El presidente Felipe Calderón consideró hoy que su sexenio fue de “vacas flacas”, en referencia a las crisis sanitaria –por la influenza AH1N1–, económica, internacional y de seguridad que se registraron durante su mandato.
“Años de prueba”, dijo Calderón Hinojosa al dirigirse a la comunidad judía, que comió con él en la residencia oficial de Los Pinos.
A las dificultades mencionadas, el Ejecutivo federal añadió los desastres naturales como terremotos, inundaciones y sequías, utilizando referencias bíblicas.
“Creo que en términos del Sueño de José –profeta hijo de Jacob–, no fueron, ciertamente, los años de vacas gordas, fueron años de vacas flacas. Fueron años, también, de prueba para todos, fueron años en que, en cierta manera, también, fueron para México años de prueba para Job, el Job que todos llevamos dentro de nosotros mismos”, asentó el mandatario.
Calderón abundó en la crisis económica y atribuyó a ésta los problemas que devinieron en cambios de régimen, como la llamada Primavera Árabe.
Sin embargo, presumió diferentes medidas adoptadas por su administración, como la renegociación de deuda, entre otras que, asumió, han derivado en una economía estable y con generación de empleos.
En cuanto a esto último, sostuvo que se han generado 750 mil nuevos puestos de trabajo.
La mayor parte de su intervención Calderón la dedicó a los problemas de violencia e inseguridad, así como a la corrupción de los cuerpos de seguridad y procuración de justicia.
Al igual que en los otros aspectos de su discurso, el presidente aseguró que las condiciones han mejorado, pues actualmente existe un proceso de fortalecimiento institucional para sanear a los cuerpos de seguridad, en tanto, la violencia está a la baja, de manera que, por ejemplo, la tasa de homicidios en 2012 será más baja que la de 2010 y 2011.
Finalmente, Calderón Hinojosa deseó paz a la comunidad judía y a todos los mexicanos.
Comentarios