Intentaron sorprenderlo entre los límites de Sinaloa y Durango
Escapa de nuevo "El Mayo" Zambada
Impacto Diario
Por enésima ocasión, el fugitivo narcotraficante Ismael "El Mayo" Zambada García presuntamente logró escapar de nuevo de las Fuerzas Federales.
Personal de la Secretaría de Marina y Armada de México intentó sorprenderlo entre los límites de Sinaloa y Durango, pero no lograron atraparlo.
Fuentes oficiales de la Secretaría de la Defensa Nacional revelaron que Zambada García logró huir por entre el monte, acompañado de por lo menos más de 10 personas.
Marinos intentaron al parecer cazarlo desde el aire, pero "El Mayo" ya se había esfumado.
“El Mayo” Zambada inició su trayectoria en el narcotráfico en la década de los ochenta, en las organizaciones de Miguel Angel Félix Gallardo trabajó en la organización criminal de Amado Carrillo (a) El Señor de los Cielos”, en la cual ascendió hasta asumir su liderazgo tras la muerte de Carillo. En contraste con otros narcotraficantes, Zambada siempre ha procurado mantener un perfil bajo, lo cual le ha permitido permanecer prácticamente intocable frente a las autoridades mexicanas y estadounidenses durante más de tres décadas.
Escapa de nuevo "El Mayo" Zambada
Impacto Diario
Por enésima ocasión, el fugitivo narcotraficante Ismael "El Mayo" Zambada García presuntamente logró escapar de nuevo de las Fuerzas Federales.
Personal de la Secretaría de Marina y Armada de México intentó sorprenderlo entre los límites de Sinaloa y Durango, pero no lograron atraparlo.
Fuentes oficiales de la Secretaría de la Defensa Nacional revelaron que Zambada García logró huir por entre el monte, acompañado de por lo menos más de 10 personas.
Marinos intentaron al parecer cazarlo desde el aire, pero "El Mayo" ya se había esfumado.
“El Mayo” Zambada inició su trayectoria en el narcotráfico en la década de los ochenta, en las organizaciones de Miguel Angel Félix Gallardo trabajó en la organización criminal de Amado Carrillo (a) El Señor de los Cielos”, en la cual ascendió hasta asumir su liderazgo tras la muerte de Carillo. En contraste con otros narcotraficantes, Zambada siempre ha procurado mantener un perfil bajo, lo cual le ha permitido permanecer prácticamente intocable frente a las autoridades mexicanas y estadounidenses durante más de tres décadas.
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