El titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público se reúne con más de 400 panistas en San Luis Potosí
Eduardo Delgado Especial / El Pulso
El secretario de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero Arroyo, se reunió ayer con unos 400 panistas potosinos, ante quienes manifestó: “Yo quiero ser Presidente de México con toda mi alma”. Al acto acudieron el ex gobernador Marcelo de los Santos Fraga, delegados federales, alcaldes, diputados locales y federales.
En evento masivo celebrado en el salón de fiestas Villa Real, los panistas aplaudieron y vitorearon cuando fue presentado: “¡Cordero, amigo, San Luis está contigo!”, gritaron tres veces. Lo que se repitió cuando externó su aspiración acerca de su deseo de ser el siguiente mandatario nacional.
En la mesa principal fue flanqueado, a la derecha, por el senador Alejandro Zapata Perogordo y, a la izquierda, por el dirigente estatal de Acción Nacional, Marco Antonio Gama Basarte, junto a quien se sentó el ex gobernador Marcelo de los Santos Fraga.
Ernesto Cordero dijo estar contento porque “de una semana acá mi vida ha dado una transformación radical”, luego de que un grupo de “panistas distinguidos me honraron con la consideración de manifestar públicamente que consideraban que yo podía ser el abanderado del PAN a la Presidencia de la República en el año 2012”.
De lo que había platicado con sus amigos pero estos no le dijeron cómo ni cuándo.
Comentó que él estaba fuera de México, que antes de abordar el avión de regreso se enteró y que durante el trayecto reflexionó sobre la posibilidad.
Dijo haber recordado su infancia y provenir de una familia “clase mediera en la que nunca me faltó nada, pero nos costó mucho trabajo construir nuestro patrimonio”. Comentó que su padre es doctor y su mamá enfermera en el IMSS y en el ISSSTE, respectivamente.
Repasó la nacionalización de la banca en 1982 y la crisis económica de 1986 en el sexenio de Miguel de la Madrid, lo que le dificultó el pago de su casa a su padre. Luego recordó su experiencia académica, cómo ingreso al PAN y cómo conoció a Felipe Calderón.
Expuso enseguida que a su arribo ayer en el aeropuerto se encontró al líder nacional del PRI, Humberto Moreira, y sostuvo que para los priístas “el tiempo no ha pasado, porque lo fueron a recibir con tambora”.
Advirtió que de retomar la Presidencia de México los priistas revertirían lo avanzado durante los últimos diez años, porque ejercerían el poder de manera unilateral y dictatorial.
En esa tesitura expresó su deseo de llegar a ser el tercer panista al frente del país: “Quiero ser Presidente de México con toda mi alma”, enfatizó al tiempo que vino la primera de varias interrupciones motivadas por aplausos y ovaciones de los asistentes.
Aseveró que no se piensa “echar para atrás” en sus aspiración: “voy a luchar, yo creo que tengo con qué, pero sí necesito que me ayuden, que me arropen, que me impulsen, que me quieran, que me echen para adelante y que vayan conmigo”, les pidió.
Admitió que “el camino no va a ser fácil ni sencillo”, que en esa travesía es indispensable la unidad de los panistas y “cometer cero errores”, dijo casi al finalizar. Antes y después del mensaje pasó a cada mesa a saludar y fotografiarse con panistas.
En entrevista, Cordero Arroyo descartó su renuncia a esa dependencia federal y anunció, que con recursos propios, cada fin de semana se reunirá con panistas en todo el país, porque dijo saber “perfectamente” la diferencia entre ser servidor público y aspirante a la candidatura presidencial. “No me confundo: en horario de oficina y laboral soy secretario de Hacienda”, precisó.
Interrogado sobre la dificultad que enfrentará en la contienda interna en la que panistas elegirán a su candidato presidencial, admitió que “no va a ser sencillo, pero para el Partido Acción Nacional nada ha sido sencillo y siempre hemos remontado y siempre hemos ganado: bueno no siempre”, corrigió.
A los blanquiazules, juzgó, “nos asiste la razón de lo que hemos hecho bien en estos diez años de gobierno, y hay que defenderlo, luchar y comunicarlo a la gente: México es distinto hoy que en el año 2000”, añadió.
Cuando le preguntaron de si se considera el “gallo” del presidente Felipe Calderón, respondió: “Yo soy un militante del PAN y soy uno de varios militantes que han manifestado sus aspiraciones para el año 2012.”
