En una serie de mensajes en Twitter, Donald Trump ha amenazado a varias compañías con un gran impuesto en la frontera si amplían sus fábricas en el exterior para elaborar productos que serán vendidos en Estados Unidos.
Reuters
En una serie de mensajes en la red social Twitter, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha amenazado a varias compañías con un "gran impuesto en la frontera" si amplían sus fábricas en el exterior para elaborar productos que serán vendidos en Estados Unidos, pero ha entregado pocos detalles.
No está claro si está hablando sobre un impuesto o un arancel, dijeron expertos, reaccionando a las escuetas advertencias a United Technologies Corp, General Motors Co, Ford Motor Co y la japonesa Toyota Motor Corp.
Trump ha dicho que las empresas estadounidenses que cierren sus plantas de producción y despidan trabajadores para abrir nuevas instalaciones en el extranjero pagarán un impuesto o arancel de un 35% sobre los productos que envíen al mercado estadounidense.
Preguntado sobre el tema en una conferencia telefónica con periodistas el lunes, el portavoz del equipo de transición del presidente electo, Sean Spicer, dijo que Trump se ha concentrado en las firmas de Estados Unidos que "se van al exterior con el propósito explícito de vender en el mercado estadounidense con trabajadores extranjeros (...) Eso sigue así".
No hubo más detalles disponibles de inmediato.
— ¿Podría Trump imponer por sí mismo impuesto de importaciones a empresas de EU?
No. El Congreso escribe las leyes tributarias y la Constitución entrega principalmente a la Cámara de Representantes el poder de recaudación del gobierno federal. Las leyes tributarias son aplicadas por el Departamento del Tesoro y el Servicio de Impuestos Internos.
— ¿Podría Trump imponer por sí mismo un arancel?
Quizás, pero posiblemente habría demandas legales. Al igual que los impuestos, los aranceles también son medidas de recaudación.
El profesor de leyes tributarias Daniel Shaviro de la Escuela de Derecho de la New York University dijo que el poder del presidente para imponer aranceles por sí mismo es "altamente disputado (...) apuntar contra una compañía específica aumentaría las preocupaciones legales, así como las de política".
Shaviro dijo que aranceles selectivos contra compañías específicas, incluidas las que tienen sede en el exterior, posiblemente llevará a una demanda ante la Organización Mundial de Comercio y motivará medidas de represalia.
La profesora de la Escuela de Derecho de Brooklyn Rebecca Kysar escribió la semana pasada en una editorial en el diario New York Times que Trump estaba proponiendo la idea de imponer un arancel a las importaciones de entre un 5 a un 10% a través de acciones ejecutivas. Ella dijo que eso sería inconstitucional, citando la cláusula de origen que otorga el poder de recaudar ingresos al Congreso.
— ¿Está indicando Trump que existe apoyo a un impuesto fronterizo en el Congreso?
Algunos expertos dijeron que los tuits de Trump podrían significar que apoya un enfoque de impuestos corporativos para fomentar las exportaciones sin precedentes, propuesto por los legisladores republicanos, incluido el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan.
Conocido como ajustabilidad de la frontera, el plan busca ayudar a las manufactureras estadounidenses al favorecer a las exportaciones por sobre las importaciones. Como lo presentó Ryan, las compañías no pagarían impuestos sobre los ingresos por exportaciones y no podrían descontar el costo de las importaciones de su base imponible.
Sus defensores dijeron que si el enfoque se convierte en ley, eso atraería inversión a Estados Unidos, brindaría incentivos a las manufactureras para mantener y ampliar sus instalaciones en el país y disuadiría a las empresas que evalúan dejar el país. No obstante, algunos expertos tributarios tienen dudas de que el plan sea aprobado por el Congreso.
— ¿Están los tuits de Trump en línea con el plan de ajustabilidad de la frontera?
No exactamente. Sus comentarios han provocado ansiedad en los círculos de negocios por la posibilidad de un impuesto especial de castigo contra las compañías estadounidenses que envíen empleos al extranjero. En contraste, la propuesta de los republicanos de la Cámara baja trataría a todos los productos importados de forma equitativa, sin importar si fueron elaborados por empresas estadounidenses o extranjeras.
— ¿De dónde saca Trump la cifra de 35% que cita para el arancel a las empresas de EU que cierren plantas en el país para abrir nuevas instalaciones en el exterior pagarán sobre los productos que envíen al mercado estadounidense?
Eso tampoco está claro. Expertos dijeron que el presidente electo podría referirse en sus tuits al actual 35% de la tasas de impuesto a las utilidades corporativas en Estados Unidos. Eso también discreparía del plan de los republicanos de la Cámara baja, que sólo impondría un impuesto de un 20 por ciento a las importaciones.
Si bien algunos expertos dijeron que Trump podría seguir la aproximación de los republicanos de la Cámara de Representantes y someter a todas las importaciones a una tasa impositiva menor, otros dijeron que el presidente electo ha mostrado interés en el uso de diferentes tasas tributarias para castigar o premiar ciertos comportamientos de las empresas.
Por ejemplo, un plan de reforma tributaria presentado por Trump en septiembre proponía recortar la tasa de impuesto corporativo a un 15 por ciento, pero incluyó una salvedad importante: "Esta tasa está disponible para todas las empresas, grandes y pequeñas, que quieran mantener las utilidades dentro de su negocio".
— ¿Cuándo podríamos saber más sobre los planes de Trump?
El propio Trump podría ofrecer más detalles en cualquier momento, incluida una conferencia de prensa programada para este miércoles. Algunos esperan que los republicanos de la Cámara baja presenten un proyecto de reforma tributaria a fines de febrero. Ese cronograma podría cambiar, por las discusiones a las reformas que se den entre los republicanos y el equipo de transición de Trump, dijeron analistas.
erp
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