Enviar a niños a una escuela a 1.5 km, inviable; hay un río imposible de cruzar por las lluvias, señalan.
Ernesto Martínez Elorriaga, corresponsal
Nueva Jerusalén, Mich. Los padres de familia de la Nueva Jerusalén desmintieron al gobierno de Michoacán sobre un acuerdo para que hoy lunes “a como dé lugar” reiniciaran clases.
La propuesta de que los casi 300 niños de esta comunidad tomaran clases en la población rural de La Injertada, ubicada a kilómetro y medio, no es aplicable, señalaron, y en esta mañana con una fuerte lluvia, no existe el más mínimo movimiento de escolares en Nueva Jerusalén.
Emiliano Juárez Damián, dirigente de los llamados disidentes (familias que quieren educación para sus hijos), manifestó que no hubo acuerdo con el subsecretario de gobierno, Fernando Cano, pero además no es posible que a la escuela José María Morelos, con sólo dos aulas para 20 niños cada una, puedan ingresar 300 alumnos.
Juárez sostuvo que los niños definitivamente no asistirán a esta escuela ubicada a kilómetro y medio de la Nueva Jerusalén, donde, además, a mitad de camino se tiene que cruzar un río, y en esta temporada de lluvias es imposible que lo atraviesen los niños.
Dijo que la única salida es que el gobierno del estado reconstruya la escuela que fue derribada el pasado 6 de julio por fanáticos religiosos que encabeza el presunto sacerdote Martín de Tous.
Mientras tanto, ahí mismo, se pueden y deberían instalar aulas provisionales, señaló.
Ernesto Martínez Elorriaga, corresponsal
Nueva Jerusalén, Mich. Los padres de familia de la Nueva Jerusalén desmintieron al gobierno de Michoacán sobre un acuerdo para que hoy lunes “a como dé lugar” reiniciaran clases.
La propuesta de que los casi 300 niños de esta comunidad tomaran clases en la población rural de La Injertada, ubicada a kilómetro y medio, no es aplicable, señalaron, y en esta mañana con una fuerte lluvia, no existe el más mínimo movimiento de escolares en Nueva Jerusalén.
Emiliano Juárez Damián, dirigente de los llamados disidentes (familias que quieren educación para sus hijos), manifestó que no hubo acuerdo con el subsecretario de gobierno, Fernando Cano, pero además no es posible que a la escuela José María Morelos, con sólo dos aulas para 20 niños cada una, puedan ingresar 300 alumnos.
Juárez sostuvo que los niños definitivamente no asistirán a esta escuela ubicada a kilómetro y medio de la Nueva Jerusalén, donde, además, a mitad de camino se tiene que cruzar un río, y en esta temporada de lluvias es imposible que lo atraviesen los niños.
Dijo que la única salida es que el gobierno del estado reconstruya la escuela que fue derribada el pasado 6 de julio por fanáticos religiosos que encabeza el presunto sacerdote Martín de Tous.
Mientras tanto, ahí mismo, se pueden y deberían instalar aulas provisionales, señaló.
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