Navi Pillay, Alta Comisionada de las Naciones Unidas por los Derechos Humanos, realizó una vista a México
El Informador
El Presidente Felipe Calderón firmó un acuerdo para la protección de los defensores de los derechos humanos en México.
En presencia de Navi Pillay, Alta Comisionada de las Naciones Unidas por los Derechos Humanos, Calderón dijo en dos ocasiones que en México se persigue al crimen, pero sin suspensión o cancelación de derechos humanos.
Refrendó además que cualquier violación cometida por alguna autoridad debe ser perseguida y castigada, incluso anotó que ya ha habido casos de juicio y cárcel a muchos agentes de la fuerza pública.
El Presidente firmó el "acuerdo por el que se establecen las bases del mecanismo de protección de defensoras y defensores de los derechos humanos, a partir de la instrumentación de acciones coordinadas que en el ámbito de sus atribuciones desarrollarán la Secretaría de Gobernación, las dependencias y entidades de la administración pública federal y la Procuraduría General de la República".
El documento no fue entregado a los medios de comunicación.
"Instruyó a todas las dependencias involucradas para que trabajen con serenidad en el cumplimiento de este acuerdo y redoble de esfuerzos para que se instrumente, a la brevedad, este mecanismo de protección a los derechos humanos", afirmó el Presidente.
Calderón dijo que se debe perseverar y triunfar con el afán de hacer de México un país de leyes.
"Si queremos que se protejan los derechos de todos, debe ser ejerciendo, precisamente, una actividad pública que proteja los derechos de las personas".
El Presidente se dijo bien consciente y, por ello, instruyó a todas las dependencias del gabinete de seguridad federal a "que debemos proteger los derechos humanos en cualquier acción del Estado y que cualquier violación a los derechos humanos o a la ley debe ser investigado, perseguida y castigada conforme al derecho que tenemos en nuestro país".
Calderón afirmó que es una convicción profundamente suya la de respetar el marco legal de México, el cual no hemos alterado, ha continuado vigente, y no se ha hecho ni declaratorias extraordinarias ni situaciones excepcionales, ni suspensiones o cancelaciones de derechos humanos, que aunque estén previstas en la Constitución no se ha recorrido a esa figura constitucional, porque tenemos la convicción de que este esfuerzo tiene que darse en el marco de plena vigencia de los derechos de las personas.
El titular del Ejecutivo federal reiteró que cualquier violación a tales derechos por cualquier autoridad debe ser perseguida y castigada.
"Ésa es la instrucción que he dado y así está siendo cumplida en aquellos casos en que se han conocido acto violatorios a la ley o a los derechos humanos, que han llevado a juicio y a la cárcel a muchos agentes de la fuerza pública".
La Alta Comisionada dijo previamente que cualquier violación a los derechos cometida por agentes de seguridad, independientemente de su origen, debería ser revisada por tribunales civiles, a lo cual Calderón no hizo comentario alguno.
El Presidente resaltó acciones llevadas a cabo en México como reformas legales y acciones en materia de salud y educación, como parte de la protección de los derechos de las personas.
El Informador
El Presidente Felipe Calderón firmó un acuerdo para la protección de los defensores de los derechos humanos en México.
En presencia de Navi Pillay, Alta Comisionada de las Naciones Unidas por los Derechos Humanos, Calderón dijo en dos ocasiones que en México se persigue al crimen, pero sin suspensión o cancelación de derechos humanos.
Refrendó además que cualquier violación cometida por alguna autoridad debe ser perseguida y castigada, incluso anotó que ya ha habido casos de juicio y cárcel a muchos agentes de la fuerza pública.
El Presidente firmó el "acuerdo por el que se establecen las bases del mecanismo de protección de defensoras y defensores de los derechos humanos, a partir de la instrumentación de acciones coordinadas que en el ámbito de sus atribuciones desarrollarán la Secretaría de Gobernación, las dependencias y entidades de la administración pública federal y la Procuraduría General de la República".
El documento no fue entregado a los medios de comunicación.
"Instruyó a todas las dependencias involucradas para que trabajen con serenidad en el cumplimiento de este acuerdo y redoble de esfuerzos para que se instrumente, a la brevedad, este mecanismo de protección a los derechos humanos", afirmó el Presidente.
Calderón dijo que se debe perseverar y triunfar con el afán de hacer de México un país de leyes.
"Si queremos que se protejan los derechos de todos, debe ser ejerciendo, precisamente, una actividad pública que proteja los derechos de las personas".
El Presidente se dijo bien consciente y, por ello, instruyó a todas las dependencias del gabinete de seguridad federal a "que debemos proteger los derechos humanos en cualquier acción del Estado y que cualquier violación a los derechos humanos o a la ley debe ser investigado, perseguida y castigada conforme al derecho que tenemos en nuestro país".
Calderón afirmó que es una convicción profundamente suya la de respetar el marco legal de México, el cual no hemos alterado, ha continuado vigente, y no se ha hecho ni declaratorias extraordinarias ni situaciones excepcionales, ni suspensiones o cancelaciones de derechos humanos, que aunque estén previstas en la Constitución no se ha recorrido a esa figura constitucional, porque tenemos la convicción de que este esfuerzo tiene que darse en el marco de plena vigencia de los derechos de las personas.
El titular del Ejecutivo federal reiteró que cualquier violación a tales derechos por cualquier autoridad debe ser perseguida y castigada.
"Ésa es la instrucción que he dado y así está siendo cumplida en aquellos casos en que se han conocido acto violatorios a la ley o a los derechos humanos, que han llevado a juicio y a la cárcel a muchos agentes de la fuerza pública".
La Alta Comisionada dijo previamente que cualquier violación a los derechos cometida por agentes de seguridad, independientemente de su origen, debería ser revisada por tribunales civiles, a lo cual Calderón no hizo comentario alguno.
El Presidente resaltó acciones llevadas a cabo en México como reformas legales y acciones en materia de salud y educación, como parte de la protección de los derechos de las personas.
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