Marco A. Flota / Grillotina
El Gobierno del Distrito Federal inició la epidemia de récords Guinness.
El récord del mayor número de personas desnudas posando para un famoso fotógrafo. El del mayor número de parejas besándose al mismo tiempo: Fueron algo así como 5 mil personas, lo que no necesariamente significa que hayan sido 2 mil 500 mujeres y 2 mil 500 hombres, por aquello de los matrimonios gays.
La rosca de Reyes más grande del mundo, el árbol de Navidad más alto, el mayor número de personas bailando como Michael Jackson. En fin, el Distrito Federal tiene quizá el récord del mayor número de récords en el Libro de Récords de Guinness.
Pero Guadalajara no podía quedarse atrás.
La Perla de Occidente presumió en el pasado de tener a la cuarta belleza mundial- Ana Berta Lepe-, al mejor muletero del mundo- Manuel Capetillo- a las campeonísimas Chivas y hasta al primer cardenal de este país, monseñor Garibi Rivera. Ana Berta ya no hace telenovelas y las Chivas ya están para llorar, pero esa es otra historia.
Ahora vuelven por sus fueros los tapatíos con la mayor mentada de madre del mundo.
Ciertamente no estuvo presente ningún representante de la Casa Guinness para certificarlo, pero cuando menos mil 500 personas se reunieron en la Plaza de Armas de Guadalajara para gritar al unísono...eh...bueno, vamos a reproducir textualmente el párrafo principal de la nota publicada por el periódico Reforma:
“Al mediodía se escucharon las voces de los inconformes gritando: “¡Emilio González, chingas a tu madre!”
Los organizadores del evento ya conocido como “La Megamentada”, informaron que se grabó en audio y video el histórico suceso para enviar las pruebas a los señores que registran los récords. Y uno de los promotores señaló:
“Ya es seguro que se estableció, porque no hay un récord Guinness de la mentada de madre, sería una categoría nueva”.
Aunque eso de “categoría” es discutible, si acaso será un detalle anecdótico. Casi al nivel de la promoción que hace al “cuchicuchi” doña Josefina Vázquez Mota.
¿Pero por qué están tan enojados los tapatíos con su gobernador, el mentado- nunca mejor empleado el término- Emilio González?
Bueno, simplemente porque el señor, según quedó consignado en un video que tuvo amplia difusión, al entregar un cheque por cuantiosa cantidad a otro cardenal, don Juan Sandoval Íñiguez, para la construcción del Santuario de los Mártires, había expresado que sabía que lo iban a criticar. E inauguró la temporada de mentadas:
“Con su perdón, señor Cardenal, los que no estén de acuerdo, ¡que chinguen a su madre!”
Después de eso, se dedicó a organizar los Juegos Panamericanos que, en su opinión, le salieron “muy chingones”. Y enseguida lanzó su precandidatura a la Presidencia de la República, pero después tuvo que retirarla, aunque no se fue- como diría Andrés Manuel López Obrador- a La Chingada, sino que siguió gobernando tan campante.
Así andan las cosas en Jalisco.
Pronto don Emilio González entregará el poder, presumiblemente al PRI cuyo candidato se llama Aristóteles y como su tocayo griego suele producir frases filosóficas. Una de ellas:
-Cría Cuervos... y se los tomará el gobernador.
¡RRIINNGG!
-Bueno, el PRI...
-Impresionante el cierre de campaña del candidato en Veracruz, ¿verdad?
-¡Ya lo dijo el Santo Papa y lo dijo a voz a cuello “Sólo Peña Nieto es bello”!
EPIGRILLO
El agua, amén de barata,
debe de ser incolora,
insípida e inodora...
como cierta candidata.
El Gobierno del Distrito Federal inició la epidemia de récords Guinness.
El récord del mayor número de personas desnudas posando para un famoso fotógrafo. El del mayor número de parejas besándose al mismo tiempo: Fueron algo así como 5 mil personas, lo que no necesariamente significa que hayan sido 2 mil 500 mujeres y 2 mil 500 hombres, por aquello de los matrimonios gays.
La rosca de Reyes más grande del mundo, el árbol de Navidad más alto, el mayor número de personas bailando como Michael Jackson. En fin, el Distrito Federal tiene quizá el récord del mayor número de récords en el Libro de Récords de Guinness.
Pero Guadalajara no podía quedarse atrás.
La Perla de Occidente presumió en el pasado de tener a la cuarta belleza mundial- Ana Berta Lepe-, al mejor muletero del mundo- Manuel Capetillo- a las campeonísimas Chivas y hasta al primer cardenal de este país, monseñor Garibi Rivera. Ana Berta ya no hace telenovelas y las Chivas ya están para llorar, pero esa es otra historia.
Ahora vuelven por sus fueros los tapatíos con la mayor mentada de madre del mundo.
Ciertamente no estuvo presente ningún representante de la Casa Guinness para certificarlo, pero cuando menos mil 500 personas se reunieron en la Plaza de Armas de Guadalajara para gritar al unísono...eh...bueno, vamos a reproducir textualmente el párrafo principal de la nota publicada por el periódico Reforma:
“Al mediodía se escucharon las voces de los inconformes gritando: “¡Emilio González, chingas a tu madre!”
Los organizadores del evento ya conocido como “La Megamentada”, informaron que se grabó en audio y video el histórico suceso para enviar las pruebas a los señores que registran los récords. Y uno de los promotores señaló:
“Ya es seguro que se estableció, porque no hay un récord Guinness de la mentada de madre, sería una categoría nueva”.
Aunque eso de “categoría” es discutible, si acaso será un detalle anecdótico. Casi al nivel de la promoción que hace al “cuchicuchi” doña Josefina Vázquez Mota.
¿Pero por qué están tan enojados los tapatíos con su gobernador, el mentado- nunca mejor empleado el término- Emilio González?
Bueno, simplemente porque el señor, según quedó consignado en un video que tuvo amplia difusión, al entregar un cheque por cuantiosa cantidad a otro cardenal, don Juan Sandoval Íñiguez, para la construcción del Santuario de los Mártires, había expresado que sabía que lo iban a criticar. E inauguró la temporada de mentadas:
“Con su perdón, señor Cardenal, los que no estén de acuerdo, ¡que chinguen a su madre!”
Después de eso, se dedicó a organizar los Juegos Panamericanos que, en su opinión, le salieron “muy chingones”. Y enseguida lanzó su precandidatura a la Presidencia de la República, pero después tuvo que retirarla, aunque no se fue- como diría Andrés Manuel López Obrador- a La Chingada, sino que siguió gobernando tan campante.
Así andan las cosas en Jalisco.
Pronto don Emilio González entregará el poder, presumiblemente al PRI cuyo candidato se llama Aristóteles y como su tocayo griego suele producir frases filosóficas. Una de ellas:
-Cría Cuervos... y se los tomará el gobernador.
¡RRIINNGG!
-Bueno, el PRI...
-Impresionante el cierre de campaña del candidato en Veracruz, ¿verdad?
-¡Ya lo dijo el Santo Papa y lo dijo a voz a cuello “Sólo Peña Nieto es bello”!
EPIGRILLO
El agua, amén de barata,
debe de ser incolora,
insípida e inodora...
como cierta candidata.
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