Apro
El candidato de la alianza Compromiso por México, Enrique Peña Nieto, descartó que vaya a encarnar a un “presidente débil” por carecer de mayoría en el Congreso de la Unión.
En entrevista para CNN, el priista dijo que a partir de la conformación de la LXII Legislatura buscará construir los acuerdos necesarios en beneficio de los mexicanos.
Pese a que la alianza conformada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM) no alcanzó la mayoría legislativa, Peña Nieto confió en que el Congreso de la Unión será “responsable” con el futuro de México.
Luego argumentó que no se puede calificar a un presidente o a un gobierno como débil por “tener un Congreso que los mexicanos han querido sea o tenga corresponsabilidad en las definiciones que se tomen. Es el momento y el tiempo no para imponer, sino construir acuerdos”.
No obstante, afirmó que existe un respaldo mayoritario, contundente y claro en favor del proyecto que él encabeza y, “en el ejercicio de una Presidencia democrática, estaré para acreditar que desde ésta es posible convocar a las distintas expresiones políticas a la construcción de acuerdos a partir de las coincidencias”.
Y una vez más negó que haya habido compra y coacción del voto en la contienda comicial del domingo 1 de julio.
Más aún, consideró que prácticas de ese tipo se han ido desterrando del ejercicio democrático del
país, porque México ha cambiado y ha tenido un cambio democrático.
“Simplemente ha sido un señalamiento de descalificación de un partido que no ha querido reconocer el resultado de esta elección, que se ha valido de señalamientos totalmente infundados, que no tienen prueba alguna, no obstante presumir de tener tales pruebas”, insistió.
Los delitos electorales, acotó Peña Nieto, tienen que investigarse, ya que esa es una de las tareas de las autoridades en la materia.
Enseguida se dijo convencido de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) será quien valide los comicios y el que lo declare presidente electo antes del 6 de septiembre.
En torno a su eventual política en materia exterior, el mexiquense aseguró que el eje de su gobierno será de respeto a la soberanía de cada nación y también buscar que las empresas mexicanas tengan mayores oportunidades en otras naciones.
El candidato de la alianza Compromiso por México, Enrique Peña Nieto, descartó que vaya a encarnar a un “presidente débil” por carecer de mayoría en el Congreso de la Unión.
En entrevista para CNN, el priista dijo que a partir de la conformación de la LXII Legislatura buscará construir los acuerdos necesarios en beneficio de los mexicanos.
Pese a que la alianza conformada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Verde Ecologista de México (PVEM) no alcanzó la mayoría legislativa, Peña Nieto confió en que el Congreso de la Unión será “responsable” con el futuro de México.
Luego argumentó que no se puede calificar a un presidente o a un gobierno como débil por “tener un Congreso que los mexicanos han querido sea o tenga corresponsabilidad en las definiciones que se tomen. Es el momento y el tiempo no para imponer, sino construir acuerdos”.
No obstante, afirmó que existe un respaldo mayoritario, contundente y claro en favor del proyecto que él encabeza y, “en el ejercicio de una Presidencia democrática, estaré para acreditar que desde ésta es posible convocar a las distintas expresiones políticas a la construcción de acuerdos a partir de las coincidencias”.
Y una vez más negó que haya habido compra y coacción del voto en la contienda comicial del domingo 1 de julio.
Más aún, consideró que prácticas de ese tipo se han ido desterrando del ejercicio democrático del
país, porque México ha cambiado y ha tenido un cambio democrático.
“Simplemente ha sido un señalamiento de descalificación de un partido que no ha querido reconocer el resultado de esta elección, que se ha valido de señalamientos totalmente infundados, que no tienen prueba alguna, no obstante presumir de tener tales pruebas”, insistió.
Los delitos electorales, acotó Peña Nieto, tienen que investigarse, ya que esa es una de las tareas de las autoridades en la materia.
Enseguida se dijo convencido de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) será quien valide los comicios y el que lo declare presidente electo antes del 6 de septiembre.
En torno a su eventual política en materia exterior, el mexiquense aseguró que el eje de su gobierno será de respeto a la soberanía de cada nación y también buscar que las empresas mexicanas tengan mayores oportunidades en otras naciones.
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