Alberto Osorio / Apro
La tarde del miércoles falleció el director de la policía municipal de Magdalena, Jalisco, Raúl Hinojosa.
El mando policíaco participó en un enfrentamiento con un grupo de hombres armados que atacó a balazos a los uniformados. En el encontronazo también fallecieron otros dos agentes de seguridad y seis presuntos integrantes de una célula de los Zetas.
La confrontación se registró en los límites de Magdalena y Hostotipaquillo, en un tramo carretero de la ruta Guadalajara-Nogales, cuando un convoy de presuntos delincuentes procedentes del estado de Nayarit ingresaba a territorio jalisciense por la zona Valles a bordo de cuatro ó cinco vehículos.
Junto con Raúl Hinojosa también fallecieron dos policías, quienes fueron atacados a balazos por presuntos integrantes de una célula de los Zetas. El número de bajas entre los presuntos delincuentes fue de seis sujetos abatidos por las balas de los uniformados.
En la refriega, los policías de Magdalena pidieron apoyo a diversas corporaciones de otros municipios, a la Policía Estatal y al Ejército mexicano, por lo que se montó un operativo con decenas de soldados y agentes de seguridad para tratar de capturar a los agresores. Sin embargo, la mayoría logró escapar, con rumbo al estado de Nayarit.
Los cadáveres de seis supuestos delincuentes quedaron a bordo de dos camionetas que se desbarrancaron en el momento de la persecución, después de recibir diversos impactos de bala. Cuatro de ellos quedaron al interior de una camioneta tipo Cherokee y otros dos en una Chevrolet Taho, en donde se descubrió armamento de diverso calibre.
El incidente ocurrió cerca de las siete de la noche, cuando vecinos de Magdalena denunciaron vía telefónica y en forma anónima la presencia de un grupo armado que se desplazaba en varias camionetas de lujo y portaba armas de grueso calibre e incluso granadas de fragmentación colgadas en el pecho.
Apenas el pasado 21 de mayo pasado, Víctor Manuel Hernández Otelo, director operativo de dicha corporación, fue asesinado por un sujeto no identificado cuando circulaba en las inmediaciones del Centro Médico Nacional de Occidente, en Guadalajara.
El crimen se registró en el cruce de la avenida Belisario Domínguez y la calle Chimborazo, al filo de las nueve de la mañana, cuando el mando policiaco circulaba a bordo de una camioneta negra tipo Lincon.
La tarde del miércoles falleció el director de la policía municipal de Magdalena, Jalisco, Raúl Hinojosa.
El mando policíaco participó en un enfrentamiento con un grupo de hombres armados que atacó a balazos a los uniformados. En el encontronazo también fallecieron otros dos agentes de seguridad y seis presuntos integrantes de una célula de los Zetas.
La confrontación se registró en los límites de Magdalena y Hostotipaquillo, en un tramo carretero de la ruta Guadalajara-Nogales, cuando un convoy de presuntos delincuentes procedentes del estado de Nayarit ingresaba a territorio jalisciense por la zona Valles a bordo de cuatro ó cinco vehículos.
Junto con Raúl Hinojosa también fallecieron dos policías, quienes fueron atacados a balazos por presuntos integrantes de una célula de los Zetas. El número de bajas entre los presuntos delincuentes fue de seis sujetos abatidos por las balas de los uniformados.
En la refriega, los policías de Magdalena pidieron apoyo a diversas corporaciones de otros municipios, a la Policía Estatal y al Ejército mexicano, por lo que se montó un operativo con decenas de soldados y agentes de seguridad para tratar de capturar a los agresores. Sin embargo, la mayoría logró escapar, con rumbo al estado de Nayarit.
Los cadáveres de seis supuestos delincuentes quedaron a bordo de dos camionetas que se desbarrancaron en el momento de la persecución, después de recibir diversos impactos de bala. Cuatro de ellos quedaron al interior de una camioneta tipo Cherokee y otros dos en una Chevrolet Taho, en donde se descubrió armamento de diverso calibre.
El incidente ocurrió cerca de las siete de la noche, cuando vecinos de Magdalena denunciaron vía telefónica y en forma anónima la presencia de un grupo armado que se desplazaba en varias camionetas de lujo y portaba armas de grueso calibre e incluso granadas de fragmentación colgadas en el pecho.
Apenas el pasado 21 de mayo pasado, Víctor Manuel Hernández Otelo, director operativo de dicha corporación, fue asesinado por un sujeto no identificado cuando circulaba en las inmediaciones del Centro Médico Nacional de Occidente, en Guadalajara.
El crimen se registró en el cruce de la avenida Belisario Domínguez y la calle Chimborazo, al filo de las nueve de la mañana, cuando el mando policiaco circulaba a bordo de una camioneta negra tipo Lincon.
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