Daniela Rea / Reforma
El mensaje del 10 de junio en Ciudad Juárez será claro: si el Estado no cumple, la ciudadanía responderá con acciones de no cooperación que podrían llegar a la desobediencia civil, advirtió ayer Javier Sicilia.
"Debemos llegar a consensos y ver la posibilidad de movilizarnos. Hay fases anteriores a la desobediencia civil como la no cooperación, el boicot. Lo importante es llegar al pacto y a partir de él dar a las autoridades chance de cumplir esos instrumentos legales.
"Si las autoridades no tiene la sensibilidad ni la dimensión política, ni la luz política para llevar a cabo estos 6 puntos del pacto veremos cómo nos articulamos para la resistencia, como última ratio.
Parece que hay voluntad de las autoridades y hay que darles la oportunidad de ello. Si no, la desobediencia civil. Eso se verá en Juárez, ver si tenemos los consensos y la fuerza suficiente para eso, creo que se puede construir", señaló el poeta.
La Caravana del Consuelo, convocada por el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, inicia este sábado en Cuernavaca con destino Cuidad Juárez, donde el 10 de junio se firmará el Pacto Ciudadano, preámbulo para emplazar al Estado mexicano a cumplir con las exigencias de justicia, reconstrucción del tejido social y cese a la guerra.
En esa ciudad, signo del dolor de la nación como la ha llamado el poeta, los ciudadanos se distribuirán en seis comités, cada uno dará seguimiento a los puntos del pacto, y definirá los mecanismos de sanción a los tres poderes del Estado, en caso de incumplimiento.
Agregó que los trabajos en Ciudad Juárez serán muy importantes para precisar el orden de su llamado al Estado.
El poeta lamentó que el Poder Judicial no se haya pronunciado sobre los puntos planteados por el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad al término de la marcha que concluyó el pasado 8 de mayo en el Zócalo de la Ciudad de México.
Adelantó que se afinan los detalles para un posible encuentro entre familiares de víctimas de la violencia y el Presidente Felipe Calderón, que tendría lugar en el Museo de Antropología.
Para el poeta, Ciudad Juárez será el lugar donde el movimiento que encabeza medirá fuerzas para la refundación del País, a través de la firma del Pacto Ciudadano.
A dos meses de la primera marcha en Cuernavaca, el movimiento es más sólido y se afianza en torno a los seis puntos del pacto y el llamado a aterrizarlos a la agenda local, concluye Sicilia.
Con la esperanza opacando al cansancio y al vacío que le produce la muerte de su hijo Juan Francisco, reconoce en la Caravana la dignidad que necesita México para no terminar en un desastre.
"La dignidad que nos mantiene en pie y desafiantes ante la realidad que nos quisiera en el suelo, destrozados, sumidos en el miedo. El corazón del País no está dispuesto a soportar más humillaciones, más destrucciones, más desprecio", dice a la distancia, un par de noches previas a la Caravana, desde San Francisco, California, donde recibió el premio de DH Global Exchange.
Usted ha planteado que este no es un 'Movimiento de Movimientos'
Crearlo es dispersar la sustancia y generar un grupo de poder directivo que no va con mi temperamento, ni con el de la gente que estamos en el corazón del movimiento. La urgencia es crear un suelo, por eso hemos pedido los 6 puntos del pacto, hay que sumarnos a ellos con las agendas particulares de los estados.
Necesitamos unirnos y generar procesos de presión, lograr voces para crear ese suelo que el País que necesita y llegar a las elecciones con una posibilidad de que esto no termine en un Estado militar o en un desastre, sino en un rescate democrático del País.
¿Como próximo horizonte el 2012?
Se trata de abrir un horizonte que verdaderamente rescate a la democracia del País. La reforma política está detenida en el Congreso. Es fundamental que pase con los agregados que pedimos en el pacto: voto blanco, abolición del fuero, revocación del mandato, plebiscito, candidatos ciudadanos. Con esos elementos inmediatos podemos construir un mejor escenario para el País.
