viernes, agosto 14, 2009

Para el shock... TEC

A Puerta Cerrada / Marcela Gómez Zalce

• La cadena de mando en la FTSF
• ¿Cuáles son las cuatro corporaciones mexicanas?


Finaliza la curiosa semana con más síntomas de la bipolaridad oficial en la incontinencia verbal alrededor de la delicada crisis económica (que por supuesto vino de fuera). Una vez más Felipe, desde Colombia, regaló al sonriente respetable un diagnóstico digno para… para… reflexionar. Calderón aseguró que aunque (¿no lo parezca?) ya está acabando el punto más crítico de la crisis, los mexicanos deberán enfrentar un shock económico, rechazando que exista alguna contradicción entre su perspectiva de la economía (materia que al parecer reprobó) y la que ha delineado el titular de Hacienda, Agustín Carstens, cuyo “catarrito” entró en estado de literal shock.

Para Felipe, el punto más crítico de la crisis está quedando atrás, mientras que para Carstens está comenzando lo peor, de tal manera, my friend, que el segundo proyectó un panorama de terror a diversos gobernadores y al jefe de Gobierno capitalino sobre lo reducido del margen de la chequera federal para entregar recursos a los estados, donde no descarte que algunos pudieran incurrir en moratorias para enfrentar sus compromisos financieros.

Para Felipe hay un “hueco” –que ya parece hoyo negro– que dejó la crisis en las finanzas públicas y anunció que se hará un esfuerzo significativo para reducir el gasto público y evitar costos a la población, lo que confronta lo dicho por Agustín, quien deslizó un aumento en la recaudación fiscal, o sea, más impuestos y una seria posibilidad de un déficit público, o sea, más deuda. En resumen, la simpática medicina para el “catarrito” federal son dosis de TEC (Terapia Electro Convulsionante), mejor conocida como de electroshock..

Terapia psicológica que ha sido epicentro de encarnizadas polémicas ya que se hay probado que provoca daños cerebrales, pérdida de memoria y disminución de la inteligencia… (sic) y que se ha empleado en el tratamiento de la depresión. No existe evidencia de que la desorientación o la amnesia ayude a eliminarla, por el contrario, provoca angustia y en ocasiones los sujetos sometidos a TEC han cometido suicidio. ¿Acaso esto es lo que necesitan millones de mexicanos que han perdido el empleo frente a insoslayables compromisos económicos de sobrevivencia, donde México es el país donde su (des)gobierno frente a la crisis lo que estudia son medidas que contemplan alzas generalizadas y subir los impuestos...? ¿Se trata acaso de ponerle más emoción al panorama social de adversidad...? Porque hace pocas semanas, léase previo al proceso electoral, el escenario económico no era tema en la agenda presidencial, punto.

Lo grave es la maniaca recurrencia de simular datos, maquillar cifras y vender informes alegres ocultando la realidad que exhibe una brutal incompetencia para hacer frente a la peligrosa crisis que preocupa y ocupa a nuestros vecinos…

El cacareado pacto whatever firmado ayer por el procurador (con minúsculas) Medina Mora y la titular de DHS Napolitano para reforzar la frontera, está comprendido en ese contexto de la crisis económica y sus derivaciones para la seguridad nacional de los Estados Unidos. El divertido detalle fue el anuncio de la formación de la primera Fuerza de Tarea de Seguridad Fronteriza (FTSF), basada en México, of course, integrada por 40 agentes de cuatro corporaciones mexicanas (¿civiles o incluyen a nuestras fuerzas armadas?) que trabajará con el representante del ICE y de otras agencias estadunidenses aquí (¿DEA, CIA, FBI quizá…?) para intercambiar información de inteligencia y evidencias para frenar la ola de violencia… en puntos estratégicos de la frontera norte.

La foto es espléndida. El problema de fondo es (¿la cadena de mando?) la cifra de desempleados que engrosarán las filas del organizado crimen. La cuestión es, más allá del tráfico de armas —cuya ruta también es la frontera sur—, el peligroso riesgo mexicano de la colisión de sus crisis económica y de seguridad en los próximos meses, donde en México, mientras lo peor está por venir, algunos analistas alegan ya de una pequeña mejoría en el contexto económico de los Estados Unidos…

Lo que daría un alarmante sentido a las medidas (que faltan) promovidas por el gobierno de Barack Obama…Y es ahí, my friend, donde entra el expertise del nuevo embajador Carlos Pascual.

¡Adiós!

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