Ricardo Eguia
Era un día aciago en el que la penumbra se espesó y el color de las cosas se tornó de verde olivo – presagio del rojo bermellón que correría como ríos impetuosos de una era de rebajamiento y de primitivismo impetuoso…
Ánimos desbordados, crujir de odios, hostilidad maximizada en el ambiente a punto de hacer eclosión violenta como reacción a las burdas violaciones a la ley que obligaba al gobierno a ser imparcial y a no inmiscuirse en el proceso electoral…
Violaciones constantes y burdas a la ley, el uso de recursos públicos para favorecer a un candidato gris, campañas de mentiras y de lodo en los medios, engañifas cibernéticas, trastupijes con el padrón, el conteo de los votos adulterado, manipulación de resultados en el PREP, anunciar el IFE un ganador sin tener facultades ni todos los elementos, una resolución del “TRIFE” asaz contradictoria (por decir lo menos) y que sin hacer recuento de los votos tangencialmente declaraba válida la elección a pesar de la infinidad de violaciones que consigna puntualmente en su texto e ignominiosamente dejar constancia para la posteridad que “…Fox y el panismo pusieron en riesgo esas elecciones…”
Tretas, intrigas, bajezas, insidias, mediocridad bien organizada, tumultuarias manifestaciones en las calles, abuso faccioso del poder, tensas lucubraciones tartamudeantes, disfraces y fetiches seudodemocráticos, aturdidor y ofuscado ruido mediático, rupestres afanes destructivos por parte de las encrespadas hordas de la izquierda y de la derecha fascista eran ese día aciago el fermento explosivo de un país que atónito y estupefacto veía como descerebradas pandillas envilecidas se disputaban la Nación…
El recinto legislativo rodeado de tanquetas, de soldados de elementos del estado mayor; el interior transformado en hostal con la tribuna tomada por ambas forcejeantes e iracundas facciones, cerradas por dentro con cadenas las puertas para impedir la “toma de protesta del “chaparrito peloncito y de lentes” (Espino dixit) ese día aciago ante una República galvanizada por cuyas venas corría a borbotones la más abrupta tensión e incertidumbre, cuando colgaba de un alfiler la gobernabilidad y la paz social, ese día aciago el PRI emulando a Sócrates tomó la cicuta al integrar con su presencia el quórum indispensable y al abrirle la puerta de atrás al impostor se alió y pactó en automático con la peor ralea de la delincuencia oficial organizada, convalidó todas las salvajadas del foxi-calderonato y en tácita transacción permitió la involución así como la bancarrota futura de la débil democracia mexicana…
Claro que se explica la actitud del PRI ese día aciago, porque ningún mexicano sensato y somos la mayoría, deseaba que se entronizara la violencia…sin embargo hoy parafraseando al lingüista del idioma de Shakespeare, no solo el PRI sino el país entero en voz baja expresa “Pray the devil back to hell”, que en castellano diría “Reza para que regrese el diablo al infierno”.
Pero mientras unos rezan, los más despotrican, maldicen día y noche y se preguntan ¿Cómo fue posible que se haya permitido asaltar el poder por la “puerta de tras banderas” y haiga sido como haiga sido a un par de escalofriantes especímenes aliados reales del narcotráfico? Porque quien puede discutir que fue el ilota dicharachero del Bajío quién soltó al Chapo Guzmán y por espacio de cinco años el visceral y explosivo genocida no lo ha encontrado, lo ha dejado operar libérrimamente, lo ha protegido combatiendo a otros cárteles hasta ubicarlo entre los millonarios de la revista “Forbes”, convirtiéndolo en el símbolo inequívoco y vergonzante de este sexenio de la pudrición…
El verdadero problema para el PRI no es solo el estigma de haberse “aliado” y pactado con esa delincuencia oficial organizada al dejarle pasar todas sus pillerías y bribonadas para agandallarse la presidencia de la República, el problema grave es que le franqueó el paso a la recua de panistas mas facciosos, más perversos, más fanáticos más nocivos de esa cofradía…de ahí la pregunta recurrente que con más insistencia recorre por todo el país ¿Se volverán a repetir las maniobras ilegales, el uso, el abuso del poder, el pisoteo del estado de derecho así como los conflictos instigados desde Los Pinos y el cochinero del 2006 en el 2012?
