerrero comentó que la depuración de miembros activos y adherentes debe ser a nivel municipal, en primera instancia.
La diputada federal Kenia López Rabadán en su cuenta de Twitter escribió que el consejero Santiago Ardavín expuso que en el Distrito Federal “hay padrones amañados y caciques”, por lo que solicitó al Comité Ejecutivo Nacional una comisión especial que tome medidas al respecto.
Mientras que el consejero Roberto Colín solicitó “disolver el Comité Directivo Regional del Distrito Federal” por las irregularidades de los miembros.
Cabe destacar que varios panistas reprochan que Mariana Gómez del Campo, sobrina del presidente Felipe Calderón, tenga el control del partido en el DF.
Poco tiempo antes de que concluyera la reunión, trascendió que Juan de Dios Castro acusó a Rodolfo Dorador de inflar padrones y comenzó una discusión entre ambos.
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