Lilia Arellano
Con mucho orgullo hemos gritado a los cuatro vientos que nuestro país es todo un mosaico, tanto cultural como en formas de vida, costumbres, alimentación, expresiones y resulta un tanto difícil de entender que tras años y años de repetirlo quienes aspiran a gobernarnos no tengan presente ninguno de estos renglones al momento de dirigirse a los ciudadanos. Podría manejarse un todo, sin distinciones, si en realidad se respetara el federalismo y las entidades se manejaran de manera autónoma y esto implica en un primer orden la recaudación tributaria y la aplicación directa de estos ingresos en el lugar en donde se capturan. Es decir, todo tendría que ser distinto y serían los Estados los que le entregarían porcentajes de recaudación a la federación. Nada de esto sucede y existe una lastimosa ignorancia sobre lo que sacude e importa a cada lugar.
En estos tiempos ese mosaico está más presente que nunca. Actos, acciones y reacciones que se tienen en una entidad no pueden repetirse en otra salvo que se quieran provocar funestas consecuencias. Hablan los aspirantes a dirigir los destinos del país de unidad cuando sus antecesores se han dedicado con vital ahínco a provocar todo lo contrario y por si fuera poco a destruir todo aquello que nos une. Un ejemplo de ello lo han sido las ceremonias cívicas, el sentido patriótico, las modificaciones en los textos de historia, etcétera. Hablan de paz, de tranquilidad, cuando por debajo del agua convocan, promueven, patrocinan reuniones y marchas en las cuales convierten a los seguidores de uno en enemigos mortales de los otros.
Hay una gran diferencia entre hacer un llamado para aceptar el resultado electoral y promover que después de esa fecha, gane quien gane, debe ser apoyado para que pueda llevar a cabo con éxito su labor, y lanzar peticiones para ejercer el “voto útil” para llevar a la titularidad del Ejecutivo a quien, de manera limpia, no podría ganar la elección. Esto último son componendas, son parches para evitar que puedan salirse de un grupo las oportunidades para hacer negocios, para seguir viviendo y gastando a cuerpo de rey con los impuestos de los mexicanos. Ese, por desgracia, es el llamado de Vicente Fox, el de la complicidad y lo adereza con un argumento que en su boca es todo un insulto: “mi amor por México”.
Aunado a este y a otros severos golpes a una democracia que no termina de nacer, el candidato tricolor estampó su rúbrica en un documento que llamaron Plan de la Concertación Mexicana, con lo que esto pretenda significar. Y vaya que es como decía el cómico “¡que bonita familia!”. Mire usted, firman: Rosario Robles, la señora del empresario extranjero defraudador, la que se formó en la “cola” de las visitas a la cárcel y fue rechazada por la esposa, la del célebre “cochinito”, la mujer a la que los “chuchos” quisieron hundir y al final resultaron más corruptos que ella, la que abusó e hizo uso a su antojo de los fondos del partido que lideraba a nivel nacional. Aparece también René Arce, el ex delegado señalado por diversos actos también de abuso y corrupción, expulsado de las filas lopezobradoristas al descubrirse que al igual que su hermano ni siquiera son mexicanos. No podía faltar el inquilino de “el torito”, el borrachito fino, el yunquista, el sujeto que llevó a las más numerosas derrotas a su partido, Manuel Espino. Ya como cerezas de este gran pastel que nos mostró a panistas, priístas y perredistas en su justa y abominable dimensión estuvieron, entre otros, Lía Limón, quien al igual que otros estuvo de un lado a otro recorriendo el Jardín Floresta, en Lomas Altas, en donde viven los que tienen suficiente dinero como para pagar recibos de luz que marcan más de 30 y 25 mil pesos por consumo y que fue el sitio de la reunión.
Que tan reprochables no serán este tipo de acuerdos que hasta doña Josefina Vázquez Mota criticó severamente a Vicente Fox por sus declaraciones de las que sostuvo “dañan, lastiman a millones de mexicanos ya que pugnan por el retorno del autoritarismo y estos dichos emanados del primer titular del Ejecutivo emanado de las filas de Acción Nacional van en contra de quienes apostaron por la alternancia y por el no retorno del PRI al gobierno federal. Fox se traicionó a sí mismo de su proyecto y sus sueños”. Sobre esto último y conforme se han venido presentando las acciones y las declaraciones se abren muchas interrogantes ya que al hablar de este “pacto” para favorecer a quien llaman “puntero” también queda claramente establecido que el guanajuatense fue producto de ese acuerdo que corrió en todas las voces sobre la entrega, el pase de estafeta del PRI al PAN efectuado desde el salinato. Nunca hubo acciones en contra de priístas, no las ha habido durante todos estos casi 12 años. La complicidad está pues más que vista.
