IGABE
El conflicto inter étnico entre los grupos existentes en la zona triqui, se ha agudizado tras la muerte de Anastasio Juárez Hernández, agente municipal de San Juan Copala, perteneciente al municipio de Santiago Juxtlahuaca, ocurrida el jueves 29 de julio aproximadamente a las 21:00 horas en su domicilio ubicado a un costado de la agencia municipal de esta población.
Rufino Juárez Hernández, dirigente de la Unidad de Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort) y hermano del occiso, señaló que esto es muestra de la violencia que existe en San Juan Copala, “mismo que se suma a la lista de triquis asesinados por parte del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI), mismo que se quedará en la impunidad como los anteriores”.
Aseveró que la Ubisort siempre ha estado en la vía del diálogo y que este asesinato no va a impedir o fracturar los posibles diálogos que se tengan que realizar para acabar con el conflicto ancestral en esta región de la Mixteca.
Manifestó que esto es muestra da la impunidad que tiene el MULTI con grupos políticos y organizaciones sociales, que pretenden obstaculizar el conflicto en lugar de solucionarlo, “ya que las caravanas humanitarias no son la solución para resolver el problema triqui”.
Recuento activista
Mientras tanto el Centro Regional de Derechos Humanos “Bartolomé Carrasco Briseño”, señaló que en el municipio autónomo de San Juan Cópala, la violencia ha incrementado, además de que a tres meses de la emboscada a la primera caravana humanitaria donde fueron asesinados Bety Cariño y el finlandés Jiry Jaakolla, a dos meses del asesinato de Timoteo Ramírez y Cleriberta Castro, los ataques de la Ubisort han incrementado al municipio autónomo".
Mencionó que prueba de ello es la balacera que se presento el 24 de junio, que dejo como resultado que la niña Miriam Martínez Flores de 8 años de edad, fuera víctima de los paramilitares que le hirieron la pierna izquierda y que a la fecha se sigue recuperando en San Juan Cópala, con plantas medicinales por no existir las condiciones para que salga de esta comunidad.
Además de que el 26 de junio un nuevo ataque dejó a Marcelina de Jesús López con herida en el hombro izquierdo y Celestina Cruz Ramírez, de 26 años de edad, con tres impactos de bala en el hombro izquierdo, quienes salieron de la población de madrugada para recibir atención médica, además de que denunciaron los hechos ante las instancias correspondientes y el riesgo latente en la zona triqui.
Por último el centro defensor, dijo que el 26 de julio otra balacera dejó como resultado la desaparición de María Rosa Francisco de 35 años de edad, donde a la fecha se desconoce su paradero y no se descarta la posibilidad de que esté muerta por el ataque sufrido por más de 2 horas por la Ubisort.
El conflicto inter étnico entre los grupos existentes en la zona triqui, se ha agudizado tras la muerte de Anastasio Juárez Hernández, agente municipal de San Juan Copala, perteneciente al municipio de Santiago Juxtlahuaca, ocurrida el jueves 29 de julio aproximadamente a las 21:00 horas en su domicilio ubicado a un costado de la agencia municipal de esta población.
Rufino Juárez Hernández, dirigente de la Unidad de Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort) y hermano del occiso, señaló que esto es muestra de la violencia que existe en San Juan Copala, “mismo que se suma a la lista de triquis asesinados por parte del Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI), mismo que se quedará en la impunidad como los anteriores”.
Aseveró que la Ubisort siempre ha estado en la vía del diálogo y que este asesinato no va a impedir o fracturar los posibles diálogos que se tengan que realizar para acabar con el conflicto ancestral en esta región de la Mixteca.
Manifestó que esto es muestra da la impunidad que tiene el MULTI con grupos políticos y organizaciones sociales, que pretenden obstaculizar el conflicto en lugar de solucionarlo, “ya que las caravanas humanitarias no son la solución para resolver el problema triqui”.
Recuento activista
Mientras tanto el Centro Regional de Derechos Humanos “Bartolomé Carrasco Briseño”, señaló que en el municipio autónomo de San Juan Cópala, la violencia ha incrementado, además de que a tres meses de la emboscada a la primera caravana humanitaria donde fueron asesinados Bety Cariño y el finlandés Jiry Jaakolla, a dos meses del asesinato de Timoteo Ramírez y Cleriberta Castro, los ataques de la Ubisort han incrementado al municipio autónomo".
Mencionó que prueba de ello es la balacera que se presento el 24 de junio, que dejo como resultado que la niña Miriam Martínez Flores de 8 años de edad, fuera víctima de los paramilitares que le hirieron la pierna izquierda y que a la fecha se sigue recuperando en San Juan Cópala, con plantas medicinales por no existir las condiciones para que salga de esta comunidad.
Además de que el 26 de junio un nuevo ataque dejó a Marcelina de Jesús López con herida en el hombro izquierdo y Celestina Cruz Ramírez, de 26 años de edad, con tres impactos de bala en el hombro izquierdo, quienes salieron de la población de madrugada para recibir atención médica, además de que denunciaron los hechos ante las instancias correspondientes y el riesgo latente en la zona triqui.
Por último el centro defensor, dijo que el 26 de julio otra balacera dejó como resultado la desaparición de María Rosa Francisco de 35 años de edad, donde a la fecha se desconoce su paradero y no se descarta la posibilidad de que esté muerta por el ataque sufrido por más de 2 horas por la Ubisort.
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