Jenaro Villamil
Una columna de Por mi Madre, Bohemios, con el siempre infaltable sentido del humor, de la ironía y de la indignación de Carlos Monsiváis tendría varias “perlas declarativas” de nuestros protagonistas mediáticos del último escándalo de la temporada poselectoral.
Por lo menos, aquí algunas selecciones de los enredos declarativos de voceros del PRI y del peñismo que documentan siempre nuestro optimismo sobre la victoria “contundente y legítima”:
1. De Saber que vendrías te tendría un pastel… un pastel… de Monex.
“Es como si usted hace una fiesta y contrata a alguien para que le haga la fiesta y se compra el pastel en la panadería o en la zapatería, es asunto de quien usted contrato (¿Y qué tal si lo contrató con los Zetas?, pregunta la R.) Usted no contrató ni con la zapatería ni con la panadería.
“Nosotros contratamos a Alkino, que hizo lo que tenía que hacer, y nosotros distribuimos de manera legal, legítima, ordenada y probadamente cada una de estas tarjetas” (¿Para comer un pastel?, la R. dulcera).
(Jesús Murillo Karam, exgobernador de Hidalgo, responsable de la defensa jurídica de Peña Nieto, al hacer una loa involuntaria a la triangulación de fondos. Reforma, 3 de agosto 2012).
2. Esto es una cantaleta. Las verdaderas óperas apenas se conocerán.
“Absolutamente falso lo que acaba de declarar Monreal. Lamentable que recurra a la mentira burda para subirle el volumen a su cantaleta” (tan modernos que son los equipos de sonido digitalizados).
“Monreal no presentará pruebas sobre su más reciente disparate porque es una mentira burda. Trata de hacer ruido sin sustento y nada más”.
(Doctor Luis Videgaray, coordinador general de la campaña de Enrique Peña Nieto, al responder en su cuenta de Twitter a la acusación de que él trianguló fondos por 8 mil 681 millones de pesos en una cuenta de Scotianbank. Jueves 2 de agosto).
3.-Hombre, de comprar la presidencia de la República, mejor hubiéramos comprado Pemex.
“El que se hubiera podido hacer todo lo que dicen que se hizo, pues en lugar de solamente haber comprado la Presidencia (ups, de dolor al morderse la lengua, la R.), hubiéramos comprado también la de gobernadores, senadores y diputados, y tenido carro completo (Es más, hubiéramos comprado al #YoSoy132 y repartirles tarjetas Soriana y de Monex a cada uno de los asistentes a las marchas anti Peña Nieto, la R. siguiendo la lógica declarativa). ¿Por qué solamente íbamos a comprar un pedacito de la elección y el resto no?”
(Francisco Rojas, coordinador de los diputados salientes del PRI, en un inspirador rapto declarativo para negar el “fraude selectivo” que no es lo mismo que “fraude en efectivo”, Reforma, 3 de agosto 2012).
4. Los cuentos de las cuentas.
“Es absolutamente falsa la aseveración de que esa cuenta de Scotianbank haya sido utilizada para apoyar alguna campaña política…
“Esa cuenta referida de Scotiabank, es una cuenta que se apertura (sic) en agosto de 2006; es una cuenta de inversión, esta cuenta como todas las demás cuentas bancarias del gobierno del Estado de México, son auditadas permanentemente por auditores externos.
“Además, los movimientos de esta cuenta de Scotiabank y todas las demás, sus movimientos, sus saldos, forman parte de la cuenta pública del Gobierno del Estado de México que se envía puntualmente al Poder Legislativo del estado y que es revisada por el Órgano Superior de Fiscalización de la Entidad” (¿y de dónde cree el gober mexiquense que pudo venir la “filtración”?).
(Eruviel Avila, gobernador del Estado de México, al admitir que esa cuenta mencionada por Ricardo Monreal sí era de las cuentas públicas de la entidad. 3 de agosto 2012).
5. En política, todo lo que se puede comprar sale barato.
El PRI “ahora manda a gente del CEN y les piden que firmen un contrato de trabajo por la cantidad de 5 mil pesos 300 y tantos pesos. Fueron y les dijeron que si les debían algo, que sabían que había habido problemas y les llevaron un contrato firmado.”
(México Martínez Lerma, operador del PRI en Guanajuato, entrevistado por El Universal, 6 de agosto 2012).