De ahí que aún quienes no simpatizan con AMLO señalen que está a la vista el nerviosismo que campea en las filas del candidato tricolor, en su cuarto de guerra, la que puede o mejor dicho se manifiesta en la comisión de un error tras otro. ¿Si la diferencia en puntos es tan grande, para que aliarse con aquellos que ya tienen la etiqueta de antidemócratas, oportunistas y trepadoras? ¿Para que organizar marchas que enfrentan a los ciudadanos? Por lo que respecta a las denuncias en estas mismas líneas señalamos que no procedería su denuncia por la reunión de empresarios encabezada por Luis Costa, porque no hubo dinero que pudiera comprobarse se entregó y menos aún que está siendo utilizado. Ahora con eso de las cuentas claras de la asociación civil Honestidad Valiente, según el tabasqueño es producto también de ese estado de nervios en el que se encuentran porque “Peña Nieto va en picada”.
Dice y no hay nada que demuestre lo contrario, que toda la información sobre los recursos recibidos por financiamiento ciudadano y de los partidos que respaldan su candidatura han encontrado “total registro. El CISEN lo sabe perfectamente, me han visto con lupa, me han dado seguimiento durante muchos años”. Hasta hace poco, dijo, no se metían con él pero en el presente sacan desplegados, piden cuentas y cosas “por el estilo”. Y es que, agrega, “ya saben lo que está sucediendo. Yo no digo mentiras, ellos no pueden caer en el autoengaño y ahora hablan de que hay una situación de enrarecimiento. Cuentas claras y chocolate espeso”. Y si estas declaraciones las hizo en el aeropuerto del DF, ya en Puruándiro, Michoacán, expresó que se pretende reeditar la guerra sucia y el fraude electoral de hace 6 años por lo que pidió a sus simpatizantes que aceptaran despensas, chivos, gallinas, cerdos, lo que les den para comprar su voto pero que al final, voten con libertad.
Y a todo este panorama hay que agregarle la declaracionitis, esa que no propone y si predispone. Peña Nieto asegura que ganará más allá de lo que pronostican las encuestas; Diego Fernández de Cevallos de plano se deslinda de Fox y asegura que el no va a apoyar a Peña Nieto como lo aseguró en algún momento Carlos Navarrete, senador perredista y “chucho”. Pronto veremos otros anuncios en los que de nuevo el PAN se ríe de las promesas de Peña Nieto ya que lo muestra en fotografías en donde aparece muy sonriente al lado de Carlos Salinas, de Humberto Moreira, Tomás Yarrington, Mario Marín, Arturo Montiel y Elba Esther Gordillo.
Pero tanto PRI como PAN se unen en otro comercial en el cual recuerdan el plantón de Reforma y la expresión “al diablo con las instituciones”, sale a relucir Rene Bejarano y las célebres ligas, olvidaron los tricolores que precisamente acaban de firmar un pacto con la señora del corruptor, del que le entregó el dinero al que muestran como ejemplo de corrupción en el gobierno capitalino, dejando de lado también que éste sujeto fue a parar con sus huesitos a la cárcel al igual que Ahumada. Ahora que, de no haber sido por ese plantón, quien sabe cual hubiese sido la forma en la que quienes se consideraron robados, defraudados darían cauce a su ira, a su enojo, a la furia por otro despojo.
Así, mientras unos se encuentran nerviosos otros van armando expedientes. Por lo pronto, el Movimiento Progresista presentó una ampliación de queja ante el IFE en contra de los gastos de campaña de Peña Nieto ya que consideran que llevan más de 700 millones invertidos. Jesús Zambrano explicó que ante la inacción en que ha incurrido el IFE en esta denuncia apelarán al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para que les ordene actuar en torno a ella, ya que el exceso de gasto podría impactar en la equidad de la contienda. Finalmente Manuel Clouthier fue muy claro al definir la actuación de Vicente Fox: “hace tiempo que no está “muy bien” y pues hay que tomar sus dichos con esa salvedad. Ya no dice cosas muy coherentes el señor… el que se daña a sí mismo es el propio Vicente Fox”. ¿Será de largo efecto el toloache? ¿Son las reacciones por el consumo prolongado del Prozac? ¿Y la Martita, porque tan calladita?
Ya en el terreno meramente informativo resulta que Juan Zavala, el cuñado que no le resultó para nada incómodo a Calderón, fue nombrado por la Vázquez Mota como su vocero. ¿Será que ya no la quieren dejar hablar? En una total falta de respeto a los jóvenes en la cual los considera faltos de carácter, de aplomo, de seguridad, les pide, a los que se organizan en su contra que no se olviden de apoyar a la Selección Mexicana de Futbol el próximo viernes, día en el que jugarán contra Guyana. O sea que les dice: sigan protestando frente a Televisa pero no olviden encender el aparato porque no dan para más. A la pregunta sobre si su acuerdo con panistas contempla la protección a los hijos de la Martita, buscó salirse por la tangente. O sea que…
Para la Vázquez Mota también llegó el espectáculo con el mentado pase de charola. Dicen que fue en Puebla y que solicitaron desde 3, 5 o 50 mil pesitos, o sea que de acuerdo al sapo que fuera la pedrada. El de la Coparmex de ese estado, Carlos Anaya, confirmó que tal acción se llevó a cabo pero que lo recaudado es para actividades de proselitismo. Muy orgulloso habló de los que asistieron resaltando a quienes están vinculados con Mario Marín, que apoyaron al “chabelo” y que ahora están muy puestos con la chepina; otros panistas revelan que el dinero que se recibió es para los candidatos de Puebla y no para la nacional. El CEN blanquiazul sostuvo que no hubo tal “pase de charola”, que fueron “donaciones”. ¿Usted que cree? Y, mientras no se rebasen los topes que ha marcado la autoridad electoral, ¿en donde está lo malo si son recursos aportados de manera voluntaria y no sustraídos de las arcas gubernamentales? Por todo lo anterior, por esto y por mucho más es que, en efecto, será la historia la que juzgue a Calderón, al presidente que en estos momentos está totalmente reprobado.