Y esto no lo dicen solo los priístas respecto del costal de mañas, resentimientos, fobias, oscuro autoritarismo y proverbial mezquindad de Calderón, sino que certifican esa subcultura porril y las montañas de desprecio por la Ley tanto la Sra. Josefina Vázquez Mota al decir sin ambages: “Cuotas, prebendas y concesiones con el padrón panista para favorecer a Cordero…”lo cual ratifica Santiago Creel quién se quejó del dedazo de Calderón diciendo que “El PAN trabaja en la cargada para Cordero…”
También en un ríspido intercambio de palabras en su cara le espetó a Calderón el valiente poeta Javier Sicilia que “Se pone en riesgo la Democracia de por sí endeble, cuando por decisión presidencial los militares asumen funciones de seguridad pública que corresponde a los civiles, pero sin definirle al Ejército tiempo ni límites a su presencia en las calles…”
Prefigura Sicilia un escenario electoral amenizado por ráfagas de metralletas, tanquetas del Ejército, regueros de miles de cadáveres adicionales para contaminar el proceso, infundir miedo al personal de las casillas, temor al electorado y con un simple gruñido de García Luna le respondan sus manadas robándose los paquetes electorales que no favorezcan al enloquecido de Los Pinos que cada día rompe marcas (no precisamente en los Panamericanos) en los peores niveles de la violencia criminal en toda la historia de México.
Ante la cerrazón repujada y destructiva que hace de Calderón no la solución, sino la matriz del problema de la violencia para el uso faccioso del poder, también Javier Sicilia le dice “sus decisiones además de generar más violencia y terror, están provocando el surgimiento de grupos paramilitares que en esta atmósfera enrarecida y atroz, se sientan autorizados (faltó decirle, por usted) para asesinatos colectivos y ejercer lo que estúpidamente llaman justicia…
En el ridículo esquizofrénico Calderón que gastó millones en el slogan spotero “para que las drogas no lleguen a tus hijos” ante Sicilia reculó y bipolarmente expresó cínicamente que entre los objetivos de su “estrategia contra el narco nunca estuvo el de reducir el consumo de drogas…Como dice el insigne Catón, háganme el refabrón cavor…
Fiel a su condición de porro cerril Calderón ya hizo su primera incursión disruptiva en el proceso electoral del 2012 con una clara intención de criminalizarlo, judicializarlo y reventarlo acusando cobardemente en abstracto a “muchos priístas” de haber pactado con el narco y suponer ladino volverían a hacerlo, lo que denota no solo ser un individuo lenguaraz y boquiflojo sino ante todo aventurero inescrupuloso de la política que con extrema frivolidad acusa sin pruebas y si las tiene carece de agallas para consignar para que sean procesados los que fueren como es su obligación, pero al exigirle que demuestre y enjuicie o se disculpe o se retracte, se sale por peteneras ordenándole a Blake que interprete lo que quiso decir, agregando que sus torpes declaraciones fueron supuestamente sacadas de contexto…
De inmediato el diario “New York Times” lo ridiculiza publicando toda la entrevista del tiranuelo acomplejado y para que no se refugie este repelente polifónico que cobra como presidente, la publicación la repite en español, lo cual es inusitado e implica que no toleraran les culpe de sus gazapos etílicos este rufián que con sus taras y ambiciones enfermizas ya inició la guerra sucia que es lo único que sabe hacer…
Una última reflexión sobre las falacias y piruetas verbales y fugas hacia adelante del “bocón” de Los Pinos… ¿Cómo explicar que en Estados gobernados por panistas que no pactan según él con el narco, ahí reina la paz celestial inentendible y solo en Estados gobernados por el PRI se combata a los narcotraficantes con extrema virulencia, a sangre y fuego, de día y de noche, calle por calle y con fiereza si debía ser a la inversa?
¿Es solo para justificar la militarización en Estados priístas? ¿Por qué si no pactan los gobiernos panistas operan a sus anchas y en santa paz los narcos en Sinaloa, Morelos y Baja California?
