Verónica Espinosa / Apro
En la víspera de la jornada electoral, fue asesinado el representante del Partido de la Revolución Democrática ante la Comisión Electoral Municipal de Valle de Santiago, Luis Antonio Contreras García, luego de discutir con tres hombres que lo atajaron en la vía pública esta tarde, los cuales le dispararon y huyeron.
El PRD acusó al gobierno del estado de un hostigamiento hacia ese partido previo a la votación, y de no brindar garantías para una jornada pacífica al proteger a los panistas “que insultan y agreden”, expresó en un comunicado.
Contreras García, quien se desempeñaba también como director de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de ese municipio del sur del estado, quedó tirado en la calle con dos disparos en el pecho que le causaron la muerte, reportó la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
De acuerdo con el reporte municipal y a información del propio PRD, el funcionario perredista había salido después de 16:00 horas de las oficinas de la Junta de Agua Potable y transitaba por las calles Victoria y Naranjo, en el centro de la ciudad, cuando tres hombres que viajaban en una camioneta Plymouth sin placas descendieron de ella y comenzaron a discutir con él, luego de lo cual le dispararon.
Contreras García fue trasladado al Hospital General, sin embargo, no sobrevivió.
De manera extraoficial se maneja la presunta detención de dos personas, luego de un operativo desplegado por policías preventivos.
El procurador de Justicia, Carlos Zamarripa Aguirre, anunció vía Twitter que el caso será investigado por la Subprocuraduría de Investigaciones Especializadas.
“La PGJ garantiza una pronta y exhaustiva investigación por el lamentable homicidio… he instruido que se realice todo lo necesario para su pronto esclarecimiento y detención de los responsables”, escribió el procurador.
Sin embargo, en un pronunciamiento por escrito, la dirigencia estatal del PRD responsabilizó al gobierno del estado y al Partido Acción Nacional de los hechos “por el hostigamiento y parcialidad de las autoridades y la protección que han brindado (a los panistas) para actuar con impunidad, con amenazas e insultos”.
Hugo Estefanía Monroy, presidente del Comité Ejecutivo del PRD, demandó al gobernador Héctor López Santillana el esclarecimiento de este homicidio y el castigo a los responsables, y lo acusó junto con el secretario de Gobierno, Román Cifuentes Negrete, de no haber atendido las peticiones expresas para garantizar la tranquilidad entre los actores políticos en este municipio.
“Estuvieron hostigando al presidente municipal, Fernando Arredondo Franco, y a los integrantes de la Policía Municipal. En contraparte, agregó, solaparon a militantes, dirigentes y candidatos del Partido Acción Nacional, quienes impunemente han insultado, ofendido y amenazado a la autoridad municipal y a los candidatos perredistas… las fuerzas del orden enviadas por el gobierno del estado, explicó, se dedicaban a escoltar a los panistas y desoyeron todo señalamiento sobre su proceder en contra del PRD”, expuso Estefanía Monroy.
En tanto que el exdirigente estatal perredista, Miguel Alonso Raya, reveló que apenas el jueves en una conversación vía telefónica, fue amenazado por el secretario de Gobierno, Román Cifuentes, cuando le solicitó intervenir para “bajar la tensión” que se registra en este municipio con motivo de la contienda electoral.
Ese día, el director de la Policía Municipal, J. Luz Méndez y cuatro elementos, fueron trasladados en un fuerte operativo de las fuerzas de seguridad del estado y agentes de la Policía Ministerial a rendir declaración a Irapuato por una acusación de abuso de autoridad interpuesta por militantes del PAN.
Según el testimonio de Alonso Raya, el secretario de Gobierno le respondió que por el contrario, mandaría a detener al alcalde perredista Fernando Arredondo.
“A cambio de la oferta de diálogo y de tratar de conducir las cosas por la vía de la civilidad, (el secretario de Gobierno) pidió que controláramos al alcalde porque si no, al rato íbamos a tener que irle a pedir favor para sacarlo de la cárcel”, narró Miguel Alonso.
Mientras el gobernador panista Héctor López Santillana ha guardado silencio ante este crimen, el dirigente del PAN, Gerardo Trujillo, lamentó el asesinato del funcionario perredista y condenó “a aquellos que quieren entorpecer el proceso electoral”.
