jueves, mayo 28, 2009

México sobresale, pero por sus resultados negativos

Se desploma 20% la IED

Carlos Fernández-Vega


Al rosario de indicadores negativos que desde 2008 acumula el país hay que agregar el relativo a la inversión extranjera directa, el cual se desplomó 20 por ciento ese año, contra incrementos superiores a 400 por ciento en Ecuador, 166 por ciento en Venezuela, 40 en Bolivia, 30 en Brasil, 23 en Argentina y 16 por ciento en Chile. Un pésimo resultado para el país pero, como dirían los clásicos, qué más si en 2009 la cosa se va a poner peor.

La Cepal difundió ayer su informe La inversión extranjera directa en América Latina y el Caribe 2008, en el que México sobresale, pero por sus resultados negativos en este renglón, con miras de empeorar en el presente año y el siguiente. A pesar de la crisis internacional y del declive de las corrientes de dicha inversión, apunta el organismo, la IED en la región “alcanzó un nuevo récord histórico y superó los 128 mil millones de dólares, 13 por ciento más que en 2007, aunque se observó una desaceleración respecto al crecimiento de 52 por ciento en 2007. Sin embargo, "la cifra récord esconde una realidad subregional muy distinta. Mientras que los flujos recibidos por América del Sur aumentaron 24 por ciento, alcanzando cerca de 90 mil millones de dólares, los flujos de IED destinados a México y la cuenca del Caribe (Centroamérica y países y territorios del Caribe) cayeron 5 por ciento, con lo cual llegaron a los 38 mil 500 millones".

Sobre este último dato la Cepal matiza: la caída en promedio fue de 5 por ciento, aunque los dos únicos países que reportaron caídas en IED fueron México, con el citado 20 por ciento, y El Salvador, con 48 por ciento. El resto registró alza, desde la muy modesta de Costa Rica (6 por ciento) a la más elevada de Nicaragua (64). A pesar de ello, en cualquiera de los casos "este aumento y la mayor presencia de empresas trasnacionales no necesariamente se han traducido en un mejor aprovechamiento de la IED", reconoce el organismo.

El buen desempeño que durante 2008 observó la inversión extranjera directa a nivel regional no fue parejo. Los flujos hacia América del Sur aumentaron notablemente gracias al impulso de las inversiones en busca de recursos naturales y de mercados, que se vieron estimuladas por el alto precio de los productos básicos, prevaleciente en la mayor parte de 2008, y el crecimiento económico subregional. Brasil fue el principal receptor de la región y el responsable de la mayor parte del aumento de las corrientes de IED. En cambio, los dineros canalizados a México y la cuenca del Caribe registraron un descenso como resultado de la crisis de Estados Unidos, el principal mercado exportador de estas economías, y en este contexto México fue el principal afectado con una reducción de 20 por ciento con respecto a 2007.

Para México ese 20 por ciento de caída en 2008 se tradujo en casi 5 mil 400 millones de dólares menos que un año atrás, al pasar de 27 mil 278 a 21 mil 950 millones), aunque cifras de la Secretaría de Economía reducen más ese monto para colocarlo en 18 mil 590 millones, con el agravante que de esa cantidad sólo 20 centavos de cada dólar fue inversión nueva; el resto (mitad y mitad), reinversión de utilidades y cuentas entre compañías. El panorama se complica, pues la Cepal estima que en 2009 los flujos de IED hacia la región se reduzcan entre 35 y 45 por ciento, una baja en la que México destacará, pero como uno de los principales afectados.

Por otro lado, el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados refiere que de acuerdo con la información actualizada de la Secretaría de Economía, la inversión extranjera directa en 2008 sumó 18 mil 589.3 millones de dólares, casi 32 por ciento menor a la registrada un año antes, o lo que es lo mismo, una caída cercana a 8 mil 700 millones de billetes verdes.

Del monto reportado de IED entre enero y diciembre de 2008 sólo 20.66 por ciento del total fueron nuevas inversiones, 9 mil 320.1 millones de dólares o 70.82 por ciento menos que en el mismo periodo de 2007. El resto, en proporciones similares, fue reinversión-disposición de utilidades acumuladas, y cuentas entre compañías.

Así, la IED como proporción del PIB disminuyó de 2.65 por ciento en 2007 a 1.71 en 2008, una baja de 0.94 puntos porcentuales. Entre 2003 y 2008 el promedio anual de este tipo de inversión como proporción del PIB fue de 2.4 por ciento; aunque en 2004 representó 3.11 por ciento del producto, resultado del nivel observado del valor del tipo de cambio del peso frente al dólar en ese año.

De los 18 mil 589.3 millones de dólares de IED realizada y notificada, 33.14 por ciento se dirigió a la industria manufacturera; 22.86 a la industria extractiva; 21.44 a servicios financieros; 9.3 al comercio; 4.17 a transportes y comunicaciones; y el restante 9.10 a otros sectores. En este contexto, destaca el desplome que se observó en la industria manufacturera: 48.76 por ciento.

De la IED realizada y notificada durante 2008, el 48.62 por ciento tuvo como destino el Distrito Federal; seguido, en orden de importancia, por el estado de Zacatecas (7.82); Baja California (7.78); Sonora (6.87); Chihuahua (5.66); Nuevo León (5.59) y Coahuila (5.12). Por país de origen, Estados Unidos aportó el 46 por ciento del total, seguido por Canadá (11.83), España (11.08), Islas Vírgenes (7.77), Reino Unido (7.52), Holanda (5.26) y otros países (10.82).

Sobre las expectativas para el presente año, la información oficial revela que la inversión extranjera directa resultará 20 por ciento menor a la de 2008, para caer a niveles cercanos a 15 mil millones de dólares, aunque dada la dinámica de deterioro económico la caída puede ser mucho más drástica. Y para 2010 mejoraría el panorama, pero el monto de IED resultaría inferior al registrado en 2008. Otro caramelo para los "signos alentadores" que celebran en Los Pinos.

Las rebanadas del pastel

Electoralmente oportunista, el inquilino de Los Pinos anuncia un "descuento" de 10 por ciento al precio del gas natural, y lo presenta en sociedad a escasas cinco semanas de los comicios del 5 de julio, en plena campaña, pero cuatro meses después del "congelamiento" del precio del gas LP del pasado 7 de enero. Eso sí, reconoció que esta decisión "no es suficiente, pero es una buena noticia". Pues bien, mexicanos crédulos, gocen "compromisos" y bombones de partidos y candidatos en campaña, porque a partir del 6 de julio, sin avisar, les pasarán las facturas.

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