Apro
La Procuraduría General de Justicia del estado de Sinaloa, (PGJE) investiga la participación de un sicario adolescente detenido el pasado miércoles 12 en al menos 50 asesinatos en esa entidad.
Francisco Miguel formaba parte de Los Mazatlecos y entre sus víctimas estarían siete policías ministeriales del municipio del Fuerte.
Tras su aprehensión, el adolescente, que portaba un arma calibre .380, fue remitido a una agencia especializada en homicidios que lo incrimina en al menos 50 homicidios.
Las autoridades estatales señalaron que las evidencias recabadas en su contra, lo vinculan con la muerte y sepultura clandestina de ocho personas en la comunidad de Callejones, en la frontera con Sonora. También con la masacre de siete ganaderos en la sindicatura de San Blas, municipio del Fuerte, entre otras.
Francisco Miguel, originario de Tijuana, Baja California declaró que la pistola que le fue hallada la portaba por motivos de seguridad personal porque desde febrero pasado trabajaba como sicario para El Chilo perteneciente al grupo de Los Mazatlecos.
En su declaración ministerial dijo haber participado en varios homicidios, entre ellos los de varios agentes policiacos, un maestro en agosto pasado, un músico y siete ganaderos de la sindicatura de San Blas.
También reveló que participó en el homicidio de una persona a la que sepultaron en un rancho de Sonora, donde fueron encontrados ocho cuerpos más.
La Procuraduría General de Justicia del estado de Sinaloa, (PGJE) investiga la participación de un sicario adolescente detenido el pasado miércoles 12 en al menos 50 asesinatos en esa entidad.
Francisco Miguel formaba parte de Los Mazatlecos y entre sus víctimas estarían siete policías ministeriales del municipio del Fuerte.
Tras su aprehensión, el adolescente, que portaba un arma calibre .380, fue remitido a una agencia especializada en homicidios que lo incrimina en al menos 50 homicidios.
Las autoridades estatales señalaron que las evidencias recabadas en su contra, lo vinculan con la muerte y sepultura clandestina de ocho personas en la comunidad de Callejones, en la frontera con Sonora. También con la masacre de siete ganaderos en la sindicatura de San Blas, municipio del Fuerte, entre otras.
Francisco Miguel, originario de Tijuana, Baja California declaró que la pistola que le fue hallada la portaba por motivos de seguridad personal porque desde febrero pasado trabajaba como sicario para El Chilo perteneciente al grupo de Los Mazatlecos.
En su declaración ministerial dijo haber participado en varios homicidios, entre ellos los de varios agentes policiacos, un maestro en agosto pasado, un músico y siete ganaderos de la sindicatura de San Blas.
También reveló que participó en el homicidio de una persona a la que sepultaron en un rancho de Sonora, donde fueron encontrados ocho cuerpos más.
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