Es el gran reto, la unidad ciudadana.
Sí, es fundamental. Ya sabemos lo que pasa en estos diálogos (con el Gobierno) se comprometen y a la mera hora traicionan, faltan a la palabra. Es muy importante la unidad ciudadana porque si vuelven a eso, podemos presionar.
Por eso a los ciudadanos les decimos que no dejen el proceso. Sin ellos las demandas al Gobierno no van a poder ser. Necesitamos entenderlo para que lo entienda la clase política: la soberanía radica en nosotros y somos nosotros quienes podemos conducir y exigir que los procesos vayan en la línea y dirección de servicio a los ciudadanos y no a las instituciones.
Sortear golpeteos
El camino a Juárez es mucho más que 2 mil kilómetros de distancia y discusiones entre organismos civiles que superan diferencias para la refundación del País. Es un camino que desde el 8 de mayo ha sorteado golpeteos externos. Desde comentarios en las redes sociales que acusan al poeta de exprimir beneficios de la muerte de su hijo, hasta los señalamientos de "politización" del movimiento. En el lapso, un par de cartas apócrifas a nombre del poeta en las que se le dice al alcalde juarense "no lo queremos cerca".
¿De dónde vienen esos golpeteos?
De grupos que tienen intereses políticos, que no son los intereses ciudadanos, sino de poder, de partido, que no vieron con buenos ojos el movimiento porque implica una reforma que rompe sus conveniencias.
Sicilia, sin mencionar remitentes, refiere que parten de la incomprensión, perturbación y una "vileza inmensa" de usar a las víctimas y su dolor para desprestigiar el proceso. Convencido, afirma que pese a ello el corazón del movimiento permanece limpio. "Preocupado porque la nación no se nos pierda", apunta.
La refundación de este País implica un proceso largo. ¿Nos tocará verlo?
Costará muchas generaciones. Ojalá podamos ver un poco de luz, de suelo, que las instituciones empiezan a limpiarse, a purificarse. Tengo esperanzas. Es evidente, quizá no lo veamos, pero ojalá y nuestros hijos, nietos, puedan vivir en el México con el cual soñamos y llevamos en el corazón y el cual estas movilizaciones son su rostro más claro.
Hartos porque la violencia transformó sus vidas y curtidos en luchas por el derecho a la vivienda, educación, medio ambiente, trabajo, ciudadanos tejen el cobijo a la Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad.
Los indígenas de Cherán, que perdieron sus bosques en manos del crimen organizado y maestros de la sección 28 de la CNTE saludarán a la caravana en Morelia; en San Luis Potosí, la recepción estará encabezada por ambientalistas y Concepción Calvillo de Nava, viuda del doctor Salvador Nava.
En Zacatecas, ciudadanos novatos en la organización civil, hartos de encerrarse en casa a las 9 de la noche por la violencia. En Durango, el Consejo Coordinador Obrero Popular que nació en la lucha por la vivienda y jóvenes músicos de rock y punk; en Torreón, los Laguneros por la Paz que surgieron hace tres años en la lucha por el agua y ahora, inspirados en Gandhi, buscan seguridad ciudadana.
"Nos unimos por una paz duradera. Los muertos son nuestros, las balas rompen nuestro vínculo con los demás. El miedo no es la salida, debemos salir, expresarnos, exigirles, explorar alternativas", planteó Víctor Cabrera, miembro de Laguneros por la Paz.
En Saltillo, el Obispo Raúl Vera encabezará el recibimiento, pero la palabra la tomarán los migrantes, familias de desaparecidos y de los mineros de Pasta de Conchos; en Monterrey y Chihuahua, maestros y familiares de asesinados darán la bienvenida. Finalmente, en Ciudad Juárez, la Caravana será acogida en Villas de Salvárcar.
"Los que estamos unidos en esta caravana sabemos que lo importante es fortalecernos como sociedad, conocernos, reconocernos y debatir qué buscamos para el bien común. Después dialogar con el Gobierno", refirió Martín Faz de la organización Educación y Ciudadanía de San Luis Potosí.
