Los precios de las acciones en Estados Unidos se desplomaron nuevamente en la segunda peor jornada en la historia bursátil de Wall Street con un descenso de 8,5% y en el marco de nuevos temores de que el mundo va hacia una recesión.
Pese a las medidas del gobierno para fortalecer el sistema financiero, el índice Dow Jones cayó 733 puntos, su peor descenso en términos porcentuales desde octubre de 1987.
Similares caídas sufrieron las bolsas en Europa, destacando Londres con un retroceso del 7% y Frankfurt y París con 6%.
En América Latina el golpe más duro lo experimentó Buenos Aires con una caída del 12,14%, su peor comportamiento desde septiembre de 1998. Sao Paulo se derrumbó un 11,39% y a mita de jornada tuvo que recurrir nuevamente a un receso forzado.
En Washington, el jefe de la Reserva Federal, Ben Bernanke, advirtió que la economía de Estados Unidos enfrenta en estos momentos una "amenaza significativa" debido a la crisis crediticia.
Desaceleración de la economía
Algunos inversionistas ahora están convencidos de que la economía estadounidense, si ya no está en recesión, va directo a ella.
Mientras tanto, los líderes del grupo de las ocho economías más industrializadas del mundo acordaron llevar a cabo una cumbre con otros países para discutir una reforma del sistema financiero global.
La iniciativa se da a conocer tras un llamado del primer ministro británico Gordon Brown para reestructurar al Fondo Monetario Internacional con el fin de ayudar a regular los sistemas financieros del mundo.
Brown dijo a la BBC que la reunión se podría llevar a cabo "en las próximas semanas".
En Estados Unidos el impacto económico de la crisis del crédito fue destacado en dos informes publicados este miércoles.
Las ventas en septiembre registraron su descenso mensual más importante en más de tres años, mientras que un informe de la Reserva Federal mostró que la actividad económica se había debilitado en todo el país.
En un discurso en la ciudad de Nueva York, Bernanke aseguró que EE.UU. había evitado cometer los errores que provocaron la Gran Depresión de 1930.
Prometió que la Reserva continuaría luchando contra la crisis crediticia. Sin embargo, advirtió que llevará tiempo para que la salud de la economía del país mejore.
"El remezón de los mercados financieros y las presiones sobre las entidades crediticias amenaza significativamente el crecimiento de la economía", dijo.
"La década pasada ha mostrado que las burbujas crediticias pueden ser muy peligrosas y un fenómeno muy costoso para la economía de EE.UU.".
Los líderes europeos reunidos este miércoles en Bruselas hicieron un llamado para que haya una supervisión más estricta del sistema financiero internacional para evitar otra crisis global como la que tiene lugar actualmente.
"Somos víctimas de una crisis generada por los países ricos", dijo el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva.
Según el presidente de Francia y en este momento de la Unión Europea (UE), Nicolas Sakorzy, dijo además que había un apoyo unánime para que se realizara una cumbre mundial para reformar el capitalismo y que noviembre sería un buen mes para hacerla.
Durante una reunión convocada originalmente para analizar el cambio climático, los 27 presidentes y jefes de Estado de la UE aprobaron por unanimidad un plan de rescate financiero.
El Reino Unido, secundado por Alemania, propuso que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tuviera un papel más activo en la economía global, que incluyera un sistema de alerta rápida para prevenir otra crisis.
Sarkozy sugirió que se restringieran severamente los hedge funds (fondos especulativos de alto riesgo que suelen estar exentos de regulaciones oficiales) y los centros de finanzas extraterritoriales.
Perjuicio a inocentes
En Nueva Delhi, los líderes de las tres principales naciones emergentes -Brasil, India y Sudáfrica-, reunidos en su tercera cumbre, también enviaron un mensaje.
"Es inaceptable que un grupo de especuladores conviertan al mundo en un casino gigante y nos digan cómo debemos gobernar", agregó.
Ni India, ni Brasil ni África estuvieron muy expuestos a las inversiones tóxicas que generaron esta crisis. No obstante, están sufriendo los efectos secundarios, como la falta de crédito, la caída del valor de las monedas, crecimiento lento y baja en los precios de materias primas.
