José Cárdenas
La politóloga María Amparo Casar lo explica de esta manera: “No hay casos donde un segundo lugar le haya dado la vuelta a una elección con una distancia tan grande”.
Jesús Silva-Herzog Márquez es aún más contundente: “El PRI va a ganar… la incertidumbre es por cuánto”.
Con Casar y Silva-Herzog coinciden intelectuales de calibre mayor que también echaron mano del bisturí para hacer la autopsia adelantada del proceso electoral: Soledad Loaeza, Diego Valadés, Alberto Aziz, Francisco Gil Díaz y Rogelio Hernández. Todos participantes en el seminario 2012, año de elecciones, año de reflexiones, realizado por El Colegio de México.
La sentencia es terminal. Los titubeos panistas y la falta de un discurso renovado de parte de la izquierda han dejado el camino libre para el regreso del PRI a Los Pinos.
–¿Qué ha hecho Josefina para evitarlo?
–Está confundida. No sabe si mostrarse como líder o como madre de familia… si ponerse falda o pantalones. Ha errado sus propuestas. Hace malabares para parecer diferente… pero en los hechos ofrece el continuismo de una política difícilmente corregible. Hereda la inseguridad derivada de la fallida batalla contra el crimen organizado. Más allá del desgaste del poder y la posibilidad del voto de castigo en su contra, el PAN atraviesa por una severa crisis de identidad. Los celestes no saben lo que son, no saben qué hacer… y menos qué ofrecer. El apoyo a su candidata es titubeante. –¿Será que Josefina no era la favorita del Presidente?
–¿Qué ha hecho Andrés Manuel para impedir que llegue Peña Nieto?
–Es el que más se ha equivocado. Su tono mesiánico es el mismo. Sigue denunciando a la mafia del poder. Su propuesta languidece en torno a dos ideas: corrupción y oligarquía. Suena esquizofrénico cuando habla de cambio verdadero… con toques de odio y rencor. Ofrece amor y gracia para los amigos y rencor a secas para los rivales. Su campaña se percibe contradictoria, respaldada por una coalición que parece miscelánea… y no encuentra nuevos adeptos a su causa. Lo bueno es que promete respetar el resultado de la votación… aunque le duela… y aunque el pueblo pueda cometer un acto de masoquismo colectivo… si no le da a él la victoria.
–¿Qué ha hecho Enrique para ganar?
–Aunque sus propuestas no son precisamente claras, nada de muertito protegido por el teflón de ser el puntero. Su partido está unificado… y ese apoyo es indiscutible. El pegamento que ofrece la certeza del triunfo ha evitado cualquier peligro de fractura. En seis años el PRI revirtió la imagen de ser el partido peor evaluado. Su maquinaria, aunque rechina de vieja, parece recuperarse.
–¿Y qué pitos toca Gabriel Quadri?
–Ser un magnífico candidato testimonial… que aunque se vista de Quadri, Gordillo se queda…
MONJE LOCO (muy triste): …su madre lo encontró colgado de un árbol. Tenía nueve años. Se suicidó porque sus compañeros de escuela le hacían la vida imposible. La mamá había pedido ayuda al profesor. Éste nunca la tomó en serio. ¿El combate al bullying estará dentro del pliego petitorio del SNTE o los maestros sólo quieren que en su día les paguen triple… ¡ah!, y sobre todo que no los evalúen? Triste Día de la Madre… peor Día del Maestro. Ya se sabe, ya se supo…
La politóloga María Amparo Casar lo explica de esta manera: “No hay casos donde un segundo lugar le haya dado la vuelta a una elección con una distancia tan grande”.
Jesús Silva-Herzog Márquez es aún más contundente: “El PRI va a ganar… la incertidumbre es por cuánto”.
Con Casar y Silva-Herzog coinciden intelectuales de calibre mayor que también echaron mano del bisturí para hacer la autopsia adelantada del proceso electoral: Soledad Loaeza, Diego Valadés, Alberto Aziz, Francisco Gil Díaz y Rogelio Hernández. Todos participantes en el seminario 2012, año de elecciones, año de reflexiones, realizado por El Colegio de México.
La sentencia es terminal. Los titubeos panistas y la falta de un discurso renovado de parte de la izquierda han dejado el camino libre para el regreso del PRI a Los Pinos.
–¿Qué ha hecho Josefina para evitarlo?
–Está confundida. No sabe si mostrarse como líder o como madre de familia… si ponerse falda o pantalones. Ha errado sus propuestas. Hace malabares para parecer diferente… pero en los hechos ofrece el continuismo de una política difícilmente corregible. Hereda la inseguridad derivada de la fallida batalla contra el crimen organizado. Más allá del desgaste del poder y la posibilidad del voto de castigo en su contra, el PAN atraviesa por una severa crisis de identidad. Los celestes no saben lo que son, no saben qué hacer… y menos qué ofrecer. El apoyo a su candidata es titubeante. –¿Será que Josefina no era la favorita del Presidente?
–¿Qué ha hecho Andrés Manuel para impedir que llegue Peña Nieto?
–Es el que más se ha equivocado. Su tono mesiánico es el mismo. Sigue denunciando a la mafia del poder. Su propuesta languidece en torno a dos ideas: corrupción y oligarquía. Suena esquizofrénico cuando habla de cambio verdadero… con toques de odio y rencor. Ofrece amor y gracia para los amigos y rencor a secas para los rivales. Su campaña se percibe contradictoria, respaldada por una coalición que parece miscelánea… y no encuentra nuevos adeptos a su causa. Lo bueno es que promete respetar el resultado de la votación… aunque le duela… y aunque el pueblo pueda cometer un acto de masoquismo colectivo… si no le da a él la victoria.
–¿Qué ha hecho Enrique para ganar?
–Aunque sus propuestas no son precisamente claras, nada de muertito protegido por el teflón de ser el puntero. Su partido está unificado… y ese apoyo es indiscutible. El pegamento que ofrece la certeza del triunfo ha evitado cualquier peligro de fractura. En seis años el PRI revirtió la imagen de ser el partido peor evaluado. Su maquinaria, aunque rechina de vieja, parece recuperarse.
–¿Y qué pitos toca Gabriel Quadri?
–Ser un magnífico candidato testimonial… que aunque se vista de Quadri, Gordillo se queda…
MONJE LOCO (muy triste): …su madre lo encontró colgado de un árbol. Tenía nueve años. Se suicidó porque sus compañeros de escuela le hacían la vida imposible. La mamá había pedido ayuda al profesor. Éste nunca la tomó en serio. ¿El combate al bullying estará dentro del pliego petitorio del SNTE o los maestros sólo quieren que en su día les paguen triple… ¡ah!, y sobre todo que no los evalúen? Triste Día de la Madre… peor Día del Maestro. Ya se sabe, ya se supo…
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