Jorge Alejandro Medellín
1.- El Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, avanza a pasos acelerados y estratégicos hacia la candidatura de izquierda que lo lleve a contender en el 2012 por la Presidencia de la República.
Va afinando con cautela uno de los puntos vitales de lo que será su campaña electoral, a partir de una premisa vinculada con el combate al crimen organizado: preparar el regreso de los militares a sus cuarteles mediante el involucramiento de los gobiernos estatales en la lucha por recuperar espacios sociales y políticos arrebatados por los cárteles.
2.- La maniobra política de Ebrard al construir los consensos para echar a andar durante una semana el Operativo Conago 1 fue un éxito.
Este se combinó con el fracaso y el ridículo de las acciones ordenadas desde Los Pinos para intentar la destrucción política y personal de Jorge Hank Rhon.
La tormenta parece haber amainado y permite ver a un priismo que lo sigue cobijando y que, por el momento, lo ve reposicionarse y coquetear de nuevo con la posibilidad de llegar al poder estatal tras la odisea que acabó exhibiendo al Ejército y a la procuradora Marisela Morales como entes manipulables cuando los intereses superiores así lo requieren.
3.- En este contexto se dio la puesta en marcha del Conago 1, en el que participaron 310 mil policías de todo el país para cumplir con 3 mil 918 detenciones y presentaciones ante el Ministerio Público, la desintegración de 16 bandas dedicadas al robo de vehículos, negocios, joyería, así como a cometer delitos contra la salud (narcomenudeo) y de extorsión en varias ciudades del país. También se recuperaron mil 534 vehículos como parte de las acciones del Conago 1.
4.- El éxito obtenido, contrastado con la manipulación y el fiasco policiaco-militar en Tijuana, permitió a Ebrard y a su equipo avanzar rápidamente y acelerar la propuesta para que operativo se convirtiera en una acción permanente.
El acuerdo era inevitable y previsible luego de las críticas del presidente Felipe Calderón a los gobiernos estatales y municipales por su falta de coordinación y de compromiso para darle solidez a la estrategia federal contra el crimen.
5.- Desde sus diferentes ámbitos y con realidades contrastantes y al mismo tiempo similares, los gobernadores acordaron mantener la permanencia indefinida de operativo, elevándolo ahora a niveles de combate y prevención de delitos de alto impacto, es decir, delitos del orden federal.
Con ello se avanza en una doble pinza diseñada por Ebrard y su gente con base en una agenda altamente sensible y criticada por propios y extraños y en la que Calderón y la Sedena, Marina, la PGR, Gobernación y la Secretaria de Seguridad Pública Federal han fracasado ostensiblemente: el respeto a los derechos de la ciudadanía.
6.- Ese punto es trascendental, toda vez que el Conago 1, además de exitoso para sus diseñadores, se ha preciado de no haber recibido una sola queja por abusos cometidos durante su ejecución, ya sea por policías o por Ministerios Públicos u otras autoridades.
7.- Aquí es en donde Marcelo Ebrard pretende dar un toque fino a su estrategia, sin señalar o acusar y mucho menos responsabilizar abierta y directamente a las fuerzas armadas del fracaso de la lucha anticrimen, sino abriendo un segundo y hasta un tercer escenario para crear las condiciones que lleven a los militares de regreso a los cuarteles en los primeros dos años de su hipotético mandato.
Su punto de vista es el de un civil, pero la eficaz asesoría de Marcela Gómez Zalce, vinculada estrechamente con militares del Estado Mayor Presidencial y con núcleos de oficiales jóvenes de la Sedena, ha servido para que Ebrard Casaubón tenga un panorama más amplio y certero sobre las inquietudes de la milicia en materia de seguridad y sobre todo en lo tocante al desgaste y desprestigio en que los ha sumido la forma en que va dándose la lucha antidrogas.
8.- El retiro gradual de militares y navales como puntas de lanza para combatir a los cárteles es impostergable y debe darse a la mayor brevedad, le han señalado a Ebrard los enlaces consultados en las últimas semanas por Gómez Zalce.
Incluso el propio titular de la Sedena ya ha advertido en las pasadas semanas, que es el momento para comenzar a organizar el regreso de las tropas a sus cuarteles, no sin antes aprobar la Ley de Seguridad Nacional para que los militares actúen nuevamente pero blindados jurídicamente, para evitar la acción de fantasmales fiscalías del pasado.
CENTINELA.-
Mientras la prensa nacional e internacional se deshacía en especulaciones sobre la presunta muerte de Heriberto Lazcano, el líder de los Zetas (junto con Migue Treviño en Tamaulipas y 18 estados del país) en un combate contra sicarios del cartel del Golfo, el secretario de la Defensa Nacional, el General Guillermo Galván, encabezaba en el Heroico Colegio Militar una cena para Oficiales, Jefes y Mandos -rigurosamente acompañados por sus esposas- en la que el DN-1 se mantenía informado pero tranquilo sobre las versiones surgidas en el explosivo estado norteño.
La cena, en la que Galván estuvo acompañado muy de cerca por el General Rafael Macedo de la Concha, fue para comunicarles el inicio de la recaudación voluntaria de fondos para la construcción de una escuela Preparatoria al interior del Campo Militar 1-A.
La cena comenzó alrededor de las siete de la noche y terminó cerca de las dos de la mañana. Galván permaneció en el Casino Militar hasta que el convivio terminó.
Cada pareja pagó 3,500 pesos como contribución y quienes no pudieron asistir por encontrarse en misiones o en otras actividades, aportarán mil pesos para la construcción de la escuela, que será sólo para hijos de militares.
