Javier Arcadia Galaviz / Cuestión de Debate
Como último jalón de campaña, hoy miércoles 27 de junio y a tres días de las elecciones, se espera por parte del candidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, que su cierre de campaña sea sensacional y espectacular, enorme y apoteósico, algo como nunca antes visto en la historia política electoral de este País.
Sí, la expectativa que se tiene es que en su último acto político y dada su gran capacidad de convocatoria logre concentrar en parte de Paseo de la Reforma, Avenida Juárez, Madero y el Zócalo de la Capital de la República, desde unos trescientos mil hasta medio millón de seguidores, y posiblemente más, porque aunque haya sido por una causa distinta, basta recordar el desafuero que provocó una concentración histórica de apoyo a AMLO de más de un millón de personas.
Circunstancia que sin exageración, hoy se podría volver a repetir, es decir, que logre realizar un acto masivo de esas magnitudes, más cuando todo indica su factibilidad, en virtud de que en todas las capitales de los estados, sin excepción alguna, los cierres políticos de AMLO hasta el día de ayer, fueron de miles y miles de ciudadanos que con su presencia desbordaron las plazas públicas, respectivamente. Eventos en los que los asistentes muy motivados y como verdaderos ejércitos, se comprometieron a promover el voto a favor del candidato de la izquierda, a cuidarle las casillas y a evitar que se cometan fraudes electorales.
Si Andrés Manuel, hoy miércoles, logra su hazaña, estará llenando tres o cuatro veces el estadio Azteca que Enrique Peña Nieto con todos sus acarreados de diferentes partes, menos del Distrito Federal, no alcanzó a cubrir en su totalidad. Pero además, si AMLO consigue una magna concentración humana, estaría completando de seis a ocho veces la Plaza México, sitio donde Josefina Vázquez Mota, el sábado pasado cerró su más importante acto de campaña con aproximadamente cuarenta mil asistentes.
El cierre final de campaña de López Obrador, será un acto catalogado de dimensión nacional, muy superior a los cierres de sus adversarios que por su tamaño solo habrán de ser apreciados como de índole local.
Ello, porque como ya se ha dicho, será un grandioso evento que tendrá verificativo nada más y nada menos que en el Zócalo de la Capital de la República, lugar emblemático del País y corazón de la Nación. Acto político en el que seguro López Obrador estará acompañado principalmente del candidato de la izquierda a la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, Dr. Miguel Ángel Mancera, así como la de todo su gabinete que dio a conocer durante su campaña política y de los candidatos tanto al Senado como a la Cámara de Diputados además de los dirigentes nacionales del PRD, PT y MC.
Por eso es que, el gran cierre de hoy miércoles, como el de cada uno de las capitales de los estados, estarán reflejando que de ese nivel será la votación a favor de Andrés Manuel López Obrador, porque además es el único candidato presidencial que tuvo contacto directo con la gente de todos los municipios del País.
Es el único aspirante presidencial que partió de una base electoral de 15 millones de votantes que lo apoyaron en el 2006, y que en esta ocasión es seguro que volverán a votar por él. Si esto es así, AMLO para alzarse con el triunfo el próximo domingo, estaría por obtener tres o cuatro millones más de votantes, que bien los podría obtener de los aproximadamente ocho millones de electores que se incorporaron a la lista nominal y que por primera vez sufragarán en esta elección del 2012, entre los que seguro se encontrarán los electores que hoy integran y simpatizan con el movimiento ciudadano, # Yo Soy 132.
Sin embargo, la prudencia aconseja que habrá de esperarse hasta antes de cantar victoria, y mientras tanto, como dice el dicho, “riata no te revientes que este es el último jalón”.
Pálida tinta: Cuando los panistas pensaban que con la presunta captura del hijo del Chapo Guzmán le darían un levantón a la campaña política de Josefina Vázquez Mota, que por cierto nunca prendió, pues resulta que ello puede traducirse en un verdadero bajón electoral, ya que de nuevo dieron el traspiés al capturar a una persona que no tiene ningún parentesco con el capo más buscado en todo el País. ¡Que vergüenza!
