lunes, octubre 24, 2011

En Argentina logra Cristina Fernández la relección con triunfo rotundo

Con un emotivo discurso la presidenta Cristina Fernández de Kirchner agradeció esta noche a 40 millones de argentinos su relección para gobernar hasta 2015, al triunfar con más de 50 por ciento de los sufragios en una histórica victoria en la que tuvo una gran diferencia respecto de sus opositores.

En segundo lugar se colocó Hermes Binner, gobernador socialista de la provincia de Santa Fe, quien encabeza el centroizquierdista Frente Amplio Progresista (hasta ahora 17 por ciento), una nueva coalición, con lo cual los dos primeros lugares de estos comicios corresponden a frentes del progresismo nacional.

En tercer lugar se ubica, con algo más de 10.4 por ciento, Ricardo Alfonsín, de la Unión Cívica Radical, uno de los dos partidos –junto con el peronismo– con presencia a nivel nacional, que encabeza la alianza de centro Unión para el Desarrollo Social (Udeso).

Hasta el cierre de esta edición estaba en cuarto lugar el actual gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saa, con 7.5 por ciento del peronismo de derecha moderada, mientras el ex presidente Eduardo Duhalde, que encabeza la derechista coalición Frente Popular, quedó en quinto lugar, con alrededor de 5.71 por ciento de los votos.

Se desploma Elisa Carrió

La peor votación corresponde a la dirigente de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, quien había logrado el segundo lugar en las elecciones de 2007 y ahora sólo alcanzó un tres por ciento, como sucedió durante las primarias de agosto pasado, en las cuales ya se advertía su derrumbe político.

En este caso fue superada por el candidato del Partido Obrero (trostkista), Jorge Altamira, candidato de la Coalición Frente de Izquierda, con alrededor de cuatro por ciento. Los votos de la izquierda radical acompañaron a este sector.

La presidenta llamó al pueblo a la unidad nacional para no ser desviados del camino y para mantener la continuidad del proyecto político y de nación.

Quiero decirles que hay que conducir al país para que viva una historia diferente a la que nos tocó en los últimos 200 años. Quiero apelar a la vocación patriótica de todos los argentinos: trabajadores, clase media, empresarios, dirigentes sociales, culturales y al pueblo todo. Un país no es construido por sus dirigentes, sino por el pueblo, destacó.

Consideró que la sociedad argentina dio una muestra de madurez, consolidando una de las reformas políticas más importantes de los últimos años.

Esa reforma que soñé como legisladora y que pude concretar como presidenta significa que los partidos políticos, que son el sustento de la democracia, mejoren la calidad de vida de hombres y mujeres concretos de nuestro pueblo. Este sistema de partidos se va a ver fortalecido al abrir las puertas de la sociedad.

Sostuvo que en la victoria hay que ser más grande y más generoso, manteniendo el discurso de campaña, en la cual evitó ataques a los opositores y no contestó ningún agravio.

Agradeció a los jóvenes que se incorporaron a la política, a todos los sectores sociales, y rindió un emotivo homenaje a su esposo, fallecido el año pasado. Sin él, sin su valentía y coraje no podríamos haber llegado hasta aquí. Él jamás dejó sus convicciones, hasta el último aliento.

En una parte de su discurso homenajeó también a los desaparecidos y víctimas de la pasada dictadura militar (1976-1983) y agradeció la presencia de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, quienes estaban en primera fila, interpretando esta presencia como un reconocimiento a su gestión.”

Destacó que la Ley de Medios y la de Reforma Política permitieron que todas las fuerzas pudieran acceder a los espacios audiovisuales, y señaló que los avances en esta última reforma llevarán a los dirigentes a replantear sus propuestas para que los discursos coincidan con sus acciones, recordando que muchos hablan de las instituciones, pero todos los días las demuelen un poquito

Reiteró su llamado a los argentinos a la unidad y a no distraerse en enfrentamientos inútiles, y demandó que participen activamente en todo lo que haya que mejorar. Ésta es la Argentina con la que yo sueño, que tenga continuidad, y no continuidad de personas, sino de proyectos políticos y de país.

Fernández de Kirchner tiene una larga carrera política. A sus 58 años ha sido diputada, y una senadora de fuerte presencia que se atrevió a quedar aislada de su bloque en el Congreso por enfrentar al ex presidente Carlos Menem.

No llegó al poder por ser esposa de un ex presidente, sino por su propia carrera política, que la hizo destacarse en las últimas décadas. Con un discurso sólido, como ha demostrado incluso en instancias internacionales, profundizó junto a sus colegas el proceso de integración de América Latina, con un papel muy activo.

Soy una mujer de 58 años que milita desde muy joven, he llegado a lugares que en mi vida pensé que podía llegar. No solamente tuve el honor de ser la primera presidenta electa, sino de ser la primera mujer presidenta relecta, y mi compañero también, ¿qué más puedo querer?

Remarcó que como argentina aspira a contribuir con la más alta responsabilidad, a aseguir agrandando el país, a seguir creciendo, a generar más puestos de trabajo, más ciencia, más tecnología, más escuelas, más salud, pero quiero decir que sola no se puede: necesitamos la comprensión de todos los argentinos.

Al respecto, remarcó que todo lo logrado demuestra lo importante que es la voluntad unida a la convicción.

La presidenta recibió los llamados de sus colegas latinoamericanos Dilma Rousseff, Hugo Chávez, José Mujica, Sebastián Piñera, Juan Manuel Santos y Fernando Lugo, entre otros.

De confirmarse las proyecciones, los próximos dos periodos legislativos aparecen como más propicios para que el FPV cuente con el apoyo del Congreso y con ello instalar los debates que debieron postergar después del último recambio legislativo del 2009.

La presidenta se trasladó a Plaza de Mayo, donde desde los balcones de la Casa Rosada habló a una multitud que manifestó pacíficamente su alegría en esta noche inolvidable para muchos. El FPV también ganó hoy varias gubernaturas importantes, además de la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país.

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