Teodoro Rentería Arróyave
El boletín numero dos del grupo que se hace llamar desaparizadores@yahoo.com, la foto y la carta de Diego Fernández de Cevallos, el connotado panista, ha provocado una serie de reacciones en la opinión publica nacional que van desde el impacto mediático hasta la incredulidad.
En efecto, la carta dirigida a su hijo Diego, es dramática en toda su esencia, puesto que en la misma el político pide actuar con rapidez porque esta en juego su propia vida.
Es mas, le dice que cualquier actitud por querer argumentar pobreza de la familia sería totalmente contraproducente.
Fija las reglas del juego, en el sentido de que entre de inmediato en las negociaciones para su liberación al explicarle que los secuestradores tiene todo el tiempo del mundo pero a él se le agota minuto a minuto la paciencia pues esta viviendo un verdadero infierno.
Esta es la parte dramática, como ya dijimos, que se explica en la misma misiva familiar pero, y aquí el pero si vale, es que deben de tomarse en cuenta otros análisis que hacen saber que todo esto es una faramalla mediática con propósitos de carácter político.
De comprobarse lo anterior y si de repente apareciera el Jefe Diego, diríamos que se trataría de proyecciones perversas por parte de un grupo que quiere preservarse en el poder y que necesitaba urgentemente de una víctima.
Una víctima mediática para estas perversas intenciones mediáticas, que desde luego a la larga se van a descubrir.
Nadie, absolutamente nadie, impunemente puede burlarse de un pueblo, que como se quiera se ha conmovido con el secuestro mas impactante de los últimos tiempos.
Por humanidad, desde luego, que deseamos que Diego Fernández de Cevallos este con vida, con buena salud y que pronto sea liberado.
Por el contrario, si se comprobara la especulación de que todo es una faramalla, el pueblo sabrá castigar, principalmente en las urnas el engaño mediático. ¡Que no quepa la menor duda!
El boletín numero dos del grupo que se hace llamar desaparizadores@yahoo.com, la foto y la carta de Diego Fernández de Cevallos, el connotado panista, ha provocado una serie de reacciones en la opinión publica nacional que van desde el impacto mediático hasta la incredulidad.
En efecto, la carta dirigida a su hijo Diego, es dramática en toda su esencia, puesto que en la misma el político pide actuar con rapidez porque esta en juego su propia vida.
Es mas, le dice que cualquier actitud por querer argumentar pobreza de la familia sería totalmente contraproducente.
Fija las reglas del juego, en el sentido de que entre de inmediato en las negociaciones para su liberación al explicarle que los secuestradores tiene todo el tiempo del mundo pero a él se le agota minuto a minuto la paciencia pues esta viviendo un verdadero infierno.
Esta es la parte dramática, como ya dijimos, que se explica en la misma misiva familiar pero, y aquí el pero si vale, es que deben de tomarse en cuenta otros análisis que hacen saber que todo esto es una faramalla mediática con propósitos de carácter político.
De comprobarse lo anterior y si de repente apareciera el Jefe Diego, diríamos que se trataría de proyecciones perversas por parte de un grupo que quiere preservarse en el poder y que necesitaba urgentemente de una víctima.
Una víctima mediática para estas perversas intenciones mediáticas, que desde luego a la larga se van a descubrir.
Nadie, absolutamente nadie, impunemente puede burlarse de un pueblo, que como se quiera se ha conmovido con el secuestro mas impactante de los últimos tiempos.
Por humanidad, desde luego, que deseamos que Diego Fernández de Cevallos este con vida, con buena salud y que pronto sea liberado.
Por el contrario, si se comprobara la especulación de que todo es una faramalla, el pueblo sabrá castigar, principalmente en las urnas el engaño mediático. ¡Que no quepa la menor duda!
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