Alberto Aguilar
Conforme pasan las horas la cuenta regresiva para lograr la aprobación del TLC con Perú se estrecha. Hay una especie de fecha límite para el 28 de julio, cuando el presidente peruano Alán García entregará la estafeta al nacionalista Ollanta Humala.
La intención del presidente Felipe Calderón es lograr la ratificación antes de que se marche García, puesto que el nuevo Gobierno no necesariamente estará tan dispuesto.
El obstáculo que enfrenta Economía de Bruno Ferrari son los productores del campo, reacios a que México suscriba ese acuerdo en una negociación que se ha prolongado por más de 5 años.
Los primeros esfuerzos comenzaron en el año 2006 y concluyeron en abril de este año. Claro que del 2007 al 2010 se hizo una pausa, igual por el sector agropecuario.
No obstante que la mayoría de los sectores económicos ya dieron su aval, esto es alimentos, bebidas, textiles, impresión, químico, hule, cemento, herramientas, equipo electrónico, electrodomésticos, transporte, el agropecuario puso en excepción primero a 13 y luego a 16 productos.
Economía y la misma Sagarpa sostuvieron con el CNA que encabeza Juan Carlos Cortés y otras agrupaciones, más de 100 reuniones de consulta en el contexto de las negociaciones.
Al final el gobierno decidió entregar a Perú una oferta ya con los parámetros de acceso acotados de los productos que las agrupaciones habían identificado como sensibles.
Algunos productos se excluyeron y a otros se les establecieron cupos y estacionalidades.
Quedaron fuera café, azúcar, carne de res y pollo, papa, chile, cocos, manzana, piña, uva pasa y lácteos, excepto la leche evaporada.
Los productores buscaron sumar al resto de los productos que ellos catalogaron como delicados. El Gobierno consideró inviable la posición puesto que estos son el principal interés de exportación de Perú.
Además se consideró injustificado, ya que México es uno de los principales exportadores del mundo de muchos de ellos e importador relevante.
En este entorno fue que el 6 de abril se suscribió el acuerdo y luego el Senado decidió que no había las condiciones para aprobar.
Más recientemente con Sagarpa de Francisco Mayorga, se platicó de incluir a muchos de los productos sensibles en los planes rectores que implementa esa dependencia para mejorar la competitividad a 5 años.
Los de 6 o 7 alimentos como aguacate, espárrago, papas se flexibilizaron, no así los del plátano, chile o frijol, más radicales.
Se pretendió que los que estaban a favor establecieran un convenio ya con los cupos y condiciones. Sin embargo, ya para firmar, se habló de “solidaridad horizontal” o sea todos o ninguno. En el ínter muchos han solicitado además fondos públicos, dada su actual situación. Si bien Sagarpa no dejó de lado los apoyos, se analizó el precedente, amén de que los recursos deben ser aprobados por la Secretaría de Hacienda de Ernesto Cordero, algunos incluso para 2012, lo cual complica más el asunto.
Hoy habría una reunión en la Sagarpa que podría ser importante. Será con los productores de frijol del estado de Nayarit, que no han comercializado 36 mil toneladas.
Los candidatos a la gubernatura en el reciente proceso electoral prometieron la venta de ese frijol a 13 pesos kilo, a todas luces fuera de mercado.
Poco a poco los productores comprendieron y han comenzado a deshacerse de su producción a precios menores. Hay sin embargo 2 mil toneladas de baja calidad que implicarán utilizar fórmulas alternas.
El que los productores de frijol se suban al TLC con Perú ayudaría, máxime que en su caso se habla de un riesgo neutro.
Sin embargo el expediente no se ve fácil dada su politización al involucrarse los distintos partidos y empalmarse el asunto con los tiempos electorales.
Como quiera en el gobierno aún se tienen esperanzas.
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NO HACE MUCHO le platicaba de la preocupación que hay al interior del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) de Efrén Parada por la subasta que ya inició Pemex Refinación a cargo de Miguel Tame para licitar los tratamientos químicos a proceso y agua de la refinería Minatitlán. El próximo 4 de agosto será la presentación de ofertas. Pese a que se menciona la participación de multinacionales, Pemex que dirige Juan José Suárez Coppel precisó que el proceso no excluye a empresas mexicanas y menos al IMP, durante años su socio tecnológico. El objetivo es licitar estos servicios de manera integrada, a fin de lograr ahorros hasta por 36 millones de pesos anuales. Además se mejorará el rendimiento de las plantas, costos, tiempos de mantenimiento y ahorros en agua y emisiones a la atmósfera. Hasta ahora las refinerías cuentan con contratos para estos menesteres que ofrecen diversos proveedores independientes y dispersos. Esto impide aprovechar las ventajas de la consolidación de servicios. Hay 11 postores y entre ellos está también el IMP.
