sábado, abril 09, 2011

Reunión secreta

Francisco Garfias

Fue una reunión en corto. Hace “muy poco tiempo”. Alejados de los reflectores. El presidente Calderón convocó a coordinadores en el Senado para manifestarles “su interés” en que se concrete la Reforma Política. Al cónclave no asistió el PRD, puntualizo una fuente parlamentaria, sin dar más detalles.

Este “interés” del primer mandatario ya rindió sus frutos. El dictamen de la importante reforma será discutido por el pleno de la Cámara alta, a más tardar el próximo jueves, afirma, por separado, el senador panista José González Morfín, presidente de la Junta de Coordinación Política. “Tenemos que forzar los tiempos”, puntualiza.

Los puntos de la reforma política en los que hay un consenso mayoritario son: reelección de diputados, iniciativa preferente, referendum, ratificación de los integrantes de los órganos regulatorios (Cofetel, Cofeco Comisión Reguladora de Energía) por le Senado, y las candidaturas ciudadanas.

Otro punto en el que hay coincidencia es en el qué hacer en caso de falta absoluta del presidente de la República. Por increíble que parezca, las leyes no dicen quien hereda el mando, mientras se reúne el Congreso de la Unión para resolver la sucesión.

Un incomprensible lapsus del legislador. “Hay un vacío constitucional que puede poner al país en situación difícil”, advierte González Morfín.

En lo que no hay acuerdo es en una segunda vuelta en la elección presidencial. Eso otorgaría al Ejecutivo una mayoría legislativa para hacer pasar sus reformas en el Congreso. Un remedio contra la parálisis.

Pero no la quiere el PRI. No le conviene. En una segunda vuelta podría presentarse una alianza “de facto” en su contra. Sin el tricolor imposible. Son segunda fuerza en el Senado y primera en la Cámara de Diputados.

Tampoco hay acuerdo en la ratificación del gabinete, que con tanta vehemencia demanda Beltrones. Las reformas entrarían en vigor hasta el 2015.

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Está cantado. El Consejo Nacional del PRD hará oficial hoy la candidatura de Alejandro Encinas al gobierno el Estado de México, Los aliancistas no alcanzan la mayoría calificada que se requiere (dos tercios de la asamblea) para obligar a la coalición con el PAN.

Está previsto que los consejeros identificados con Marcelo Ebrard se abstengan.
Encinas será candidato, a pesar de que no cumple con los requisitos de residencia, y de que al Consejo Estatal del PRD, celebrado la noche del viernes, le faltaron unas décimas para la mayoría calificada.

Los Chuchos y sus aliados de ADN enfrentan el peor de los escenarios. No tienen siquiera un candidato competitivo.

Fernando Belaunzarán, de Nueva Izquierda, reconoce que la mayoría calificada “es imposible”. Pero no se rinde. El ex ceuista reveló que los aliancistas buscan vericuetos legales para hacer valer el “si” que se registró en la consulta ciudadana en el Estado de México.

“El Consejo Nacional fue el que convocó la consulta. Esta puede ser vinculatoria”, subraya Belaunzarán. Pero son patadas de ahogado. El mismo destaca que si finalmente es Encinas –y sí será– “hay que cerrar filas con él”.

En el obradorista G-8 saben que ya tienen amarrada la candidatura para Alejandro. Son minoritarios en la estructura, pero suficientes para impedir la alianza con la derecha.

Dolores Padierna, David Cervantes, Gilberto Ensástiga, Saúl Escobar, Carlos Sotelo, Higinio Martínez, Camilo Valenzuela, Horacio Duarte y Mario Saucedo, hicieron un público llamado a todos los consejeros para que voten el candidato de Andrés.

“La mejor fórmula electoral que podemos ofrecerle a nuestro candidato es la de izquierdas unidas, para de una vez por todas diferenciarnos de los proyectos iguales que encabezan el PRI y el PAN”, dice el comunicado del G-8.

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A todo pasado nos enteramos que la procuradora Marisela Morales la pasó mal en la reunión, previa a su ratificación, que sostuvo con los senadores del PAN. César Leal, el senador azul que más se ha recurrido hacia la izquierda, llegó incluso a ser rudo con la ahora titular de la PGR.

Testigos aseguran que el hombre abandonó el auditorio donde se realizaba el cónclave, en medio de reproches a Marisela por su estilo burócrata, y por no proyectar su visión de lo que debe ser la procuración de justicia en el país.

Otro que se opuso internamente, sin éxito, a la ratificación, fue el senador del PRI, Fernando Baeza. “No la quería dejar pasar. No sé que tanto agredió a su sobrino, el ex gobernador José Reyes Baeza, cuando ella fue titular de la Siedo”, nos dijo un integrante de la bancada tricolor.

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Moraleja de la semana (y de muchas otras): ya estamos hasta la madre.

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