El bitcoin ha sorprendido a propios y extraños durante la última quincena de noviembre y los primeros días de diciembre de 2017.
Daniel Villegas / Dinero en Imagen
En menos de un mes pasó de 6,000 a 17,000 dólares. Una auténtica locura.
No obstante, el optimismo que se ha generado alrededor de la criptomoneda no ha sido uniforme, porque también existen muchos detractores.
Y no es para más, porque la historia de las crisis financieras nos ha mostrado que la rápida valuación de algún activo no es muy sustentable en el largo plazo.
En Bloomberg analizaron qué factores podrían llevar a que 'la burbuja del bitcoin explote'.
Sufrir un hackeo silencioso
Uno de los argumentos más sólidos para confiar en la seguridad del bitcoin es que su sistema de seguridad es casi imposible de hackear, en gran parte por el modelo descentralizado de la moneda.
Lo que, en cambio, puede ocurrir es que los propietarios de esta criptomoneda sean robados por piratas informáticos. Tal y como sucedió con Mt. Gox en 2014, lo que podría generar desconfianza y frenar la euforia, lo que terminaría reventando su valor.
¿Al alza o la baja?
Debido a que actualmente el bitcoin no opera en ninguna bolsa de valores, sólo es posible invertir para apostarle al alza. Es decir, se compra con la esperanza de que su valor se mantendrá o subirá en el futuro.
No obstante, los mercados financieros son mucho más complejos. Si el bitcoin llega a una bolsa formal pueden aparecer estrategias que le apuesten a que perderá su valor, lo que impactaría su precio.
Regulaciones estatales
Uno de los principales argumentos de los detractores del bitcoin, es que desconoce si el dinero que fluye por dicho sistema está siendo utilizado de forma lícita.
A algunos analistas les preocupa que se use para evadir impuestos, comprar objetos ilegales, etc.
Si el bitcoin toma la relevancia suficiente como para que las autoridades comiencen a pensar que deben intervenir, podría afectar el valor del bitcoin.
Poca ‘liquidez’
Uno de los grandes problemas del blockchain es la poca escalabilidad en el número de transacciones.
Esto dificulta que los inversionistas puedan tomar las utilidades cuando vendan sus bitcoin, lo que pueden desincentivarlos.
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