Fue Vargas quien despidió a Aristegui: Presidencia
Apro
La vocera del gobierno federal, Alejandra Sota, responsabilizó al dueño de MVS, Joaquín Vargas, de despedir a la periodista Carmen Aristegui en febrero del año pasado.
“El cese de Aristegui fue decisión exclusiva del señor Vargas, no un berrinche”, respondió Sota.
La responsable de la política de Comunicación Social del gobierno federal acusó al dueño de MVS de chantajear a la opinión pública. Explicó que Vargas se negó a pagar los 27 mil millones de pesos que cuesta el uso de banda ancha y, en consecuencia, ahora busca desviar la atención acusando a Los Pinos de censura.
Antes, Vargas ofreció una rueda de prensa en la que presentó correos, llamadas y comunicaciones de texto en las que el exsecretario del Trabajo, Javier Lozano, sugería el despido de Aristegui. Además, mostró una carta redactada por Sota, quien pretendía que la periodista leyera una disculpa pública por cuestionar el presunto alcoholismo del presidente Felipe Calderón.
Sota aceptó la veracidad de dichas comunicaciones y, de paso, presentó un correo que Vargas envió a los socios de MVS en los que asume como propia la decisión de despedir a Carmen Aristegui por violar el código de ética interno.
Apro
La vocera del gobierno federal, Alejandra Sota, responsabilizó al dueño de MVS, Joaquín Vargas, de despedir a la periodista Carmen Aristegui en febrero del año pasado.
“El cese de Aristegui fue decisión exclusiva del señor Vargas, no un berrinche”, respondió Sota.
La responsable de la política de Comunicación Social del gobierno federal acusó al dueño de MVS de chantajear a la opinión pública. Explicó que Vargas se negó a pagar los 27 mil millones de pesos que cuesta el uso de banda ancha y, en consecuencia, ahora busca desviar la atención acusando a Los Pinos de censura.
Antes, Vargas ofreció una rueda de prensa en la que presentó correos, llamadas y comunicaciones de texto en las que el exsecretario del Trabajo, Javier Lozano, sugería el despido de Aristegui. Además, mostró una carta redactada por Sota, quien pretendía que la periodista leyera una disculpa pública por cuestionar el presunto alcoholismo del presidente Felipe Calderón.
Sota aceptó la veracidad de dichas comunicaciones y, de paso, presentó un correo que Vargas envió a los socios de MVS en los que asume como propia la decisión de despedir a Carmen Aristegui por violar el código de ética interno.
Comentarios