Es obvia la estrategia Calderoniana: Regar cadáveres, secuestros colectivos, utilización del terror con grupos paramilitares para tener el pretexto de usar al Ejército en el 2012 en aquellas entidades donde no será fácil usar a sus mapaches, ni el dedazo (se reservó elegir directamente diputados de mayoría, plurinominales y senadores del PAN) ni evitar la peor debacle electoral de su régimen por todo el rencor que ha concitado en la sociedad.
La población de este país está preparada para cobrarle a Calderón y a sus testaferros todas las facturas acumuladas, primero en las urnas y luego en la Corte Penal Internacional de La Haya por crímenes de genocidio y violación de los derechos humanos…
Es infantil la pose de Calderón al sostener que de no haber actuado con el Ejército y violando la Constitución estaríamos peor y también que los que criticamos su “guerra” librada a tontas y a locas nos oponemos al combate del narco y a todos sus horrendos crímenes…Lo que la sociedad le exige es combatirlos si, pero con inteligencia y esto último ya se convenció el pueblo que es mucho pedirle, es una tepocata también, pero más pequeña.-
Antes (en la era del PRI) el país era el paso de drogas hacia el principal consumidor del mundo que siempre han sido los Estados Unidos…Ahora con la fracasada y sangrienta “guerra” de Calderón aumentaron los consumos de estupefacientes aquí, y se dispararon el narcomenudeo, los secuestros, las desapariciones forzadas, la extorsión, el cobro de derechos de piso, el contrabando, los asesinatos colectivos, el narcolavado de dinero no solo en el sistema bancario y financiero, sino más fácil para los delincuentes en la proliferación de cientos de casinos tolerados en medio todo de la corrupción galopante a niveles inconcebibles, en ese frenesí por el dinero ilegal de los persignados e hipócritas panistas, su ambición enfermiza, la cursilería mediática, frivolidad y superficialidad intelectual que hacen del sexenio calderoniano el mas maloliente y sanguinario de la historia.
Era un día aciago en el que la penumbra se espesó y el color de las cosas se tornó de verde olivo – presagio del rojo bermellón que correría como ríos impetuosos de una era de rebajamiento y de primitivismo impetuoso…
Ánimos desbordados, crujir de odios, hostilidad maximizada en el ambiente a punto de hacer eclosión violenta como reacción a las burdas violaciones a la ley que obligaba al gobierno a ser imparcial y a no inmiscuirse en el proceso electoral…
Violaciones constantes y burdas a la ley, el uso de recursos públicos para favorecer a un candidato gris, campañas de mentiras y de lodo en los medios, engañifas cibernéticas, trastupijes con el padrón, el conteo de los votos adulterado, manipulación de resultados en el PREP, anunciar el IFE un ganador sin tener facultades ni todos los elementos, una resolución del “TRIFE” asaz contradictoria (por decir lo menos) y que sin hacer recuento de los votos tangencialmente declaraba válida la elección a pesar de la infinidad de violaciones que consigna puntualmente en su texto e ignominiosamente dejar constancia para la posteridad que “…Fox y el panismo pusieron en riesgo esas elecciones…”
Tretas, intrigas, bajezas, insidias, mediocridad bien organizada, tumultuarias manifestaciones en las calles, abuso faccioso del poder, tensas lucubraciones tartamudeantes, disfraces y fetiches seudodemocráticos, aturdidor y ofuscado ruido mediático, rupestres afanes destructivos por parte de las encrespadas hordas de la izquierda y de la derecha fascista eran ese día aciago el fermento explosivo de un país que atónito y estupefacto veía como descerebradas pandillas envilecidas se disputaban la Nación…
El recinto legislativo rodeado de tanquetas, de soldados de elementos del estado mayor; el interior transformado en hostal con la tribuna tomada por ambas forcejeantes e iracundas facciones, cerradas por dentro con cadenas las puertas para impedir la “toma de protesta del “chaparrito peloncito y de lentes” (Espino dixit) ese día aciago ante una República galvanizada por cuyas venas corría a borbotones la más abrupta tensión e incertidumbre, cuando colgaba de un alfiler la gobernabilidad y la paz social, ese día aciago el PRI emulando a Sócrates tomó la cicuta al integrar con su presencia el quórum indispensable y al abrirle la puerta de atrás al impostor se alió y pactó en automático con la peor ralea de la delincuencia oficial organizada, convalidó todas las salvajadas del foxi-calderonato y en tácita transacción permitió la involución así como la bancarrota futura de la débil democracia mexicana…
Claro que se explica la actitud del PRI ese día aciago, porque ningún mexicano sensato y somos la mayoría, deseaba que se entronizara la violencia…sin embargo hoy parafraseando al lingüista del idioma de Shakespeare, no solo el PRI sino el país entero en voz baja expresa “Pray the devil back to hell”, que en castellano diría “Reza para que regrese el diablo al infierno”.
