Ana Luisa García especial para RMX
Hay cuestiones más apremiantes en el tema de la Reforma política, que la reelección de diputados, senadores y alcaldes. Uno de los puntos urgentes es crear los candados necesarios para impedir que los Presidentes de la República, Gobernadores y alcaldes hereden sus puestos a sus respectivas esposas, hermanos o consanguíneos directos, tenemos el caso de Argentina, donde Nestor Kirchner (+) heredó a su consorte (y con suerte) Cristina Fernández.
En el 2006 en México pudo haber asumido el poder Marthita Sahagún de Fox, porque no había manera de impedirlo; no ocurrió porque su esposo Vicente en tres minutos de serenidad (raros en él) decidió que era mejor retirarse a descansar a su rancho de San Cristóbal.
Ahora ni más ni menos, Rubén Moreira Valdez se convertirá en Coahuila, sucesor de su hermano, no es sucesión inmediata porque hay un gobernador interino de por medio, pero Constitucionalmente será elegido en comicios inmediatos al del actual dirigente nacional del PRI, Humberto de los mismos apellidos. Cosa que debiera de ser prohibitivo, pero cuando no existe pudor político, como es el caso, el acto de excesivo poder, se consuma.
2.- En cuanto a la reelección de los señores diputados y senadores, es un acto innecesario y hasta frívolo, porque la historia legislativa de México está llena de ejemplos de hombres y mujeres que han hecho carrera en los Congresos Estatales y de la Unión y eso no es malo, han sido ratificados en las urnas seguramente porque han dado resultados.
Hay quienes consignan hasta 30 (treinta) años de tareas legislativas, uno de ellos fue el líder cetemista de origen poblano Blas Chumacero Sánchez; con una carrera similar Hilda Josefina Amalia Anderson Nevárez y si quiere un ejemplo más reciente, anote Usted a Fidel Herrera Beltrán, cuatro veces diputado local, dos veces senador antes de ser Gobernador de Veracruz, es decir se pasó 24 años saltando de una Cámara a otra.
En Tamaulipas tenemos a Laura Alicia Garza Galindo, dos veces senadora y dos veces diputada federal (15 años, una senaduría fue de tres años) y al Dr. Felipe Garza Narváez, tres veces diputado local (9 años) y Lidya Madero García (nueve años) aunque siempre por la vía plurinominal, lleva una senaduría y una diputación federal. Ninguno de ellos requirió la reelección inmediata.
3.- Por otra parte, hay que anotar que en el sexenio del Presidente Gustavo Díaz Ordaz, fue aprobada la reelección de los diputados federales, misma a la que se opuso Carlos Alberto Madrazo Becerra desde su posición de líder nacional del PRI y que se echó abajo, poco después moriría en un accidente que en su momento se tomó como un ajuste de cuentas del sistema político imperante, pero esa ya es otra historia.
Lo que resulta importante es hacer resaltar que el desarrollo democrático de nuestro país fue impulsado por la NO reelección y el sistema de partidos, ambos pareciera que se intentan aniquilar en esta Deforma (que no Reforma) política, al querer aprobar la reelección y las candidaturas ciudadanas.
Si ya de por si es arriesgado el instalar en el poder, del nivel que Usted quiera, a gentes que son en apariencia honestos y que tienen el freno, muy relativo, de proceder de un instituto político que debiera jalarle la rienda cuando tuerce su camino. ¿Imagínese?, con un ciudadano desconocido, vinculado ¿a quien sabe que intereses?
La política se hace con dinero y quienes lo poseen serán los dueños del poder y las candidaturas ciudadanas pasarán a ser subordinadas de las entidades con fortaleza financiera, desde sindicatos, consorcios empresariales, hasta los innombrables.
Esa es la realidad nacional que nos quiere construir esta horneada de legisladores.
Hay cuestiones más apremiantes en el tema de la Reforma política, que la reelección de diputados, senadores y alcaldes. Uno de los puntos urgentes es crear los candados necesarios para impedir que los Presidentes de la República, Gobernadores y alcaldes hereden sus puestos a sus respectivas esposas, hermanos o consanguíneos directos, tenemos el caso de Argentina, donde Nestor Kirchner (+) heredó a su consorte (y con suerte) Cristina Fernández.
En el 2006 en México pudo haber asumido el poder Marthita Sahagún de Fox, porque no había manera de impedirlo; no ocurrió porque su esposo Vicente en tres minutos de serenidad (raros en él) decidió que era mejor retirarse a descansar a su rancho de San Cristóbal.
Ahora ni más ni menos, Rubén Moreira Valdez se convertirá en Coahuila, sucesor de su hermano, no es sucesión inmediata porque hay un gobernador interino de por medio, pero Constitucionalmente será elegido en comicios inmediatos al del actual dirigente nacional del PRI, Humberto de los mismos apellidos. Cosa que debiera de ser prohibitivo, pero cuando no existe pudor político, como es el caso, el acto de excesivo poder, se consuma.
2.- En cuanto a la reelección de los señores diputados y senadores, es un acto innecesario y hasta frívolo, porque la historia legislativa de México está llena de ejemplos de hombres y mujeres que han hecho carrera en los Congresos Estatales y de la Unión y eso no es malo, han sido ratificados en las urnas seguramente porque han dado resultados.
Hay quienes consignan hasta 30 (treinta) años de tareas legislativas, uno de ellos fue el líder cetemista de origen poblano Blas Chumacero Sánchez; con una carrera similar Hilda Josefina Amalia Anderson Nevárez y si quiere un ejemplo más reciente, anote Usted a Fidel Herrera Beltrán, cuatro veces diputado local, dos veces senador antes de ser Gobernador de Veracruz, es decir se pasó 24 años saltando de una Cámara a otra.
En Tamaulipas tenemos a Laura Alicia Garza Galindo, dos veces senadora y dos veces diputada federal (15 años, una senaduría fue de tres años) y al Dr. Felipe Garza Narváez, tres veces diputado local (9 años) y Lidya Madero García (nueve años) aunque siempre por la vía plurinominal, lleva una senaduría y una diputación federal. Ninguno de ellos requirió la reelección inmediata.
3.- Por otra parte, hay que anotar que en el sexenio del Presidente Gustavo Díaz Ordaz, fue aprobada la reelección de los diputados federales, misma a la que se opuso Carlos Alberto Madrazo Becerra desde su posición de líder nacional del PRI y que se echó abajo, poco después moriría en un accidente que en su momento se tomó como un ajuste de cuentas del sistema político imperante, pero esa ya es otra historia.
Lo que resulta importante es hacer resaltar que el desarrollo democrático de nuestro país fue impulsado por la NO reelección y el sistema de partidos, ambos pareciera que se intentan aniquilar en esta Deforma (que no Reforma) política, al querer aprobar la reelección y las candidaturas ciudadanas.
Si ya de por si es arriesgado el instalar en el poder, del nivel que Usted quiera, a gentes que son en apariencia honestos y que tienen el freno, muy relativo, de proceder de un instituto político que debiera jalarle la rienda cuando tuerce su camino. ¿Imagínese?, con un ciudadano desconocido, vinculado ¿a quien sabe que intereses?
La política se hace con dinero y quienes lo poseen serán los dueños del poder y las candidaturas ciudadanas pasarán a ser subordinadas de las entidades con fortaleza financiera, desde sindicatos, consorcios empresariales, hasta los innombrables.
Esa es la realidad nacional que nos quiere construir esta horneada de legisladores.
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