Ernesto Martínez, Ciro Pérez y Matilde Pérez / La Jornada
Urbano Macías Rafael y Guadalupe Gerónimo Velázquez, comuneros de la población purépecha de Cherán, fueron hallados muertos hoy cerca de la comunidad El Pueblito, municipio de Zacapu.
Los labriegos desaparecieron el 8 de julio, cuando fueron a recoger su ganado en la zona de pastoreo. Los cuerpos tenían huellas de tortura y varios disparos, informó la subprocuraduría Regional de Justicia de Zamora.
El pasado domingo, cerca de las 14 horas, Urbano Macías, de 48 años de edad y Guadalupe Gerónimo, de 28, salieron en una camioneta hacia el norte de la comunidad. Poco después, el primero llamó por teléfono para avisar que habitantes del poblado vecino El Cerecito los habían secuestrado.
Los restos fueron localizados en una zona boscosa de Zacapu, a unos 30 kilómetros de Cherán. El concejo mayor municipal exigió justicia al gobierno estatal y recordó que desde el enfrentamiento con talamontes ocurrido el 15 de abril de 2011, 13 comuneros han sido secuestrados, cinco asesinados y más de seis heridos.
Al mediodía en la capital del estado, unos 200 comuneros de Cherán tomaron el Congreso local para exigir al gobierno del estado presentar con vida a sus compañeros. Los manifestantes impidieron a diputados, visitantes y reporteros salir del recinto.
A bordo de dos autobuses y otros vehículos, arribaron al monumento al general Lázaro Cárdenas. De ahí marcharon por la avenida Madero hasta el palacio de gobierno. Bloquearon las calles de acceso al centro histórico y a las 12:20 horas se plantaron frente a la puerta del Congreso local. Gritaron consignas en contra del gobierno estatal y amenazaron con un plantón indefinido hasta que aparecieran Urbano Macías y Guadalupe Gerónimo.
Responsabilizaron de lo ocurrido al gobierno del estado, que se comprometió a dar seguridad a esta región de la Meseta Purépecha, asediada por talamontes y la delincuencia organizada, que saquean bosques y secuestran y asesinan a lugareños.
A las 14:30 horas entró una comisión y la sesión del pleno se interrumpió varios minutos. Los inconformes ignoraban que sus compañeros ya habían muerto.
El gobernador Fausto Vallejo aseguró que un helicóptero buscaba a los desaparecidos y pidió a los cheranenses permitir un operativo de seguridad.
El presidente de la comisión legislativa de pueblos indígenas, Eleazar Aparicio Tercero, afirmó que Cherán vive una situación delicada porque los gobiernos federal y estatal no los han apoyado con policías para evitar el saqueo de madera y garantizar la seguridad de esta población purépecha, de unos 14 mil habitantes.
Antes de enterarse de la noticia, Laura Sánchez Santos, viuda de José Guadalupe Gerónimo, y Lourdes Tomás, de Urbano Macías, relataron en conferencia de prensa en la ciudad de México que ambos salieron de sus casas a las 7:30 horas del domingo rumbo a Calichero para herrar a un becerro y trasladar otro. A las 9:30 Lourdes recibió una llamada de Urbano, quien le dijo: Aquí veo a los rancheros (de El Cerecito), por si algo pasa. La comunicación se perdió. Sostuvieron que sus esposos fueron secuestrados por primos de Salvador Ortega, poblador de la comunidad vecina.
Dijeron que desde abril del año pasado han solicitado al gobierno de Michoacán y a la Secretaría de Gobernación ayuda para combatir a grupos del crimen organizado, talamontes y paramilitares en distintos puntos de la zona, pero las autoridades sólo firmaron minutas y dieron una embarradita de justicia.
Miembros del concejo mayor de Cherán se reunieron con el subsecretario de Gobierno Obdulio Ávila Mayo y acordaron que la Procuraduría General de la República (PGR) y la Policía Federal ayudarían a buscar a los comuneros, informó el abogado David Peña, quien acompañó a los aparceros a Gobernación.
