José Gil Olmos / Proceso
El gobernador de la entidad, Graco Ramirez, consideró como un atentado a la vida del procurador Rodrigo Dorantes Salgado el ataque que sufrió la madrugada de hoy en el que murieron tres de sus escoltas.
En conferencia de prensa, Graco Ramirez anunció que se creará una fiscalía especial para investigar el ataque e informó que están detenidos diez policías que participaron en la refriega.
Dijo que ya giró instrucciones para que se refuerce la seguridad del procurador porque su vida estuvo en peligro y de la secretaria de seguridad pública, Alicia Vázquez.
Aclaró que no hubo descoordinación entre ambas instituciones, sino un abuso de fuerza de los policías.
El gobernador rechazó que existiera un retén de los policías para detener las dos camionetas donde viajaban el procurador y sus escoltas.
Los hechos ocurrieron en la avenida 10 Abril en la colonia las Granjas. Ahí murieron los tres escoltas del procurador y uno más resulto herido.
Graco Ramírez dijo que el procurador siguió con el protocolo de seguridad, más no los policías estatales, que se excedieron en el uso de las armas.
Aseguró que la fiscaliza especial estará bajo sus ordenes y se investigará fondo qué fue lo que ocurrió. Sostuvo que habrá transparencia y claridad en toda la investigación.
Ante los cuestionamientos de la prensa de por qué el procurador y sus escoltas no se identificaron y viajaban en camionetas con placas particulares, el gobernador dijo que no tenían porque hacerlo y minimizó el uso de ese tipo de vehículos no oficiales.
Indicó que los diez policías detenidos son investigados para saber por qué se excedieron en el uso de la fuerza.
Este hecho ocurrió a s+plo un día y medio de que Graco Ramírez diera inicio a la creación de la policía de mando único a nivel estatal, así como la limpieza de los agentes policiales, tras reconocer que muchos de los elementos están vinculados con la delincuencia organizada.
Con la formación de la policía de mando único se pretende formalizar la integración de un solo organismo policial a todas las policías municipales y estatal para que responda a las órdenes de la secretaria de seguridad pública.
En este sentido, el gobernador rechazó que se vaya a dar marcha atrás a la reestructuración de la policía estatal e incluso indica que se adelantarán los plazos para tener una policía confiable.
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