Raúl Mata / La Razón
Destacan que el proyecto es un «ejemplo» de colaboración entre administraciones y ayuntamientos.
Los vallisoletanos y turistas respiran tranquilos. Ya cuentan con otra escapatoria a las retenciones que se están dando estos días de verano en Valladolid. Y es que, se ha abierto al tráfico otro sentido del túnel de avenida de Salamanca, que beneficiará a casi 63.000 personas al día.
Los consejeros de Fomento, Antonio Silván; el de Interior y Justicia, Alfonso Fernández Mañueco; el alcalde Francisco Javier León de la Riva; y el presidente de la Diputación, Ramiro Ruiz Medrano, fueron los encargados de inaugurar esta arteria «fundamental» para la ciudad.
Antonio Silván señaló que esta vía conecta las rondas de la capital y garantiza la accesibilidad y la movilidad entre el interior y el exterior de la ciudad.
Asimismo, destacó que esta iniciativa, en la que la Junta ha invertido 4,3 millones, es un «ejemplo claro de las cosas positivas que se pueden llevar a cabo si existe colaboración entre las administraciones y los ayuntamientos».
Política de colaboración
Antonio Silván añadió que esta política de colaboración es una «demostración más de que la unidad de acción y unos objetivos claros redundan en la mejora de la calidad de vida y del bienestar de los ciudadanos».
La obra se enmarca en la segunda fase de rehabilitación de una de las principales avenidas vallisoletanas, que ha abarcado 2,5 kilómetros y ha tenido un coste total de 10.4 millones de euros.
Francisco Javier León de la Riva indicó que la construcción del túnel se han renovado totalmente las aceras, se han plantado quinientos árboles y se ha habilitado un carril bici en la márgen izquierda.
Asimismo, se han reducido las medianas existentes y se ha creado un tercer carril en las calzadas, justo inmediatamente antes de las intersecciones, con el fin de aligerar el tráfico de vehículos al atravesar los semáforos.
En estos trabajos, que ha durado dieciséis meses, también se ha renovado el alumbrado público y la red de riego y han instalado bancos, papeleras y vallas de protección de las aceras en las intersecciones. Respecto a los colectores, se construyeron dos nuevos, uno a la altura de la calle Padre José Acosta, junto al túnel, y otro que constituye al existente en la Plaza de San Bartolomé. La ejecución de esta última obra, según el alcalde, fue compleja por la presencia de redes subterráneas de telefonía y alumbrado, y por la aparición de restos de una antigua fábrica, circunstancias que obligaron a cambiar el desvío y el diámetro de las tuberías.
Por último, el Ayuntamiento de Valladolid ha impulsado desde hace cinco años la conversión de la avenida de Salamanca en una vía urbana, con un diseño diferente al de travesía.
Destacan que el proyecto es un «ejemplo» de colaboración entre administraciones y ayuntamientos.
Los vallisoletanos y turistas respiran tranquilos. Ya cuentan con otra escapatoria a las retenciones que se están dando estos días de verano en Valladolid. Y es que, se ha abierto al tráfico otro sentido del túnel de avenida de Salamanca, que beneficiará a casi 63.000 personas al día.
Los consejeros de Fomento, Antonio Silván; el de Interior y Justicia, Alfonso Fernández Mañueco; el alcalde Francisco Javier León de la Riva; y el presidente de la Diputación, Ramiro Ruiz Medrano, fueron los encargados de inaugurar esta arteria «fundamental» para la ciudad.
Antonio Silván señaló que esta vía conecta las rondas de la capital y garantiza la accesibilidad y la movilidad entre el interior y el exterior de la ciudad.
Asimismo, destacó que esta iniciativa, en la que la Junta ha invertido 4,3 millones, es un «ejemplo claro de las cosas positivas que se pueden llevar a cabo si existe colaboración entre las administraciones y los ayuntamientos».
Política de colaboración
Antonio Silván añadió que esta política de colaboración es una «demostración más de que la unidad de acción y unos objetivos claros redundan en la mejora de la calidad de vida y del bienestar de los ciudadanos».
La obra se enmarca en la segunda fase de rehabilitación de una de las principales avenidas vallisoletanas, que ha abarcado 2,5 kilómetros y ha tenido un coste total de 10.4 millones de euros.
Francisco Javier León de la Riva indicó que la construcción del túnel se han renovado totalmente las aceras, se han plantado quinientos árboles y se ha habilitado un carril bici en la márgen izquierda.
Asimismo, se han reducido las medianas existentes y se ha creado un tercer carril en las calzadas, justo inmediatamente antes de las intersecciones, con el fin de aligerar el tráfico de vehículos al atravesar los semáforos.
En estos trabajos, que ha durado dieciséis meses, también se ha renovado el alumbrado público y la red de riego y han instalado bancos, papeleras y vallas de protección de las aceras en las intersecciones. Respecto a los colectores, se construyeron dos nuevos, uno a la altura de la calle Padre José Acosta, junto al túnel, y otro que constituye al existente en la Plaza de San Bartolomé. La ejecución de esta última obra, según el alcalde, fue compleja por la presencia de redes subterráneas de telefonía y alumbrado, y por la aparición de restos de una antigua fábrica, circunstancias que obligaron a cambiar el desvío y el diámetro de las tuberías.
Por último, el Ayuntamiento de Valladolid ha impulsado desde hace cinco años la conversión de la avenida de Salamanca en una vía urbana, con un diseño diferente al de travesía.
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