Rosa Santana / Apro
La gobernadora Ivonne Ortega Pacheco, quien ayer concluyó su gestión al frente de la gubernatura de Yucatán, fue despedida por cientos de yucatecos con un “juicio popular” y una sonora rechifla colectiva.
Pese a que los colaboradores de la exmandataria intentaron eclipsar la protesta con una estruendosa batucada, los manifestantes cumplieron su objetivo de expresar su repudio a la administración saliente.
Afuera de palacio de gobierno, los detractores de Ortega Pacheco celebraron un “juicio popular” y determinaron “encarcelar” a la exgobernadora, debido a que la encontraron culpable de enriquecimiento ilícito, represión y despilfarro de recursos.
En una jaula, los inconformes encerraron dos maniquíes: uno con la imagen de la exgobernadora y otro más con el rostro de la exalcaldesa de Mérida, Angélica Araujo Lara, actual senadora.
La protesta concluyó con la quema de un juego pirotécnico en el que apareció un mensaje que decía: “Nunca vuelvas Ivonne”.
A las 23:18 horas, cuando los manifestantes ya se habían retirado, Ortega Pacheco abandonó el palacio de gobierno –con música de trova como fondo– rodeada por algunos miembros de su gabinete, burócratas, obreros y estudiantes.
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