Pero mientras unos rezan, los más despotrican, maldicen día y noche y se preguntan ¿Cómo fue posible que se haya permitido asaltar el poder por la “puerta de tras banderas” y haiga sido como haiga sido a un par de escalofriantes especímenes aliados reales del narcotráfico? Porque quien puede discutir que fue el ilota dicharachero del Bajío quién soltó al Chapo Guzmán y por espacio de cinco años el visceral y explosivo genocida no lo ha encontrado, lo ha dejado operar libérrimamente, lo ha protegido combatiendo a otros cárteles hasta ubicarlo entre los millonarios de la revista “Forbes”, convirtiéndolo en el símbolo inequívoco y vergonzante de este sexenio de la pudrición…
El verdadero problema para el PRI no es solo el estigma de haberse “aliado” y pactado con esa delincuencia oficial organizada al dejarle pasar todas sus pillerías y bribonadas para agandallarse la presidencia de la República, el problema grave es que le franqueó el paso a la recua de panistas mas facciosos, más perversos, más fanáticos más nocivos de esa cofradía…de ahí la pregunta recurrente que con más insistencia recorre por todo el país ¿Se volverán a repetir las maniobras ilegales, el uso, el abuso del poder, el pisoteo del estado de derecho así como los conflictos instigados desde Los Pinos y el cochinero del 2006 en el 2012?
Y esto no lo dicen solo los priístas respecto del costal de mañas, resentimientos, fobias, oscuro autoritarismo y proverbial mezquindad de Calderón, sino que certifican esa subcultura porril y las montañas de desprecio por la Ley tanto la Sra. Josefina Vázquez Mota al decir sin ambages: “Cuotas, prebendas y concesiones con el padrón panista para favorecer a Cordero…”lo cual ratifica Santiago Creel quién se quejó del dedazo de Calderón diciendo que “El PAN trabaja en la cargada para Cordero…”
También en un ríspido intercambio de palabras en su cara le espetó a Calderón el valiente poeta Javier Sicilia que “Se pone en riesgo la Democracia de por sí endeble, cuando por decisión presidencial los militares asumen funciones de seguridad pública que corresponde a los civiles, pero sin definirle al Ejército tiempo ni límites a su presencia en las calles…”
Prefigura Sicilia un escenario electoral amenizado por ráfagas de metralletas, tanquetas del Ejército, regueros de miles de cadáveres adicionales para contaminar el proceso, infundir miedo al personal de las casillas, temor al electorado y con un simple gruñido de García Luna le respondan sus manadas robándose los paquetes electorales que no favorezcan al enloquecido de Los Pinos que cada día rompe marcas (no precisamente en los Panamericanos) en los peores niveles de la violencia criminal en toda la historia de México.
