Es acusado de "narco", homicida, violador, plagiario y líder pandillero. Ofrecían 100 mil dólares de recompensa.
Ignacio Alzaga / Milenio
Joe Luis Sáenz, uno de los 10 criminales más buscados por el FBI, identificado como sicario del narcotráfico mexicano, distribuidor de drogas, homicida, violador y líder de pandilleros en Los Ángeles, California, fue detenido el jueves por la Policía Federal en Guadalajara, Jalisco.
El estadunidense se encontraba prófugo desde 1998, cuando disparó y mató a dos miembros de una pandilla rival angelina; el buró estadunidense ofrecía por él una recompensa de 100 mil dólares luego de adherirlo al top ten de su lista de fugitivos en septiembre de 2010.
EU busca enjuiciarlo por los delitos de homicidio, violación, secuestro, robo de vehículos, posesión de drogas y violación de libertad condicional, aunque se tienen informes de que en la actualidad estaba al servicio de “un cártel de la droga mexicano”.
El FBI adhirió a Sáenz a la lista de los más buscados el 29 de septiembre de 2010 por los cargos de asesinato, violación y secuestro.
Según su expediente delictivo, en julio de 1998 presuntamente asesinó a dos pandilleros rivales en Los Ángeles; dos semanas después, el 5 de agosto, secuestró, violó y asesinó a su novia.
En octubre de 2008 el estadunidense y su pandilla supuestamente mataron a una cuarta víctima; entonces el buró federal estadunidense difundió un video de vigilancia que muestra a Saenz en los momentos previos a su participación en el crimen.
Los informes más recientes señalan que trabaja para un cártel mexicano y que viajaba con frecuencia entre Estados Unidos y México.
Sáenz tiene los alias Toro, Smiley y Maní, además de que tenía tatuados las palabras “Natalie”, “Cuatro”, “En Memoria Serelone voló” y “Flats4” en diferentes partes del cuerpo.
La SSP contactó al FBI para entregar al fugitivo norteamericano a las autoridades que lo requieren en California, quien también se hacía llamar Giovanni Velásquez, Garbiel Sanez, Lou Sanez y Gabriel Sáenz.
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