Eduardo Morales / Yadith Valdez / Francisco Cantú / Milenio
MONTERREY, NL.- Roberto Flores Treviño, procurador general de Justicia de Nuevo León, informó que tres funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, de los que no reveló su identidad ni su cargo, fueron detenidos por la riña en el penal de Topo Chico, y confirmó que fueron trasladados 233 reos a seis penales federales.
Funcionarios estatales revelaron a Milenio que los servidores cesados son la directora del penal, Gregoria Salazar; el subcomisario Fernando Domínguez Jaramillo, así como el custodio que disparó y mató a un reo.
La madrugada de ayer, 166 hombres y 30 mujeres fueron sacados del centro penitenciario bajo un fuerte dispositivo de seguridad implementado por fuerzas federales; estos reos se sumaron a los 37 internos trasladados durante la mañana del jueves.
Entre los internos están Juan Pedro Saldívar Farías, El Z-27, y César Iván Hernández Cantú, El Credo, líderes de Los Zetas a quienes se les responsabiliza de la masacre.
En conferencia de prensa, Flores Treviño detalló que 41 fueron enviados al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) 9 Norte en Ciudad Juárez, y 55 al Cefereso 11 de Sonora.
Otros 31 reos se enviaron al Cefereso 16 Femenil Morelos y 61 más al penal 15 de Chiapas. También al reclusorio 12 de Guanajuato fueron trasladadas 39 personas y seis al 2 de Occidente en Jalisco.
Sin embargo, aún se desconoce adónde fueron llevados los capos El Z-27 y El Credo.
Retoman control
Por la mañana, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón afirmó que estos presos purgan condenas por delitos federales y que sería el gobierno federal el que determinaría a donde serían enviados.
En conferencia, señaló que la vigilancia del penal de Topo Chico continúa a cargo de la SSP de la entidad, y al frente está el comisario general de la Agencia de Administración Penitenciaria, Juan Antonio Caballero.
Respecto a los detenidos, el procurador puntualizó: "Por los delitos de homicidio calificado y abuso de autoridad quedaron internados desde las 13:00 horas tres elementos que pertenecen a la SSP estatal".
Aunque manifestó que el nuevo Sistema de Justicia Penal le impide proporcionar la identidad de los presuntos responsables, funcionarios aseguraron que se trata de los responsables de la seguridad y el funcionamiento del penal.
Los tres detenidos quedaron a disposición de autoridades de Administración Penitenciaria, quienes definirán su situación jurídica.
Entregan 40 cuerpos
En Palacio de Gobierno, Flores Treviño afirmó que ya se han identificado y entregado los cuerpos de 40 reos, la mayoría de ellos procesados por delitos contra la salud.
Milenio confirmó que 24, de los 40 muertos identificados el jueves, pertenecían a Los Zetas, de los cuales siete fueron acusados por homicidio, cinco por secuestro, cinco por robo de auto, tres por venta de droga, uno por extorsión, uno por portación de armas y uno por robo a residencia.
Dos de los internos enfrentaban cargos por homicidio, secuestro y venta de droga.
El procurador detalló que de las nueve personas que falta por identificar, se cuenta con los perfiles de ADN de las personas calcinadas, mientras que de cuatro individuos no se cuenta con registro en el penal.
"De las otras cuatro personas que tenemos, no cuentan con registro. Es una situación bastante irregular y hay una carpeta de investigación por parte de la procuraduría", aseguró.
Informó que tienen en su poder los videos del enfrentamiento, mismos que están siendo analizados para identificar a los que participaron en el motín.
Previo a la reubicación de reos, agentes federales y de la Fuerza Civil realizaron un cateo en el penal que se prolongó durante horas.
Entre los objetos decomisados están medio kilogramo de mariguana, 30 pastillas psicotrópicas, 26 dosis de cocaína en piedra, 38 dosis de mota y 30 dosis de cocaína.
Además, 120 puntas artesanales, 60 martillos, 2 pantallas de 27 pulgadas, 400 encendedores, 16 memorias USB, 10 reproductores de mp3, 28 pinzas mecánicas y 86 cuchillos.
No atacaron a El Credo
En entrevista con Denise Maerker en Radio Fórmula, Flores Treviño relató que el motín inició cuando El Z-27 movilizó a un grupo de reos para atacar a El Credo; sin embargo, a éste "nunca lo atacaron porque no llegaron al área donde estaba".
A las 23:30, Hernández Cantú "estaba en una celda a todo lujo, toda cómoda, con cama king size, con un baño de lujo (...) estaba acompañado de una dama, y El Z-27 organiza un ataque contra él y toda su gente", señaló.
No se trató, dijo, de "un ataque a granel", pues el enfrentamiento tenía objetivos en particular. "Atacan a muchos sujetos, no es a uno, porque a El Credo nunca lo atacaron, nunca llegaron al área donde él estaba", enfatizó.
Agregó que hasta el momento no se ha determinado cuántas personas participaron, "ese dato está muy complicado de poderlo decir, porque dentro de todos los videos vemos mucha gente... todavía no tenemos el dato, el análisis va a tardar un rato más".
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