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Dos fuertes sismos de magnitud 5.8 y 5.9 sacudieron en las últimas 24 horas el sureste y oeste de Irán con un saldo hasta el momento de 378 personas heridas y cuantiosos daños materiales. No hay reportes de víctimas mortales.
Fuentes oficiales citadas por la agencia EFE refieren que los mayores daños se registraron en el pueblo de Sirach, en la provincia suroriental de Kerman, y en la localidad de Tazeabad, ubicada en la región occidental de Kermanshah.
Mohamad Saberí, director de Emergencias de Kerman, dijo a la agencia oficial IRNA que el terremoto de Sirach registrado esta madrugada dejó 91 personas heridas que fueron trasladadas a los centros médicos de la ciudad.
De ese total, siete fueron hospitalizados por fracturas y deben ser operados, mientras que el resto ya fueron dados de alta tras ser atendidos por crisis de ansiedad y pánico y dolencias cardíacas, explicó Saberí.
En cuanto a los destrozos, el director general de la Media Luna Roja de Kerman, Reza Falah, dijo que hasta ahora solo se tiene constancia del agrietamiento y derrumbe de muros de adobe, aunque continúa la evaluación de daños.
El sismo de Sirach ocurrió a la 1:09 hora local del lunes a una profundidad de 10 kilómetros, mientras que el de Tazeabad se registró el domingo pasado a una profundidad de ocho kilómetros.
El gobernador de la provincia de Kermanshah, Hushang Bazvand, indicó que al menos 287 personas resultaron heridas por el temblor, de las que ocho continúan hospitalizadas. Un centenar de viviendas quedaron destruidas y más de 800 sufrieron daños, añadió.
Este sismo fue seguido por más de 165 réplicas, dos de ellas de magnitud superior a 4 grados, de acuerdo con datos del Centro Sismológico de la Universidad de Teherán.
Irán se ubica en una zona con gran actividad sísmica. En noviembre del año pasado, un terremoto de magnitud 7.3 causó 620 muertos y más de 12 mil heridos en la región de Kermanshah.
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