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Y EN CUANTO a Metraval, la nueva empresa del traslado de valores que comenzará a operar formalmente en agosto, propiedad de Javier Pérez Teuffer y Fernando Mangino, así como su negocio alterno de cajeros automáticos, fíjese que en este último renglón se tropezó con la china GRG, propiedad del Gobierno, y que incumplió flagrantemente un contrato para abastecer 500 de esos aparatos también denominados ATM’s. El asunto llegó a la embajada del país asiático, sin gran cambio para cumplir. No es la primera vez que un empresario mexicano tropieza con alguna compañía china no muy comprometidas con el cliente. Obviamente ya hay acciones legales. Para seguir adelante con su agresivo plan de instalar una red de 5 mil cajeros en alianza con GFMultiva de Olegario Vázquez Raña, Metraval ya cerró otro convenio con NCR de Agustín Guzmán.
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EN MEDIO DE una jornada incierta, dado el cúmulo de interrogantes que hay en EU y Europa, Banregio que comanda Manuel Rivero Santos sí pudo colocar ayer en la BMV que encabeza Luis Téllez. Fue algo así como el 19% de su capital y unos 2 mil millones de pesos, esto es unos 173 millones de dólares. El precio por título fue de 32 pesos. La tenencia accionaria se diluyó en más de mil 500 inversionistas, entre ellos 4 afores y algunas firmas internacionales. La oferta estuvo a cargo de Accival que dirige Eduardo Navarro y Bancomer de Ignacio Deschamps. Vale destacar que en el último intento, Interjet de Miguel Alemán prefirió abortar y esto mismo se ha repetido en Brasil y España. Claro que hacia la economía mexicana hay mayor confianza por sus fundamentales. Los recursos servirán para empujar el crecimiento del banco regio y una de las zonas a las que apostará es el DF.
Conforme pasan las horas la cuenta regresiva para lograr la aprobación del TLC con Perú se estrecha. Hay una especie de fecha límite para el 28 de julio, cuando el presidente peruano Alán García entregará la estafeta al nacionalista Ollanta Humala.
La intención del presidente Felipe Calderón es lograr la ratificación antes de que se marche García, puesto que el nuevo Gobierno no necesariamente estará tan dispuesto.
El obstáculo que enfrenta Economía de Bruno Ferrari son los productores del campo, reacios a que México suscriba ese acuerdo en una negociación que se ha prolongado por más de 5 años.
Los primeros esfuerzos comenzaron en el año 2006 y concluyeron en abril de este año. Claro que del 2007 al 2010 se hizo una pausa, igual por el sector agropecuario.
No obstante que la mayoría de los sectores económicos ya dieron su aval, esto es alimentos, bebidas, textiles, impresión, químico, hule, cemento, herramientas, equipo electrónico, electrodomésticos, transporte, el agropecuario puso en excepción primero a 13 y luego a 16 productos.
Economía y la misma Sagarpa sostuvieron con el CNA que encabeza Juan Carlos Cortés y otras agrupaciones, más de 100 reuniones de consulta en el contexto de las negociaciones.
Al final el gobierno decidió entregar a Perú una oferta ya con los parámetros de acceso acotados de los productos que las agrupaciones habían identificado como sensibles.
Algunos productos se excluyeron y a otros se les establecieron cupos y estacionalidades.
Quedaron fuera café, azúcar, carne de res y pollo, papa, chile, cocos, manzana, piña, uva pasa y lácteos, excepto la leche evaporada.
Los productores buscaron sumar al resto de los productos que ellos catalogaron como delicados. El Gobierno consideró inviable la posición puesto que estos son el principal interés de exportación de Perú.
Además se consideró injustificado, ya que México es uno de los principales exportadores del mundo de muchos de ellos e importador relevante.
En este entorno fue que el 6 de abril se suscribió el acuerdo y luego el Senado decidió que no había las condiciones para aprobar.
Más recientemente con Sagarpa de Francisco Mayorga, se platicó de incluir a muchos de los productos sensibles en los planes rectores que implementa esa dependencia para mejorar la competitividad a 5 años.