1.- El Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, avanza a pasos acelerados y estratégicos hacia la candidatura de izquierda que lo lleve a contender en el 2012 por la Presidencia de la República.
Va afinando con cautela uno de los puntos vitales de lo que será su campaña electoral, a partir de una premisa vinculada con el combate al crimen organizado: preparar el regreso de los militares a sus cuarteles mediante el involucramiento de los gobiernos estatales en la lucha por recuperar espacios sociales y políticos arrebatados por los cárteles.
2.- La maniobra política de Ebrard al construir los consensos para echar a andar durante una semana el Operativo Conago 1 fue un éxito.
Este se combinó con el fracaso y el ridículo de las acciones ordenadas desde Los Pinos para intentar la destrucción política y personal de Jorge Hank Rhon.
La tormenta parece haber amainado y permite ver a un priismo que lo sigue cobijando y que, por el momento, lo ve reposicionarse y coquetear de nuevo con la posibilidad de llegar al poder estatal tras la odisea que acabó exhibiendo al Ejército y a la procuradora Marisela Morales como entes manipulables cuando los intereses superiores así lo requieren.
3.- En este contexto se dio la puesta en marcha del Conago 1, en el que participaron 310 mil policías de todo el país para cumplir con 3 mil 918 detenciones y presentaciones ante el Ministerio Público, la desintegración de 16 bandas dedicadas al robo de vehículos, negocios, joyería, así como a cometer delitos contra la salud (narcomenudeo) y de extorsión en varias ciudades del país. También se recuperaron mil 534 vehículos como parte de las acciones del Conago 1.
4.- El éxito obtenido, contrastado con la manipulación y el fiasco policiaco-militar en Tijuana, permitió a Ebrard y a su equipo avanzar rápidamente y acelerar la propuesta para que operativo se convirtiera en una acción permanente.
El acuerdo era inevitable y previsible luego de las críticas del presidente Felipe Calderón a los gobiernos estatales y municipales por su falta de coordinación y de compromiso para darle solidez a la estrategia federal contra el crimen.
5.- Desde sus diferentes ámbitos y con realidades contrastantes y al mismo tiempo similares, los gobernadores acordaron mantener la permanencia indefinida de operativo, elevándolo ahora a niveles de combate y prevención de delitos de alto impacto, es decir, delitos del orden federal.
Con ello se avanza en una doble pinza diseñada por Ebrard y su gente con base en una agenda altamente sensible y criticada por propios y extraños y en la que Calderón y la Sedena, Marina, la PGR, Gobernación y la Secretaria de Seguridad Pública Federal han fracasado ostensiblemente: el respeto a los derechos de la ciudadanía.
6.- Ese punto es trascendental, toda vez que el Conago 1, además de exitoso para sus diseñadores, se ha preciado de no haber recibido una sola queja por abusos cometidos durante su ejecución, ya sea por policías o por Ministerios Públicos u otras autoridades.
7.- Aquí es en donde Marcelo Ebrard pretende dar un toque fino a su estrategia, sin señalar o acusar y mucho menos responsabilizar abierta y directamente a las fuerzas armadas del fracaso de la lucha anticrimen, sino abriendo un segundo y hasta un tercer escenario para crear las condiciones que lleven a los militares de regreso a los cuarteles en los primeros dos años de su hipotético mandato.
Su punto de vista es el de un civil, pero la eficaz asesoría de Marcela Gómez Zalce, vinculada estrechamente con militares del Estado Mayor Presidencial y con núcleos de oficiales jóvenes de la Sedena, ha servido para que Ebrard Casaubón tenga un panorama más amplio y certero sobre las inquietudes de la milicia en materia de seguridad y sobre todo en lo tocante al desgaste y desprestigio en que los ha sumido la forma en que va dándose la lucha antidrogas.
8.- El retiro gradual de militares y navales como puntas de lanza para combatir a los cárteles es impostergable y debe darse a la mayor brevedad, le han señalado a Ebrard los enlaces consultados en las últimas semanas por Gómez Zalce.
Incluso el propio titular de la Sedena ya ha advertido en las pasadas semanas, que es el momento para comenzar a organizar el regreso de las tropas a sus cuarteles, no sin antes aprobar la Ley de Seguridad Nacional para que los militares actúen nuevamente pero blindados jurídicamente, para evitar la acción de fantasmales fiscalías del pasado.
CENTINELA.-
Mientras la prensa nacional e internacional se deshacía en especulaciones sobre la presunta muerte de Heriberto Lazcano, el líder de los Zetas (junto con Migue Treviño en Tamaulipas y 18 estados del país) en un combate contra sicarios del cartel del Golfo, el secretario de la Defensa Nacional, el General Guillermo Galván, encabezaba en el Heroico Colegio Militar una cena para Oficiales, Jefes y Mandos -rigurosamente acompañados por sus esposas- en la que el DN-1 se mantenía informado pero tranquilo sobre las versiones surgidas en el explosivo estado norteño.
La cena, en la que Galván estuvo acompañado muy de cerca por el General Rafael Macedo de la Concha, fue para comunicarles el inicio de la recaudación voluntaria de fondos para la construcción de una escuela Preparatoria al interior del Campo Militar 1-A.
La cena comenzó alrededor de las siete de la noche y terminó cerca de las dos de la mañana. Galván permaneció en el Casino Militar hasta que el convivio terminó.
Cada pareja pagó 3,500 pesos como contribución y quienes no pudieron asistir por encontrarse en misiones o en otras actividades, aportarán mil pesos para la construcción de la escuela, que será sólo para hijos de militares.
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