En la víspera de la jornada electoral, fue asesinado el representante del Partido de la Revolución Democrática ante la Comisión Electoral Municipal de Valle de Santiago, Luis Antonio Contreras García, luego de discutir con tres hombres que lo atajaron en la vía pública esta tarde, los cuales le dispararon y huyeron.
El PRD acusó al gobierno del estado de un hostigamiento hacia ese partido previo a la votación, y de no brindar garantías para una jornada pacífica al proteger a los panistas “que insultan y agreden”, expresó en un comunicado.
Contreras García, quien se desempeñaba también como director de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de ese municipio del sur del estado, quedó tirado en la calle con dos disparos en el pecho que le causaron la muerte, reportó la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
De acuerdo con el reporte municipal y a información del propio PRD, el funcionario perredista había salido después de 16:00 horas de las oficinas de la Junta de Agua Potable y transitaba por las calles Victoria y Naranjo, en el centro de la ciudad, cuando tres hombres que viajaban en una camioneta Plymouth sin placas descendieron de ella y comenzaron a discutir con él, luego de lo cual le dispararon.
Contreras García fue trasladado al Hospital General, sin embargo, no sobrevivió.
De manera extraoficial se maneja la presunta detención de dos personas, luego de un operativo desplegado por policías preventivos.
El procurador de Justicia, Carlos Zamarripa Aguirre, anunció vía Twitter que el caso será investigado por la Subprocuraduría de Investigaciones Especializadas.
“La PGJ garantiza una pronta y exhaustiva investigación por el lamentable homicidio… he instruido que se realice todo lo necesario para su pronto esclarecimiento y detención de los responsables”, escribió el procurador.
Sin embargo, en un pronunciamiento por escrito, la dirigencia estatal del PRD responsabilizó al gobierno del estado y al Partido Acción Nacional de los hechos “por el hostigamiento y parcialidad de las autoridades y la protección que han brindado (a los panistas) para actuar con impunidad, con amenazas e insultos”.
Hugo Estefanía Monroy, presidente del Comité Ejecutivo del PRD, demandó al gobernador Héctor López Santillana el esclarecimiento de este homicidio y el castigo a los responsables, y lo acusó junto con el secretario de Gobierno, Román Cifuentes Negrete, de no haber atendido las peticiones expresas para garantizar la tranquilidad entre los actores políticos en este municipio.
“Estuvieron hostigando al presidente municipal, Fernando Arredondo Franco, y a los integrantes de la Policía Municipal. En contraparte, agregó, solaparon a militantes, dirigentes y candidatos del Partido Acción Nacional, quienes impunemente han insultado, ofendido y amenazado a la autoridad municipal y a los candidatos perredistas… las fuerzas del orden enviadas por el gobierno del estado, explicó, se dedicaban a escoltar a los panistas y desoyeron todo señalamiento sobre su proceder en contra del PRD”, expuso Estefanía Monroy.
En tanto que el exdirigente estatal perredista, Miguel Alonso Raya, reveló que apenas el jueves en una conversación vía telefónica, fue amenazado por el secretario de Gobierno, Román Cifuentes, cuando le solicitó intervenir para “bajar la tensión” que se registra en este municipio con motivo de la contienda electoral.
Ese día, el director de la Policía Municipal, J. Luz Méndez y cuatro elementos, fueron trasladados en un fuerte operativo de las fuerzas de seguridad del estado y agentes de la Policía Ministerial a rendir declaración a Irapuato por una acusación de abuso de autoridad interpuesta por militantes del PAN.
Según el testimonio de Alonso Raya, el secretario de Gobierno le respondió que por el contrario, mandaría a detener al alcalde perredista Fernando Arredondo.
“A cambio de la oferta de diálogo y de tratar de conducir las cosas por la vía de la civilidad, (el secretario de Gobierno) pidió que controláramos al alcalde porque si no, al rato íbamos a tener que irle a pedir favor para sacarlo de la cárcel”, narró Miguel Alonso.
Mientras el gobernador panista Héctor López Santillana ha guardado silencio ante este crimen, el dirigente del PAN, Gerardo Trujillo, lamentó el asesinato del funcionario perredista y condenó “a aquellos que quieren entorpecer el proceso electoral”.
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