Pese a las medidas del gobierno para fortalecer el sistema financiero, el índice Dow Jones cayó 733 puntos, su peor descenso en términos porcentuales desde octubre de 1987.
Similares caídas sufrieron las bolsas en Europa, destacando Londres con un retroceso del 7% y Frankfurt y París con 6%.
En América Latina el golpe más duro lo experimentó Buenos Aires con una caída del 12,14%, su peor comportamiento desde septiembre de 1998. Sao Paulo se derrumbó un 11,39% y a mita de jornada tuvo que recurrir nuevamente a un receso forzado.
En Washington, el jefe de la Reserva Federal, Ben Bernanke, advirtió que la economía de Estados Unidos enfrenta en estos momentos una "amenaza significativa" debido a la crisis crediticia.
Desaceleración de la economía
Algunos inversionistas ahora están convencidos de que la economía estadounidense, si ya no está en recesión, va directo a ella.
Mientras tanto, los líderes del grupo de las ocho economías más industrializadas del mundo acordaron llevar a cabo una cumbre con otros países para discutir una reforma del sistema financiero global.
La iniciativa se da a conocer tras un llamado del primer ministro británico Gordon Brown para reestructurar al Fondo Monetario Internacional con el fin de ayudar a regular los sistemas financieros del mundo.
Brown dijo a la BBC que la reunión se podría llevar a cabo "en las próximas semanas".
En Estados Unidos el impacto económico de la crisis del crédito fue destacado en dos informes publicados este miércoles.
Las ventas en septiembre registraron su descenso mensual más importante en más de tres años, mientras que un informe de la Reserva Federal mostró que la actividad económica se había debilitado en todo el país.
En un discurso en la ciudad de Nueva York, Bernanke aseguró que EE.UU. había evitado cometer los errores que provocaron la Gran Depresión de 1930.
Prometió que la Reserva continuaría luchando contra la crisis crediticia. Sin embargo, advirtió que llevará tiempo para que la salud de la economía del país mejore.
"El remezón de los mercados financieros y las presiones sobre las entidades crediticias amenaza significativamente el crecimiento de la economía", dijo.
"La década pasada ha mostrado que las burbujas crediticias pueden ser muy peligrosas y un fenómeno muy costoso para la economía de EE.UU.".
Los líderes europeos reunidos este miércoles en Bruselas hicieron un llamado para que haya una supervisión más estricta del sistema financiero internacional para evitar otra crisis global como la que tiene lugar actualmente.
"Somos víctimas de una crisis generada por los países ricos", dijo el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva.
Según el presidente de Francia y en este momento de la Unión Europea (UE), Nicolas Sakorzy, dijo además que había un apoyo unánime para que se realizara una cumbre mundial para reformar el capitalismo y que noviembre sería un buen mes para hacerla.
Durante una reunión convocada originalmente para analizar el cambio climático, los 27 presidentes y jefes de Estado de la UE aprobaron por unanimidad un plan de rescate financiero.
El Reino Unido, secundado por Alemania, propuso que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tuviera un papel más activo en la economía global, que incluyera un sistema de alerta rápida para prevenir otra crisis.
Sarkozy sugirió que se restringieran severamente los hedge funds (fondos especulativos de alto riesgo que suelen estar exentos de regulaciones oficiales) y los centros de finanzas extraterritoriales.
Perjuicio a inocentes
En Nueva Delhi, los líderes de las tres principales naciones emergentes -Brasil, India y Sudáfrica-, reunidos en su tercera cumbre, también enviaron un mensaje.
"Es inaceptable que un grupo de especuladores conviertan al mundo en un casino gigante y nos digan cómo debemos gobernar", agregó.
Ni India, ni Brasil ni África estuvieron muy expuestos a las inversiones tóxicas que generaron esta crisis. No obstante, están sufriendo los efectos secundarios, como la falta de crédito, la caída del valor de las monedas, crecimiento lento y baja en los precios de materias primas.
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