Eduardo Delgado Especial / El Pulso
El secretario de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero Arroyo, se reunió ayer con unos 400 panistas potosinos, ante quienes manifestó: “Yo quiero ser Presidente de México con toda mi alma”. Al acto acudieron el ex gobernador Marcelo de los Santos Fraga, delegados federales, alcaldes, diputados locales y federales.
En evento masivo celebrado en el salón de fiestas Villa Real, los panistas aplaudieron y vitorearon cuando fue presentado: “¡Cordero, amigo, San Luis está contigo!”, gritaron tres veces. Lo que se repitió cuando externó su aspiración acerca de su deseo de ser el siguiente mandatario nacional.
En la mesa principal fue flanqueado, a la derecha, por el senador Alejandro Zapata Perogordo y, a la izquierda, por el dirigente estatal de Acción Nacional, Marco Antonio Gama Basarte, junto a quien se sentó el ex gobernador Marcelo de los Santos Fraga.
Ernesto Cordero dijo estar contento porque “de una semana acá mi vida ha dado una transformación radical”, luego de que un grupo de “panistas distinguidos me honraron con la consideración de manifestar públicamente que consideraban que yo podía ser el abanderado del PAN a la Presidencia de la República en el año 2012”.
De lo que había platicado con sus amigos pero estos no le dijeron cómo ni cuándo.
Comentó que él estaba fuera de México, que antes de abordar el avión de regreso se enteró y que durante el trayecto reflexionó sobre la posibilidad.
Dijo haber recordado su infancia y provenir de una familia “clase mediera en la que nunca me faltó nada, pero nos costó mucho trabajo construir nuestro patrimonio”. Comentó que su padre es doctor y su mamá enfermera en el IMSS y en el ISSSTE, respectivamente.
Repasó la nacionalización de la banca en 1982 y la crisis económica de 1986 en el sexenio de Miguel de la Madrid, lo que le dificultó el pago de su casa a su padre. Luego recordó su experiencia académica, cómo ingreso al PAN y cómo conoció a Felipe Calderón.
Expuso enseguida que a su arribo ayer en el aeropuerto se encontró al líder nacional del PRI, Humberto Moreira, y sostuvo que para los priístas “el tiempo no ha pasado, porque lo fueron a recibir con tambora”.
Advirtió que de retomar la Presidencia de México los priistas revertirían lo avanzado durante los últimos diez años, porque ejercerían el poder de manera unilateral y dictatorial.
En esa tesitura expresó su deseo de llegar a ser el tercer panista al frente del país: “Quiero ser Presidente de México con toda mi alma”, enfatizó al tiempo que vino la primera de varias interrupciones motivadas por aplausos y ovaciones de los asistentes.
Aseveró que no se piensa “echar para atrás” en sus aspiración: “voy a luchar, yo creo que tengo con qué, pero sí necesito que me ayuden, que me arropen, que me impulsen, que me quieran, que me echen para adelante y que vayan conmigo”, les pidió.
Admitió que “el camino no va a ser fácil ni sencillo”, que en esa travesía es indispensable la unidad de los panistas y “cometer cero errores”, dijo casi al finalizar. Antes y después del mensaje pasó a cada mesa a saludar y fotografiarse con panistas.
En entrevista, Cordero Arroyo descartó su renuncia a esa dependencia federal y anunció, que con recursos propios, cada fin de semana se reunirá con panistas en todo el país, porque dijo saber “perfectamente” la diferencia entre ser servidor público y aspirante a la candidatura presidencial. “No me confundo: en horario de oficina y laboral soy secretario de Hacienda”, precisó.
Interrogado sobre la dificultad que enfrentará en la contienda interna en la que panistas elegirán a su candidato presidencial, admitió que “no va a ser sencillo, pero para el Partido Acción Nacional nada ha sido sencillo y siempre hemos remontado y siempre hemos ganado: bueno no siempre”, corrigió.
A los blanquiazules, juzgó, “nos asiste la razón de lo que hemos hecho bien en estos diez años de gobierno, y hay que defenderlo, luchar y comunicarlo a la gente: México es distinto hoy que en el año 2000”, añadió.
Cuando le preguntaron de si se considera el “gallo” del presidente Felipe Calderón, respondió: “Yo soy un militante del PAN y soy uno de varios militantes que han manifestado sus aspiraciones para el año 2012.”
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