lunes, febrero 13, 2012

Guerra electoral en México

Joel Hernández Santiago

Así, como quien no quiere la cosa, el 30 de enero pasado se dio a conocer ‘a la opinión pública’ que la Procuraduría General de la República (PGR) había emitido un alerta para que impedir la salida del país de tres ex gobernadores de Tamaulipas: Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández Flores… Los tres priístas.

Antes, el 27 de enero, un empleado del gobierno priísta de Veracruz, Miguel Morales Robles, llegó al aeropuerto de Toluca, Estado de México, procedente de Jalapa. Al revisarle las dos maletas que portaba se encontraron 25 millones de pesos en efectivo, cuyo origen y destino no pudo detallar, por lo que fue puesto a disposición de las autoridades federales. El argumento que dieron para explicar este traslado fue que era para pago directo de eventos y tal… Por supuesto se filtró ‘a la opinión pública’ que podría ser una aportación para la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto… o algo así.

El 25 de agosto de 2011, la Secretaría de Hacienda dio a conocer ‘a la opinión pública’ que había una deuda de 34,000 millones de pesos que el señor Humberto Moreira había adquirido durante su gestión como gobernador de Coahuila. El entonces presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) tuvo que renunciar a su cargo el 2 de diciembre de ese mismo año…

Y así…

Siempre es muy bueno saber qué ocurre en las entrañas del poder político y de gobierno. Qué es lo que hacen con nuestros fueros y privilegios. Los ciudadanos agradecemos enormemente que nos digan quien está cometiendo corrupción o presunta corrupción porque de esta manera conocemos el grado de deterioro de ese mundo ya de por sí tan desprestigiado y deplorable hoy mismo. Y para exigir orden en esa casa. Y será la autoridad judicial quien dictamine si hay delito que perseguir, o no; si los presuntos maloras deben pagar en ley por sus tropelías o no… Y si hay delito, que el rigor de la ley caiga sobre sus cabezas como meteoro del tamaño de Yucatán, porque de ese tamaño es su abuso en tierra de pobres…

En todo caso, la exhibición de las travesuras malolientes de los políticos-gobierno es usual en todo el mundo, sobre todo en procesos electorales… Ocurre en países europeos, ocurre en EUA, en América Latina… En fin, que la piedrita aquella del ‘el que esté libre de culpa…’ le puede caer en la maceta a cualquiera y si no quieren estar en el aparador de las miserias humanas debieran no hacer de la política-basura, y así saldrían rechinando de limpios y con la mirada fija en el horizonte.

Pero no: la corrupción existe mientras existe la ambición de poder mal entendido: desde el gendarme de la esquina, desde el burócrata mano larga, desde el jefecillo de oficina con mirada vidriosa o el poderoso jefe de todos ellos, o los jefes poderosísimos… Seguro que habrá excepciones: muchas: pero nadie hace nada por parar el mundo de la delincuencia institucional termine con esa malvada y cínica “simplificación administrativa”.

Aparte: lo que resulta de los anuncios recientes desde el gobierno del señor Felipe Calderón (PAN-derecha) ‘a la opinión pública’ de todo eso que ya se dijo es una muestra de que su gobierno está acumulando acusaciones para gotearlas durante el proceso electoral. Pero tampoco nos hagamos rosquilla: esto es una práctica nada novedosa y fue utilizada y será utilizada en su tiempo por los mismos priístas para desprestigiar a adversarios incómodos… Ocurrirá lo mismo cuando la campaña para el gobierno del DF esté encaminada y ya se le encontrarán los ‘diablitos colgados de los cables’ al gobierno del señor Marcelo Ebrard, si los hay.

La democracia lo es cuando está consolidada y este tipo de acusaciones no le afecta. Pero la nuestra ¿está consolidada? Yo creo que no y ya se sabe que el gobierno en el poder es enemigo de la democracia porque no quiere dejarlo.

Lo sano en democracia sería que no debiera existir esta exhibición maléfica. Y, lo dicho, no la habría si no hay esa corrupción o tropelías y si por otro lado no se abusa del privilegio de gobierno para acometer al adversario político: esto también es corrupción, misma que operará para descubrir los gatos muertos del actual régimen.

En todo caso, importa que las oficinas que nos cuestan dinero bastante, como es la de la Transparencia o la de la Función Pública, promuevan eso: la transparencia en el manejo de nuestros recursos y la información de gobierno así como el buen quehacer de funcionarios públicos de todísimos los niveles. Y que sean ellos quienes periódicamente informen de errores cometidos y no tengamos que esperar a que la PGR nos diga que ya se encontró al gato muerto.

En fin. Que la guerra en México ya llegó. La guerra electoral, digo. Y no se darán casos de perdón y olvido. La agresividad ya se percibe y los daños colaterales serán muchos. Cada partido político guarda sus mejores armas dañinas para los días que siguen… Es a muerte política.

… Pero ¿y nosotros? los de a pie… los de a tres pesos el boleto de metro y la torta de queso de puerco de a 15 pesos… Nosotros ¿en dónde estamos en toda esta inmundicia política-gubernamental-delincuencial-abusiva-primitiva y sin cepillar?

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