Una columna de Por mi Madre, Bohemios, con el siempre infaltable sentido del humor, de la ironía y de la indignación de Carlos Monsiváis tendría varias “perlas declarativas” de nuestros protagonistas mediáticos del último escándalo de la temporada poselectoral.
Por lo menos, aquí algunas selecciones de los enredos declarativos de voceros del PRI y del peñismo que documentan siempre nuestro optimismo sobre la victoria “contundente y legítima”:
1. De Saber que vendrías te tendría un pastel… un pastel… de Monex.
“Es como si usted hace una fiesta y contrata a alguien para que le haga la fiesta y se compra el pastel en la panadería o en la zapatería, es asunto de quien usted contrato (¿Y qué tal si lo contrató con los Zetas?, pregunta la R.) Usted no contrató ni con la zapatería ni con la panadería.
“Nosotros contratamos a Alkino, que hizo lo que tenía que hacer, y nosotros distribuimos de manera legal, legítima, ordenada y probadamente cada una de estas tarjetas” (¿Para comer un pastel?, la R. dulcera).
(Jesús Murillo Karam, exgobernador de Hidalgo, responsable de la defensa jurídica de Peña Nieto, al hacer una loa involuntaria a la triangulación de fondos. Reforma, 3 de agosto 2012).
2. Esto es una cantaleta. Las verdaderas óperas apenas se conocerán.
“Absolutamente falso lo que acaba de declarar Monreal. Lamentable que recurra a la mentira burda para subirle el volumen a su cantaleta” (tan modernos que son los equipos de sonido digitalizados).
“Monreal no presentará pruebas sobre su más reciente disparate porque es una mentira burda. Trata de hacer ruido sin sustento y nada más”.
(Doctor Luis Videgaray, coordinador general de la campaña de Enrique Peña Nieto, al responder en su cuenta de Twitter a la acusación de que él trianguló fondos por 8 mil 681 millones de pesos en una cuenta de Scotianbank. Jueves 2 de agosto).
3.-Hombre, de comprar la presidencia de la República, mejor hubiéramos comprado Pemex.
“El que se hubiera podido hacer todo lo que dicen que se hizo, pues en lugar de solamente haber comprado la Presidencia (ups, de dolor al morderse la lengua, la R.), hubiéramos comprado también la de gobernadores, senadores y diputados, y tenido carro completo (Es más, hubiéramos comprado al #YoSoy132 y repartirles tarjetas Soriana y de Monex a cada uno de los asistentes a las marchas anti Peña Nieto, la R. siguiendo la lógica declarativa). ¿Por qué solamente íbamos a comprar un pedacito de la elección y el resto no?”
(Francisco Rojas, coordinador de los diputados salientes del PRI, en un inspirador rapto declarativo para negar el “fraude selectivo” que no es lo mismo que “fraude en efectivo”, Reforma, 3 de agosto 2012).
4. Los cuentos de las cuentas.
“Es absolutamente falsa la aseveración de que esa cuenta de Scotianbank haya sido utilizada para apoyar alguna campaña política…
“Esa cuenta referida de Scotiabank, es una cuenta que se apertura (sic) en agosto de 2006; es una cuenta de inversión, esta cuenta como todas las demás cuentas bancarias del gobierno del Estado de México, son auditadas permanentemente por auditores externos.
“Además, los movimientos de esta cuenta de Scotiabank y todas las demás, sus movimientos, sus saldos, forman parte de la cuenta pública del Gobierno del Estado de México que se envía puntualmente al Poder Legislativo del estado y que es revisada por el Órgano Superior de Fiscalización de la Entidad” (¿y de dónde cree el gober mexiquense que pudo venir la “filtración”?).
(Eruviel Avila, gobernador del Estado de México, al admitir que esa cuenta mencionada por Ricardo Monreal sí era de las cuentas públicas de la entidad. 3 de agosto 2012).
5. En política, todo lo que se puede comprar sale barato.
El PRI “ahora manda a gente del CEN y les piden que firmen un contrato de trabajo por la cantidad de 5 mil pesos 300 y tantos pesos. Fueron y les dijeron que si les debían algo, que sabían que había habido problemas y les llevaron un contrato firmado.”
(México Martínez Lerma, operador del PRI en Guanajuato, entrevistado por El Universal, 6 de agosto 2012).
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