La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) estima que, a consecuencia del deterioro de la economía nacional, ese sector perderá 106,000 empleos en 2009, cuando los estimados previos de la Cámara apuntaban a una generación de 350,000 plazas.
Acorde con el deterioro de los fundamentales macroeconómicos del país, las expectativas del sector construcción se han visto afectadas. Así, para el presente año la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) estima que el PIB de este sector caerá 4.9%, mientras que las previsiones originales del mismo organismo apuntaban a un crecimiento en un rango de 0.5% a 1.5%.
Ante tales proyecciones negativas, el Congreso debe aprobar algunas leyes que permitan que el gubernamental Plan Nacional de Infraestructura tenga éxito, comenta el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Humberto Armenta.
"Para que el programa anticíclico tenga éxito, no es necesario simplemente tener el dinero y destinarlo a la infraestructura. Es necesario que las reglas que rigen el gasto del dinero se modernicen", dice Armenta en una conferencia de prensa para hablar de las propuestas de la CMIC hizo a la Cámara de Diputados en la modificación de algunas leyes, entre ellas la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados.
Con la diplomacia del cargo, el líder de los constructores formales en el país, omitió comentar el resultado del primer trimestre, sin embargo advirtió que ante el actual entorno la CMIC recortó a la baja su perspectiva de crecimiento positivo de entre 0.5 y 1.5% a una contracción de 4.9% para todo el año.
Además, comentó que la meta de crear 350,000 empleos este año en el sector, con los datos actuales se considera que en 2009 se perderán 106,000 empleos en la industria de la construcción.
Armenta comentó que el plan nacional de infraestructura podría reactivar al sector si los legisladores aprueban las reformas. Aunque esto para algunos especialistas se ve difícil porque el periodo de sesiones en el Congreso termina el próximo 18 de abril y las modificaciones en cuestión no se encuentran en la agenda.
Derivado del entorno recesivo, el presidente Felipe Calderón anunció en febrero del año pasado la creación del Fondo Nacional de Infraestructura, el impulsaría fondearía proyectos de infraestructura por 270,000 millones de pesos (unos 24,985 millones de dólares al tipo de cambio de ese momento) en un periodo de cinco años. En octubre de 2008, con el "Programa para impulsar el crecimiento y el empleo" el gobierno federal dijo que canalizaría unos 65,100 millones de pesos (unos 5,170 millones de dólares al tipo de cambio de la fecha del anuncio) en forma adicional a la inversión de infraestructura.
En este sentido, el líder de los constructores comentó "antes no había tanto dinero para gastar en infraestructura, esto no era problema. No necesitaba reglas, ahora que hay dinero destino a la infraestructura, nos damos cuenta que requerimos cambiar las reglas del ejercicio público presupuestal".
"Hemos dado cinco pasos, nos faltan los otro cinco", enfatizó el presidente de la CMIC en torno al plan nacional de infraestructura.
La industria de la construcción tiene un gran efecto catalizador en un buen número de ramas industriales. El producto interno bruto (PIB) del sector contribuyó con el 6.4% del total en 2008, unos 20 puntos base menos respecto del 6.6% de 2007.
Derivado de la crisis económica, el tercer y cuarto trimestre de 2008 se registró una contracción anualizada en el PIB del sector, del orden de 3.9 y 1.8%, respectivamente, en comparación al mismo lapso de 2007. Para todo 2008, la industria registró una contracción de 0.6% en su PIB, mientras que la economía nacional creció 1.3%. (El Semanario Agencia, ESA)
Acorde con el deterioro de los fundamentales macroeconómicos del país, las expectativas del sector construcción se han visto afectadas. Así, para el presente año la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) estima que el PIB de este sector caerá 4.9%, mientras que las previsiones originales del mismo organismo apuntaban a un crecimiento en un rango de 0.5% a 1.5%.
Ante tales proyecciones negativas, el Congreso debe aprobar algunas leyes que permitan que el gubernamental Plan Nacional de Infraestructura tenga éxito, comenta el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Humberto Armenta.
"Para que el programa anticíclico tenga éxito, no es necesario simplemente tener el dinero y destinarlo a la infraestructura. Es necesario que las reglas que rigen el gasto del dinero se modernicen", dice Armenta en una conferencia de prensa para hablar de las propuestas de la CMIC hizo a la Cámara de Diputados en la modificación de algunas leyes, entre ellas la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados.
Con la diplomacia del cargo, el líder de los constructores formales en el país, omitió comentar el resultado del primer trimestre, sin embargo advirtió que ante el actual entorno la CMIC recortó a la baja su perspectiva de crecimiento positivo de entre 0.5 y 1.5% a una contracción de 4.9% para todo el año.
Además, comentó que la meta de crear 350,000 empleos este año en el sector, con los datos actuales se considera que en 2009 se perderán 106,000 empleos en la industria de la construcción.
Armenta comentó que el plan nacional de infraestructura podría reactivar al sector si los legisladores aprueban las reformas. Aunque esto para algunos especialistas se ve difícil porque el periodo de sesiones en el Congreso termina el próximo 18 de abril y las modificaciones en cuestión no se encuentran en la agenda.
Derivado del entorno recesivo, el presidente Felipe Calderón anunció en febrero del año pasado la creación del Fondo Nacional de Infraestructura, el impulsaría fondearía proyectos de infraestructura por 270,000 millones de pesos (unos 24,985 millones de dólares al tipo de cambio de ese momento) en un periodo de cinco años. En octubre de 2008, con el "Programa para impulsar el crecimiento y el empleo" el gobierno federal dijo que canalizaría unos 65,100 millones de pesos (unos 5,170 millones de dólares al tipo de cambio de la fecha del anuncio) en forma adicional a la inversión de infraestructura.
En este sentido, el líder de los constructores comentó "antes no había tanto dinero para gastar en infraestructura, esto no era problema. No necesitaba reglas, ahora que hay dinero destino a la infraestructura, nos damos cuenta que requerimos cambiar las reglas del ejercicio público presupuestal".
"Hemos dado cinco pasos, nos faltan los otro cinco", enfatizó el presidente de la CMIC en torno al plan nacional de infraestructura.
La industria de la construcción tiene un gran efecto catalizador en un buen número de ramas industriales. El producto interno bruto (PIB) del sector contribuyó con el 6.4% del total en 2008, unos 20 puntos base menos respecto del 6.6% de 2007.
Derivado de la crisis económica, el tercer y cuarto trimestre de 2008 se registró una contracción anualizada en el PIB del sector, del orden de 3.9 y 1.8%, respectivamente, en comparación al mismo lapso de 2007. Para todo 2008, la industria registró una contracción de 0.6% en su PIB, mientras que la economía nacional creció 1.3%. (El Semanario Agencia, ESA)
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