El precandidato presidencial de la izquierda Andrés Manuel López Obrador está logrando hacer lo que en 2006 no hizo, por gusto: acercarse al sector empresarial. Dicen los que saben que los auditorios de hombres de negocio en las principales capitales que visita, son muy numerosos. En Guadalajara y Monterrey ha reunido a más de mil empresarios en sus encuentros, y caminado de la mano de algunos respetados capitanes de la industria local. En Guadalajara, por ejemplo, se presentó junto con Salvador López Chávez, que fue dueño de Zapatos Canadá y del neobanquiero Raymundo Gómez Flores, mientras que en Monterrey le sirve de chaperón Alfonso Romo, quien se ha vuelto el hombre que le abre las puertas de los hombres de negocios en el país.
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