Mientras la telefonía móvil se ha convertido en un juguete para los habitantes de países en desarrollo. Los teléfonos sustituyen la inadecuada infraestructura, como carreteras en mal estado y la lentitud de los servicios postales en países subdesarrollados, permitiendo que la información se mueva libremente, desencadenando más eficiencia en los mercados, así como el crecimiento empresarial.
La telefonía móvil ha evolucionado de tal forma, que se ha convertido en un bien necesario para las personas más pobres del mundo, de acuerdo con información de The Economist.
Esta dinámica tiene un impacto directo en el crecimiento económico, es decir, por cada 100 tenemos 10 teléfonos móviles, esto en un típico país en desarrollo impulsa el crecimiento del PIB en un 0.8%, de acuerdo con información del Banco Mundial.
En la actualidad, más de 4,000 millones de teléfonos se encuentran en uso alrededor de todo el mundo, tres cuartas partes de ellos en el mundo en desarrollo. Incluso África, cuatro de cada diez personas poseen un teléfono móvil.
Con esta tendencia a incrementar el uso de teléfonos móviles, surge una nueva forma de transferir dinero de usuario a usuario, o de establecimiento a usuario, llamado: "Dinero móvil". Los establecimientos que proporcionan este tipo de servicios son "tiendas comunes", las cuales permiten la compra de bonos derivados en tiempo aire. Estos servicios permiten los establecimientos de jugar con el rol de sucursales bancarias.
Ellos se encargarán de que el dinero en efectivo viaje instantáneamente (como un msj de texto) a tu cuenta de "dinero móvil". De igual forma, se puede realizar transferencias de usuario a usuario (siempre y cuando se encuentren registrados al servicio), los cuales pueden retirar su dinero en estos establecimientos o "tienditas". En caso de que no se encuentren registrados en el servicio, recibirán un mensaje de texto con un código o clave de seguridad, el cual te sirve para canjearlo por dinero en efectivo.
Un indiscutible ejemplo de este tipo de servicios, es "M-PESA" lanzado al mercado en 2007 por Safaricom de Kenya. En la actualidad, cuenta con más de 7 millones de usuarios en una población de sólo 38 millones y de los cuales sólo 18 millones cuentan con teléfonos móviles. M-PESA se popularizó entre la juventud, donde jóvenes migrantes utilizaban estos servicios para enviar dinero a sus familias en el campo. Actualmente es utilizado para cualquier tipo de transacción, desde los pagos para el derecho de matrícula hasta los servicios de taxi. Este tipo de sistemas, son muy populares en las Filipinas y Sudáfrica.
Se trata de un modo rápido, barato y seguro para la transferencia de dinero. El objetivo primordial de estos servicios se ve enfocado a la inmediatez y a la prontitud de la solución a las necesidades de esta sociedad. Esto conlleva a la inversión del tiempo en cosas más productivas, de esta forma, los ingresos de hogares de Kenya que cuentan con el servicio M-PESA, han aumentado en un 5-30% desde que comenzó la banca móvil.
Por razones de regulación M-PESA no paga intereses, es por ello que el servicio de dinero móvil" es utilizado por algunas personas como una cuenta de ahorros. Teniendo incluso un pequeño cojín de ahorro.
Los motivos por los cuales no se ha generalizado este tipo de servicios, es que debido a su progreso, los bancos temen que los operadores móviles infesten su mercado, además especulan los reguladores que éste sistema puede ser objeto de abuso para los defraudadores y lavadores de dinero. (El Semanario Agencia, ESA)
La telefonía móvil ha evolucionado de tal forma, que se ha convertido en un bien necesario para las personas más pobres del mundo, de acuerdo con información de The Economist.
Esta dinámica tiene un impacto directo en el crecimiento económico, es decir, por cada 100 tenemos 10 teléfonos móviles, esto en un típico país en desarrollo impulsa el crecimiento del PIB en un 0.8%, de acuerdo con información del Banco Mundial.
En la actualidad, más de 4,000 millones de teléfonos se encuentran en uso alrededor de todo el mundo, tres cuartas partes de ellos en el mundo en desarrollo. Incluso África, cuatro de cada diez personas poseen un teléfono móvil.
Con esta tendencia a incrementar el uso de teléfonos móviles, surge una nueva forma de transferir dinero de usuario a usuario, o de establecimiento a usuario, llamado: "Dinero móvil". Los establecimientos que proporcionan este tipo de servicios son "tiendas comunes", las cuales permiten la compra de bonos derivados en tiempo aire. Estos servicios permiten los establecimientos de jugar con el rol de sucursales bancarias.
Ellos se encargarán de que el dinero en efectivo viaje instantáneamente (como un msj de texto) a tu cuenta de "dinero móvil". De igual forma, se puede realizar transferencias de usuario a usuario (siempre y cuando se encuentren registrados al servicio), los cuales pueden retirar su dinero en estos establecimientos o "tienditas". En caso de que no se encuentren registrados en el servicio, recibirán un mensaje de texto con un código o clave de seguridad, el cual te sirve para canjearlo por dinero en efectivo.
Un indiscutible ejemplo de este tipo de servicios, es "M-PESA" lanzado al mercado en 2007 por Safaricom de Kenya. En la actualidad, cuenta con más de 7 millones de usuarios en una población de sólo 38 millones y de los cuales sólo 18 millones cuentan con teléfonos móviles. M-PESA se popularizó entre la juventud, donde jóvenes migrantes utilizaban estos servicios para enviar dinero a sus familias en el campo. Actualmente es utilizado para cualquier tipo de transacción, desde los pagos para el derecho de matrícula hasta los servicios de taxi. Este tipo de sistemas, son muy populares en las Filipinas y Sudáfrica.
Se trata de un modo rápido, barato y seguro para la transferencia de dinero. El objetivo primordial de estos servicios se ve enfocado a la inmediatez y a la prontitud de la solución a las necesidades de esta sociedad. Esto conlleva a la inversión del tiempo en cosas más productivas, de esta forma, los ingresos de hogares de Kenya que cuentan con el servicio M-PESA, han aumentado en un 5-30% desde que comenzó la banca móvil.
Por razones de regulación M-PESA no paga intereses, es por ello que el servicio de dinero móvil" es utilizado por algunas personas como una cuenta de ahorros. Teniendo incluso un pequeño cojín de ahorro.
Los motivos por los cuales no se ha generalizado este tipo de servicios, es que debido a su progreso, los bancos temen que los operadores móviles infesten su mercado, además especulan los reguladores que éste sistema puede ser objeto de abuso para los defraudadores y lavadores de dinero. (El Semanario Agencia, ESA)
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