Apro
Como si se hubieran puesto de acuerdo, secretarios de estado y empresarios ligados al gobierno enfocaron sus críticas hacia el magnate Carlos Slim Helú, quien abiertamente ha llevado la contra a la posición del presidente Felipe Calderón de minimizar la crisis económica.
Javier Lozano Alarcón, secretario del Trabajo, ofreció incluso una entrevista televisiva exclusivamente para revirar a Slim, quien, la víspera, vaticinó un escenario económico para México peor al de la crisis mundial de 1930.
Arremetió el funcionario: "Ni el Banco de México ni la Secretaría de Hacienda, ni los analistas internacionales, ni la OCDE, ni el Banco Interamericano, nadie está viendo un escenario tan grave".
Lozano dijo que ese tipo de afirmaciones son "una franca exageración".
Lo peor es, agregó, que no son una opinión más, sino que "realmente pueden tener impacto en las inversiones, en los empleos y en el ánimo de la gente".
No fue más generoso Alberto Cárdenas, exprecandidato presidencial panista y actual secretario de Agricultura: "Que la boca se le haga chicharrón, a todos los que hacen este tipo de declaraciones, incluyendo a Slim".
Ante productores agrícolas guanajuatenses y el gobernador Juan Manuel Oliva, el funcionario dedicó su discurso a fustigar a Slim: "Hay muchos mexicanos aquí donde les gustaría ver arder la casa propia para ver arder la casa ajena, y eso ya se llama mala leche, ganas de que le vaya mal al país para que unos cuántos se aprovechen y se hagan más ricos y multimillonarios".
A la afrenta contra el segundo hombre más rico del mundo también se sumó el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Juan Molinar Horcaditas: "Con lo que podría ayudarnos mucho don Carlos es en hacer más competitivo el sector de telecomunicaciones en México. Sería un beneficio directo no sólo para los hogares sino también para las empresas".
Por si fuera poco, el exbanquero Alfredo Harp Helú, discrepó del sombrío panorama que sobre México esbozó el lunes la Cámara de Diputados su primo Carlos Slim y, luego de comparar a la crisis con un partido de béisbol, sostuvo que "México va a ganar", reportó el corresponsal de apro en Oaxaca, Pedro Matías.
"Estamos en una situación difícil. Vamos tal vez en (la fatídica) séptima entrada (la que puede definir un partido). Es un juego complicado, pero si revitalizamos a los pitchers y bateadores, tenemos que salir a ganar", dijo.
Dueño de los equipos "Diablos Rojos" de México y "Guerreros" de Oaxaca, el exbanquero y filántropo subrayó que "la ventaja del béisbol es que no se acaba por tiempo, sino que siempre hay una oportunidad de salir adelante y ganar el partido, y México va a ganar el partido".
En la entrevista, Harp se negó a opinar sobre lo dicho por su primo durante el foro "México ante la crisis: ¿qué hacer para crecer?" en el sentido de que la crisis internacional provocará el desplome del Producto Interno Bruto en México, con el consecuente cierre de empresas y desempleo.
Como si se hubieran puesto de acuerdo, secretarios de estado y empresarios ligados al gobierno enfocaron sus críticas hacia el magnate Carlos Slim Helú, quien abiertamente ha llevado la contra a la posición del presidente Felipe Calderón de minimizar la crisis económica.
Javier Lozano Alarcón, secretario del Trabajo, ofreció incluso una entrevista televisiva exclusivamente para revirar a Slim, quien, la víspera, vaticinó un escenario económico para México peor al de la crisis mundial de 1930.
Arremetió el funcionario: "Ni el Banco de México ni la Secretaría de Hacienda, ni los analistas internacionales, ni la OCDE, ni el Banco Interamericano, nadie está viendo un escenario tan grave".
Lozano dijo que ese tipo de afirmaciones son "una franca exageración".
Lo peor es, agregó, que no son una opinión más, sino que "realmente pueden tener impacto en las inversiones, en los empleos y en el ánimo de la gente".
No fue más generoso Alberto Cárdenas, exprecandidato presidencial panista y actual secretario de Agricultura: "Que la boca se le haga chicharrón, a todos los que hacen este tipo de declaraciones, incluyendo a Slim".
Ante productores agrícolas guanajuatenses y el gobernador Juan Manuel Oliva, el funcionario dedicó su discurso a fustigar a Slim: "Hay muchos mexicanos aquí donde les gustaría ver arder la casa propia para ver arder la casa ajena, y eso ya se llama mala leche, ganas de que le vaya mal al país para que unos cuántos se aprovechen y se hagan más ricos y multimillonarios".
A la afrenta contra el segundo hombre más rico del mundo también se sumó el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Juan Molinar Horcaditas: "Con lo que podría ayudarnos mucho don Carlos es en hacer más competitivo el sector de telecomunicaciones en México. Sería un beneficio directo no sólo para los hogares sino también para las empresas".
Por si fuera poco, el exbanquero Alfredo Harp Helú, discrepó del sombrío panorama que sobre México esbozó el lunes la Cámara de Diputados su primo Carlos Slim y, luego de comparar a la crisis con un partido de béisbol, sostuvo que "México va a ganar", reportó el corresponsal de apro en Oaxaca, Pedro Matías.
"Estamos en una situación difícil. Vamos tal vez en (la fatídica) séptima entrada (la que puede definir un partido). Es un juego complicado, pero si revitalizamos a los pitchers y bateadores, tenemos que salir a ganar", dijo.
Dueño de los equipos "Diablos Rojos" de México y "Guerreros" de Oaxaca, el exbanquero y filántropo subrayó que "la ventaja del béisbol es que no se acaba por tiempo, sino que siempre hay una oportunidad de salir adelante y ganar el partido, y México va a ganar el partido".
En la entrevista, Harp se negó a opinar sobre lo dicho por su primo durante el foro "México ante la crisis: ¿qué hacer para crecer?" en el sentido de que la crisis internacional provocará el desplome del Producto Interno Bruto en México, con el consecuente cierre de empresas y desempleo.
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