En México, el consumo per-cápita de agua supera en 7% el de los refrescos. De esta manera, el consumo de agua por persona se ubica en 169 litros contra 158 litros de los refrescos, revelan datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Sin embargo, de acuerdo el más reciente boletín de la Profeco sobre los refrescos embotellados, el gasto que realiza el consumidor en las bebidas gaseosas es mucho mayor al del agua.
“A pesar de que los refrescos tienen grandes cantidades de azúcar, ningún nutriente y en algunos casos se considera un factor importante en problemas de salud, los mexicanos son los consumidores número uno en el mundo”, sostuvo el organismo.
En el 2006, se vendieron 16.6 millones de litros de refrescos y aguas carbonatadas, colocando a México en el segundo productor mundial de refrescos, después de EU.
Coca-Cola, la marca más cara
Según un sondeo elaborado por la Profeco, de seis marcas diferentes de refrescos en botella de 2.5 litros no retornable, la marca Coca-Cola tiene el precio promedio más alto, con 17.60 pesos, mientras que el más bajo corresponde a Mirinda, con 13.71 pesos. Las cuatro marcas restantes – Fanta, Fresca, Manzana Lift y Sprite, se encuentran en un rango de precios entre 13.75 y 14.06 pesos.
Considerando un comparativo de presentaciones de 2.5 litros para refrescos y 1.5 litros para agua, la Profeco destacó que el precio de las bebidas gaseosas es 67% más caro que el del agua. Mientras que el litro de refresco cuesta 7.12 pesos, el litro de agua es de 4.27 pesos.
Por otra parte, datos del INEGI revelan que en el 2004 las familias que tenían ingresos bajos destinaban 3.7% de su gasto total al consumo de refrescos y aguas carbonatadas, y sólo 2.5% al agua.
En promedio, las familias mexicanas gastan 211 pesos mensuales en refrescos y 135 pesos en agua embotellada. Es decir, una diferencia de 50%.
“Aunque el refresco no es un producto de primera necesidad, es uno de los más demandados por la población mexicana, superando así el gasto que destinan las familias en alimentos básicos como tortillas huevo y frijol (…) El consumo y el gasto de esta bebida es elevado toda vez que muchas familias lo utilizan como bien sustituto”, reveló la Profeco.
Finalmente, el organismo advirtió que el exceso de refresco puede ocasionar problemas a la salud debido a su alto contenido de azúcar, lo que implica un alto consumo calórico. Agregó que el consumo de agua es indispensable para el buen funcionamiento del cuerpo y es más saludable.
“Toma en cuenta que el desmedido consumo de refrescos puede afectar tu gasto y mermar tu salud por lo cual te sugerimos hacer un consumo inteligente del tipo de bebidas que consumes”, concluyó. (El Semanario Agencia, ESA)
Sin embargo, de acuerdo el más reciente boletín de la Profeco sobre los refrescos embotellados, el gasto que realiza el consumidor en las bebidas gaseosas es mucho mayor al del agua.
“A pesar de que los refrescos tienen grandes cantidades de azúcar, ningún nutriente y en algunos casos se considera un factor importante en problemas de salud, los mexicanos son los consumidores número uno en el mundo”, sostuvo el organismo.
En el 2006, se vendieron 16.6 millones de litros de refrescos y aguas carbonatadas, colocando a México en el segundo productor mundial de refrescos, después de EU.
Coca-Cola, la marca más cara
Según un sondeo elaborado por la Profeco, de seis marcas diferentes de refrescos en botella de 2.5 litros no retornable, la marca Coca-Cola tiene el precio promedio más alto, con 17.60 pesos, mientras que el más bajo corresponde a Mirinda, con 13.71 pesos. Las cuatro marcas restantes – Fanta, Fresca, Manzana Lift y Sprite, se encuentran en un rango de precios entre 13.75 y 14.06 pesos.
Considerando un comparativo de presentaciones de 2.5 litros para refrescos y 1.5 litros para agua, la Profeco destacó que el precio de las bebidas gaseosas es 67% más caro que el del agua. Mientras que el litro de refresco cuesta 7.12 pesos, el litro de agua es de 4.27 pesos.
Por otra parte, datos del INEGI revelan que en el 2004 las familias que tenían ingresos bajos destinaban 3.7% de su gasto total al consumo de refrescos y aguas carbonatadas, y sólo 2.5% al agua.
En promedio, las familias mexicanas gastan 211 pesos mensuales en refrescos y 135 pesos en agua embotellada. Es decir, una diferencia de 50%.
“Aunque el refresco no es un producto de primera necesidad, es uno de los más demandados por la población mexicana, superando así el gasto que destinan las familias en alimentos básicos como tortillas huevo y frijol (…) El consumo y el gasto de esta bebida es elevado toda vez que muchas familias lo utilizan como bien sustituto”, reveló la Profeco.
Finalmente, el organismo advirtió que el exceso de refresco puede ocasionar problemas a la salud debido a su alto contenido de azúcar, lo que implica un alto consumo calórico. Agregó que el consumo de agua es indispensable para el buen funcionamiento del cuerpo y es más saludable.
“Toma en cuenta que el desmedido consumo de refrescos puede afectar tu gasto y mermar tu salud por lo cual te sugerimos hacer un consumo inteligente del tipo de bebidas que consumes”, concluyó. (El Semanario Agencia, ESA)
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