Como último jalón de campaña, hoy miércoles 27 de junio y a tres días de las elecciones, se espera por parte del candidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, que su cierre de campaña sea sensacional y espectacular, enorme y apoteósico, algo como nunca antes visto en la historia política electoral de este País.
Sí, la expectativa que se tiene es que en su último acto político y dada su gran capacidad de convocatoria logre concentrar en parte de Paseo de la Reforma, Avenida Juárez, Madero y el Zócalo de la Capital de la República, desde unos trescientos mil hasta medio millón de seguidores, y posiblemente más, porque aunque haya sido por una causa distinta, basta recordar el desafuero que provocó una concentración histórica de apoyo a AMLO de más de un millón de personas.
Circunstancia que sin exageración, hoy se podría volver a repetir, es decir, que logre realizar un acto masivo de esas magnitudes, más cuando todo indica su factibilidad, en virtud de que en todas las capitales de los estados, sin excepción alguna, los cierres políticos de AMLO hasta el día de ayer, fueron de miles y miles de ciudadanos que con su presencia desbordaron las plazas públicas, respectivamente. Eventos en los que los asistentes muy motivados y como verdaderos ejércitos, se comprometieron a promover el voto a favor del candidato de la izquierda, a cuidarle las casillas y a evitar que se cometan fraudes electorales.
Si Andrés Manuel, hoy miércoles, logra su hazaña, estará llenando tres o cuatro veces el estadio Azteca que Enrique Peña Nieto con todos sus acarreados de diferentes partes, menos del Distrito Federal, no alcanzó a cubrir en su totalidad. Pero además, si AMLO consigue una magna concentración humana, estaría completando de seis a ocho veces la Plaza México, sitio donde Josefina Vázquez Mota, el sábado pasado cerró su más importante acto de campaña con aproximadamente cuarenta mil asistentes.
El cierre final de campaña de López Obrador, será un acto catalogado de dimensión nacional, muy superior a los cierres de sus adversarios que por su tamaño solo habrán de ser apreciados como de índole local.
Ello, porque como ya se ha dicho, será un grandioso evento que tendrá verificativo nada más y nada menos que en el Zócalo de la Capital de la República, lugar emblemático del País y corazón de la Nación. Acto político en el que seguro López Obrador estará acompañado principalmente del candidato de la izquierda a la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, Dr. Miguel Ángel Mancera, así como la de todo su gabinete que dio a conocer durante su campaña política y de los candidatos tanto al Senado como a la Cámara de Diputados además de los dirigentes nacionales del PRD, PT y MC.
Por eso es que, el gran cierre de hoy miércoles, como el de cada uno de las capitales de los estados, estarán reflejando que de ese nivel será la votación a favor de Andrés Manuel López Obrador, porque además es el único candidato presidencial que tuvo contacto directo con la gente de todos los municipios del País.
Es el único aspirante presidencial que partió de una base electoral de 15 millones de votantes que lo apoyaron en el 2006, y que en esta ocasión es seguro que volverán a votar por él. Si esto es así, AMLO para alzarse con el triunfo el próximo domingo, estaría por obtener tres o cuatro millones más de votantes, que bien los podría obtener de los aproximadamente ocho millones de electores que se incorporaron a la lista nominal y que por primera vez sufragarán en esta elección del 2012, entre los que seguro se encontrarán los electores que hoy integran y simpatizan con el movimiento ciudadano, # Yo Soy 132.
Sin embargo, la prudencia aconseja que habrá de esperarse hasta antes de cantar victoria, y mientras tanto, como dice el dicho, “riata no te revientes que este es el último jalón”.
Pálida tinta: Cuando los panistas pensaban que con la presunta captura del hijo del Chapo Guzmán le darían un levantón a la campaña política de Josefina Vázquez Mota, que por cierto nunca prendió, pues resulta que ello puede traducirse en un verdadero bajón electoral, ya que de nuevo dieron el traspiés al capturar a una persona que no tiene ningún parentesco con el capo más buscado en todo el País. ¡Que vergüenza!
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