El mensaje del 10 de junio en Ciudad Juárez será claro: si el Estado no cumple, la ciudadanía responderá con acciones de no cooperación que podrían llegar a la desobediencia civil, advirtió ayer Javier Sicilia.
"Debemos llegar a consensos y ver la posibilidad de movilizarnos. Hay fases anteriores a la desobediencia civil como la no cooperación, el boicot. Lo importante es llegar al pacto y a partir de él dar a las autoridades chance de cumplir esos instrumentos legales.
"Si las autoridades no tiene la sensibilidad ni la dimensión política, ni la luz política para llevar a cabo estos 6 puntos del pacto veremos cómo nos articulamos para la resistencia, como última ratio.
Parece que hay voluntad de las autoridades y hay que darles la oportunidad de ello. Si no, la desobediencia civil. Eso se verá en Juárez, ver si tenemos los consensos y la fuerza suficiente para eso, creo que se puede construir", señaló el poeta.
La Caravana del Consuelo, convocada por el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, inicia este sábado en Cuernavaca con destino Cuidad Juárez, donde el 10 de junio se firmará el Pacto Ciudadano, preámbulo para emplazar al Estado mexicano a cumplir con las exigencias de justicia, reconstrucción del tejido social y cese a la guerra.
En esa ciudad, signo del dolor de la nación como la ha llamado el poeta, los ciudadanos se distribuirán en seis comités, cada uno dará seguimiento a los puntos del pacto, y definirá los mecanismos de sanción a los tres poderes del Estado, en caso de incumplimiento.
Agregó que los trabajos en Ciudad Juárez serán muy importantes para precisar el orden de su llamado al Estado.
El poeta lamentó que el Poder Judicial no se haya pronunciado sobre los puntos planteados por el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad al término de la marcha que concluyó el pasado 8 de mayo en el Zócalo de la Ciudad de México.
Adelantó que se afinan los detalles para un posible encuentro entre familiares de víctimas de la violencia y el Presidente Felipe Calderón, que tendría lugar en el Museo de Antropología.
Para el poeta, Ciudad Juárez será el lugar donde el movimiento que encabeza medirá fuerzas para la refundación del País, a través de la firma del Pacto Ciudadano.
A dos meses de la primera marcha en Cuernavaca, el movimiento es más sólido y se afianza en torno a los seis puntos del pacto y el llamado a aterrizarlos a la agenda local, concluye Sicilia.
Con la esperanza opacando al cansancio y al vacío que le produce la muerte de su hijo Juan Francisco, reconoce en la Caravana la dignidad que necesita México para no terminar en un desastre.
"La dignidad que nos mantiene en pie y desafiantes ante la realidad que nos quisiera en el suelo, destrozados, sumidos en el miedo. El corazón del País no está dispuesto a soportar más humillaciones, más destrucciones, más desprecio", dice a la distancia, un par de noches previas a la Caravana, desde San Francisco, California, donde recibió el premio de DH Global Exchange.
Usted ha planteado que este no es un 'Movimiento de Movimientos'
Crearlo es dispersar la sustancia y generar un grupo de poder directivo que no va con mi temperamento, ni con el de la gente que estamos en el corazón del movimiento. La urgencia es crear un suelo, por eso hemos pedido los 6 puntos del pacto, hay que sumarnos a ellos con las agendas particulares de los estados.
Necesitamos unirnos y generar procesos de presión, lograr voces para crear ese suelo que el País que necesita y llegar a las elecciones con una posibilidad de que esto no termine en un Estado militar o en un desastre, sino en un rescate democrático del País.
¿Como próximo horizonte el 2012?
Se trata de abrir un horizonte que verdaderamente rescate a la democracia del País. La reforma política está detenida en el Congreso. Es fundamental que pase con los agregados que pedimos en el pacto: voto blanco, abolición del fuero, revocación del mandato, plebiscito, candidatos ciudadanos. Con esos elementos inmediatos podemos construir un mejor escenario para el País.
Es el gran reto, la unidad ciudadana.