Ante la cerrazón repujada y destructiva que hace de Calderón no la solución, sino la matriz del problema de la violencia para el uso faccioso del poder, también Javier Sicilia le dice “sus decisiones además de generar más violencia y terror, están provocando el surgimiento de grupos paramilitares que en esta atmósfera enrarecida y atroz, se sientan autorizados (faltó decirle, por usted) para asesinatos colectivos y ejercer lo que estúpidamente llaman justicia…
En el ridículo esquizofrénico Calderón que gastó millones en el slogan spotero “para que las drogas no lleguen a tus hijos” ante Sicilia reculó y bipolarmente expresó cínicamente que entre los objetivos de su “estrategia contra el narco nunca estuvo el de reducir el consumo de drogas…Como dice el insigne Catón, háganme el refabrón cavor…
Fiel a su condición de porro cerril Calderón ya hizo su primera incursión disruptiva en el proceso electoral del 2012 con una clara intención de criminalizarlo, judicializarlo y reventarlo acusando cobardemente en abstracto a “muchos priístas” de haber pactado con el narco y suponer ladino volverían a hacerlo, lo que denota no solo ser un individuo lenguaraz y boquiflojo sino ante todo aventurero inescrupuloso de la política que con extrema frivolidad acusa sin pruebas y si las tiene carece de agallas para consignar para que sean procesados los que fueren como es su obligación, pero al exigirle que demuestre y enjuicie o se disculpe o se retracte, se sale por peteneras ordenándole a Blake que interprete lo que quiso decir, agregando que sus torpes declaraciones fueron supuestamente sacadas de contexto…
De inmediato el diario “New York Times” lo ridiculiza publicando toda la entrevista del tiranuelo acomplejado y para que no se refugie este repelente polifónico que cobra como presidente, la publicación la repite en español, lo cual es inusitado e implica que no toleraran les culpe de sus gazapos etílicos este rufián que con sus taras y ambiciones enfermizas ya inició la guerra sucia que es lo único que sabe hacer…
Una última reflexión sobre las falacias y piruetas verbales y fugas hacia adelante del “bocón” de Los Pinos… ¿Cómo explicar que en Estados gobernados por panistas que no pactan según él con el narco, ahí reina la paz celestial inentendible y solo en Estados gobernados por el PRI se combata a los narcotraficantes con extrema virulencia, a sangre y fuego, de día y de noche, calle por calle y con fiereza si debía ser a la inversa?
¿Es solo para justificar la militarización en Estados priístas? ¿Por qué si no pactan los gobiernos panistas operan a sus anchas y en santa paz los narcos en Sinaloa, Morelos y Baja California?
Es obvia la estrategia Calderoniana: Regar cadáveres, secuestros colectivos, utilización del terror con grupos paramilitares para tener el pretexto de usar al Ejército en el 2012 en aquellas entidades donde no será fácil usar a sus mapaches, ni el dedazo (se reservó elegir directamente diputados de mayoría, plurinominales y senadores del PAN) ni evitar la peor debacle electoral de su régimen por todo el rencor que ha concitado en la sociedad.
La población de este país está preparada para cobrarle a Calderón y a sus testaferros todas las facturas acumuladas, primero en las urnas y luego en la Corte Penal Internacional de La Haya por crímenes de genocidio y violación de los derechos humanos…
Es infantil la pose de Calderón al sostener que de no haber actuado con el Ejército y violando la Constitución estaríamos peor y también que los que criticamos su “guerra” librada a tontas y a locas nos oponemos al combate del narco y a todos sus horrendos crímenes…Lo que la sociedad le exige es combatirlos si, pero con inteligencia y esto último ya se convenció el pueblo que es mucho pedirle, es una tepocata también, pero más pequeña.-
Antes (en la era del PRI) el país era el paso de drogas hacia el principal consumidor del mundo que siempre han sido los Estados Unidos…Ahora con la fracasada y sangrienta “guerra” de Calderón aumentaron los consumos de estupefacientes aquí, y se dispararon el narcomenudeo, los secuestros, las desapariciones forzadas, la extorsión, el cobro de derechos de piso, el contrabando, los asesinatos colectivos, el narcolavado de dinero no solo en el sistema bancario y financiero, sino más fácil para los delincuentes en la proliferación de cientos de casinos tolerados en medio todo de la corrupción galopante a niveles inconcebibles, en ese frenesí por el dinero ilegal de los persignados e hipócritas panistas, su ambición enfermiza, la cursilería mediática, frivolidad y superficialidad intelectual que hacen del sexenio calderoniano el mas maloliente y sanguinario de la historia.
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