Urbano Macías Rafael y Guadalupe Gerónimo Velázquez, comuneros de la población purépecha de Cherán, fueron hallados muertos hoy cerca de la comunidad El Pueblito, municipio de Zacapu.
Los labriegos desaparecieron el 8 de julio, cuando fueron a recoger su ganado en la zona de pastoreo. Los cuerpos tenían huellas de tortura y varios disparos, informó la subprocuraduría Regional de Justicia de Zamora.
El pasado domingo, cerca de las 14 horas, Urbano Macías, de 48 años de edad y Guadalupe Gerónimo, de 28, salieron en una camioneta hacia el norte de la comunidad. Poco después, el primero llamó por teléfono para avisar que habitantes del poblado vecino El Cerecito los habían secuestrado.
Los restos fueron localizados en una zona boscosa de Zacapu, a unos 30 kilómetros de Cherán. El concejo mayor municipal exigió justicia al gobierno estatal y recordó que desde el enfrentamiento con talamontes ocurrido el 15 de abril de 2011, 13 comuneros han sido secuestrados, cinco asesinados y más de seis heridos.
Al mediodía en la capital del estado, unos 200 comuneros de Cherán tomaron el Congreso local para exigir al gobierno del estado presentar con vida a sus compañeros. Los manifestantes impidieron a diputados, visitantes y reporteros salir del recinto.
A bordo de dos autobuses y otros vehículos, arribaron al monumento al general Lázaro Cárdenas. De ahí marcharon por la avenida Madero hasta el palacio de gobierno. Bloquearon las calles de acceso al centro histórico y a las 12:20 horas se plantaron frente a la puerta del Congreso local. Gritaron consignas en contra del gobierno estatal y amenazaron con un plantón indefinido hasta que aparecieran Urbano Macías y Guadalupe Gerónimo.
Responsabilizaron de lo ocurrido al gobierno del estado, que se comprometió a dar seguridad a esta región de la Meseta Purépecha, asediada por talamontes y la delincuencia organizada, que saquean bosques y secuestran y asesinan a lugareños.
A las 14:30 horas entró una comisión y la sesión del pleno se interrumpió varios minutos. Los inconformes ignoraban que sus compañeros ya habían muerto.
El gobernador Fausto Vallejo aseguró que un helicóptero buscaba a los desaparecidos y pidió a los cheranenses permitir un operativo de seguridad.
El presidente de la comisión legislativa de pueblos indígenas, Eleazar Aparicio Tercero, afirmó que Cherán vive una situación delicada porque los gobiernos federal y estatal no los han apoyado con policías para evitar el saqueo de madera y garantizar la seguridad de esta población purépecha, de unos 14 mil habitantes.
Antes de enterarse de la noticia, Laura Sánchez Santos, viuda de José Guadalupe Gerónimo, y Lourdes Tomás, de Urbano Macías, relataron en conferencia de prensa en la ciudad de México que ambos salieron de sus casas a las 7:30 horas del domingo rumbo a Calichero para herrar a un becerro y trasladar otro. A las 9:30 Lourdes recibió una llamada de Urbano, quien le dijo: Aquí veo a los rancheros (de El Cerecito), por si algo pasa. La comunicación se perdió. Sostuvieron que sus esposos fueron secuestrados por primos de Salvador Ortega, poblador de la comunidad vecina.
Dijeron que desde abril del año pasado han solicitado al gobierno de Michoacán y a la Secretaría de Gobernación ayuda para combatir a grupos del crimen organizado, talamontes y paramilitares en distintos puntos de la zona, pero las autoridades sólo firmaron minutas y dieron una embarradita de justicia.
Miembros del concejo mayor de Cherán se reunieron con el subsecretario de Gobierno Obdulio Ávila Mayo y acordaron que la Procuraduría General de la República (PGR) y la Policía Federal ayudarían a buscar a los comuneros, informó el abogado David Peña, quien acompañó a los aparceros a Gobernación.
Comentarios