Los de 6 o 7 alimentos como aguacate, espárrago, papas se flexibilizaron, no así los del plátano, chile o frijol, más radicales.
Se pretendió que los que estaban a favor establecieran un convenio ya con los cupos y condiciones. Sin embargo, ya para firmar, se habló de “solidaridad horizontal” o sea todos o ninguno. En el ínter muchos han solicitado además fondos públicos, dada su actual situación. Si bien Sagarpa no dejó de lado los apoyos, se analizó el precedente, amén de que los recursos deben ser aprobados por la Secretaría de Hacienda de Ernesto Cordero, algunos incluso para 2012, lo cual complica más el asunto.
Hoy habría una reunión en la Sagarpa que podría ser importante. Será con los productores de frijol del estado de Nayarit, que no han comercializado 36 mil toneladas.
Los candidatos a la gubernatura en el reciente proceso electoral prometieron la venta de ese frijol a 13 pesos kilo, a todas luces fuera de mercado.
Poco a poco los productores comprendieron y han comenzado a deshacerse de su producción a precios menores. Hay sin embargo 2 mil toneladas de baja calidad que implicarán utilizar fórmulas alternas.
El que los productores de frijol se suban al TLC con Perú ayudaría, máxime que en su caso se habla de un riesgo neutro.
Sin embargo el expediente no se ve fácil dada su politización al involucrarse los distintos partidos y empalmarse el asunto con los tiempos electorales.
Como quiera en el gobierno aún se tienen esperanzas.
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NO HACE MUCHO le platicaba de la preocupación que hay al interior del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) de Efrén Parada por la subasta que ya inició Pemex Refinación a cargo de Miguel Tame para licitar los tratamientos químicos a proceso y agua de la refinería Minatitlán. El próximo 4 de agosto será la presentación de ofertas. Pese a que se menciona la participación de multinacionales, Pemex que dirige Juan José Suárez Coppel precisó que el proceso no excluye a empresas mexicanas y menos al IMP, durante años su socio tecnológico. El objetivo es licitar estos servicios de manera integrada, a fin de lograr ahorros hasta por 36 millones de pesos anuales. Además se mejorará el rendimiento de las plantas, costos, tiempos de mantenimiento y ahorros en agua y emisiones a la atmósfera. Hasta ahora las refinerías cuentan con contratos para estos menesteres que ofrecen diversos proveedores independientes y dispersos. Esto impide aprovechar las ventajas de la consolidación de servicios. Hay 11 postores y entre ellos está también el IMP.
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Y EN CUANTO a Metraval, la nueva empresa del traslado de valores que comenzará a operar formalmente en agosto, propiedad de Javier Pérez Teuffer y Fernando Mangino, así como su negocio alterno de cajeros automáticos, fíjese que en este último renglón se tropezó con la china GRG, propiedad del Gobierno, y que incumplió flagrantemente un contrato para abastecer 500 de esos aparatos también denominados ATM’s. El asunto llegó a la embajada del país asiático, sin gran cambio para cumplir. No es la primera vez que un empresario mexicano tropieza con alguna compañía china no muy comprometidas con el cliente. Obviamente ya hay acciones legales. Para seguir adelante con su agresivo plan de instalar una red de 5 mil cajeros en alianza con GFMultiva de Olegario Vázquez Raña, Metraval ya cerró otro convenio con NCR de Agustín Guzmán.
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EN MEDIO DE una jornada incierta, dado el cúmulo de interrogantes que hay en EU y Europa, Banregio que comanda Manuel Rivero Santos sí pudo colocar ayer en la BMV que encabeza Luis Téllez. Fue algo así como el 19% de su capital y unos 2 mil millones de pesos, esto es unos 173 millones de dólares. El precio por título fue de 32 pesos. La tenencia accionaria se diluyó en más de mil 500 inversionistas, entre ellos 4 afores y algunas firmas internacionales. La oferta estuvo a cargo de Accival que dirige Eduardo Navarro y Bancomer de Ignacio Deschamps. Vale destacar que en el último intento, Interjet de Miguel Alemán prefirió abortar y esto mismo se ha repetido en Brasil y España. Claro que hacia la economía mexicana hay mayor confianza por sus fundamentales. Los recursos servirán para empujar el crecimiento del banco regio y una de las zonas a las que apostará es el DF.
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