Sí, es fundamental. Ya sabemos lo que pasa en estos diálogos (con el Gobierno) se comprometen y a la mera hora traicionan, faltan a la palabra. Es muy importante la unidad ciudadana porque si vuelven a eso, podemos presionar.
Por eso a los ciudadanos les decimos que no dejen el proceso. Sin ellos las demandas al Gobierno no van a poder ser. Necesitamos entenderlo para que lo entienda la clase política: la soberanía radica en nosotros y somos nosotros quienes podemos conducir y exigir que los procesos vayan en la línea y dirección de servicio a los ciudadanos y no a las instituciones.
Sortear golpeteos
El camino a Juárez es mucho más que 2 mil kilómetros de distancia y discusiones entre organismos civiles que superan diferencias para la refundación del País. Es un camino que desde el 8 de mayo ha sorteado golpeteos externos. Desde comentarios en las redes sociales que acusan al poeta de exprimir beneficios de la muerte de su hijo, hasta los señalamientos de "politización" del movimiento. En el lapso, un par de cartas apócrifas a nombre del poeta en las que se le dice al alcalde juarense "no lo queremos cerca".
¿De dónde vienen esos golpeteos?
De grupos que tienen intereses políticos, que no son los intereses ciudadanos, sino de poder, de partido, que no vieron con buenos ojos el movimiento porque implica una reforma que rompe sus conveniencias.
Sicilia, sin mencionar remitentes, refiere que parten de la incomprensión, perturbación y una "vileza inmensa" de usar a las víctimas y su dolor para desprestigiar el proceso. Convencido, afirma que pese a ello el corazón del movimiento permanece limpio. "Preocupado porque la nación no se nos pierda", apunta.
La refundación de este País implica un proceso largo. ¿Nos tocará verlo?
Costará muchas generaciones. Ojalá podamos ver un poco de luz, de suelo, que las instituciones empiezan a limpiarse, a purificarse. Tengo esperanzas. Es evidente, quizá no lo veamos, pero ojalá y nuestros hijos, nietos, puedan vivir en el México con el cual soñamos y llevamos en el corazón y el cual estas movilizaciones son su rostro más claro.
Hartos porque la violencia transformó sus vidas y curtidos en luchas por el derecho a la vivienda, educación, medio ambiente, trabajo, ciudadanos tejen el cobijo a la Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad.
Los indígenas de Cherán, que perdieron sus bosques en manos del crimen organizado y maestros de la sección 28 de la CNTE saludarán a la caravana en Morelia; en San Luis Potosí, la recepción estará encabezada por ambientalistas y Concepción Calvillo de Nava, viuda del doctor Salvador Nava.
En Zacatecas, ciudadanos novatos en la organización civil, hartos de encerrarse en casa a las 9 de la noche por la violencia. En Durango, el Consejo Coordinador Obrero Popular que nació en la lucha por la vivienda y jóvenes músicos de rock y punk; en Torreón, los Laguneros por la Paz que surgieron hace tres años en la lucha por el agua y ahora, inspirados en Gandhi, buscan seguridad ciudadana.
"Nos unimos por una paz duradera. Los muertos son nuestros, las balas rompen nuestro vínculo con los demás. El miedo no es la salida, debemos salir, expresarnos, exigirles, explorar alternativas", planteó Víctor Cabrera, miembro de Laguneros por la Paz.
En Saltillo, el Obispo Raúl Vera encabezará el recibimiento, pero la palabra la tomarán los migrantes, familias de desaparecidos y de los mineros de Pasta de Conchos; en Monterrey y Chihuahua, maestros y familiares de asesinados darán la bienvenida. Finalmente, en Ciudad Juárez, la Caravana será acogida en Villas de Salvárcar.
"Los que estamos unidos en esta caravana sabemos que lo importante es fortalecernos como sociedad, conocernos, reconocernos y debatir qué buscamos para el bien común. Después dialogar con el Gobierno", refirió Martín Faz de la organización Educación y Ciudadanía de San Luis Potosí.
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