Con mucho orgullo hemos gritado a los cuatro vientos que nuestro país es todo un mosaico, tanto cultural como en formas de vida, costumbres, alimentación, expresiones y resulta un tanto difícil de entender que tras años y años de repetirlo quienes aspiran a gobernarnos no tengan presente ninguno de estos renglones al momento de dirigirse a los ciudadanos. Podría manejarse un todo, sin distinciones, si en realidad se respetara el federalismo y las entidades se manejaran de manera autónoma y esto implica en un primer orden la recaudación tributaria y la aplicación directa de estos ingresos en el lugar en donde se capturan. Es decir, todo tendría que ser distinto y serían los Estados los que le entregarían porcentajes de recaudación a la federación. Nada de esto sucede y existe una lastimosa ignorancia sobre lo que sacude e importa a cada lugar.
En estos tiempos ese mosaico está más presente que nunca. Actos, acciones y reacciones que se tienen en una entidad no pueden repetirse en otra salvo que se quieran provocar funestas consecuencias. Hablan los aspirantes a dirigir los destinos del país de unidad cuando sus antecesores se han dedicado con vital ahínco a provocar todo lo contrario y por si fuera poco a destruir todo aquello que nos une. Un ejemplo de ello lo han sido las ceremonias cívicas, el sentido patriótico, las modificaciones en los textos de historia, etcétera. Hablan de paz, de tranquilidad, cuando por debajo del agua convocan, promueven, patrocinan reuniones y marchas en las cuales convierten a los seguidores de uno en enemigos mortales de los otros.
Hay una gran diferencia entre hacer un llamado para aceptar el resultado electoral y promover que después de esa fecha, gane quien gane, debe ser apoyado para que pueda llevar a cabo con éxito su labor, y lanzar peticiones para ejercer el “voto útil” para llevar a la titularidad del Ejecutivo a quien, de manera limpia, no podría ganar la elección. Esto último son componendas, son parches para evitar que puedan salirse de un grupo las oportunidades para hacer negocios, para seguir viviendo y gastando a cuerpo de rey con los impuestos de los mexicanos. Ese, por desgracia, es el llamado de Vicente Fox, el de la complicidad y lo adereza con un argumento que en su boca es todo un insulto: “mi amor por México”.
Aunado a este y a otros severos golpes a una democracia que no termina de nacer, el candidato tricolor estampó su rúbrica en un documento que llamaron Plan de la Concertación Mexicana, con lo que esto pretenda significar. Y vaya que es como decía el cómico “¡que bonita familia!”. Mire usted, firman: Rosario Robles, la señora del empresario extranjero defraudador, la que se formó en la “cola” de las visitas a la cárcel y fue rechazada por la esposa, la del célebre “cochinito”, la mujer a la que los “chuchos” quisieron hundir y al final resultaron más corruptos que ella, la que abusó e hizo uso a su antojo de los fondos del partido que lideraba a nivel nacional. Aparece también René Arce, el ex delegado señalado por diversos actos también de abuso y corrupción, expulsado de las filas lopezobradoristas al descubrirse que al igual que su hermano ni siquiera son mexicanos. No podía faltar el inquilino de “el torito”, el borrachito fino, el yunquista, el sujeto que llevó a las más numerosas derrotas a su partido, Manuel Espino. Ya como cerezas de este gran pastel que nos mostró a panistas, priístas y perredistas en su justa y abominable dimensión estuvieron, entre otros, Lía Limón, quien al igual que otros estuvo de un lado a otro recorriendo el Jardín Floresta, en Lomas Altas, en donde viven los que tienen suficiente dinero como para pagar recibos de luz que marcan más de 30 y 25 mil pesos por consumo y que fue el sitio de la reunión.
Que tan reprochables no serán este tipo de acuerdos que hasta doña Josefina Vázquez Mota criticó severamente a Vicente Fox por sus declaraciones de las que sostuvo “dañan, lastiman a millones de mexicanos ya que pugnan por el retorno del autoritarismo y estos dichos emanados del primer titular del Ejecutivo emanado de las filas de Acción Nacional van en contra de quienes apostaron por la alternancia y por el no retorno del PRI al gobierno federal. Fox se traicionó a sí mismo de su proyecto y sus sueños”. Sobre esto último y conforme se han venido presentando las acciones y las declaraciones se abren muchas interrogantes ya que al hablar de este “pacto” para favorecer a quien llaman “puntero” también queda claramente establecido que el guanajuatense fue producto de ese acuerdo que corrió en todas las voces sobre la entrega, el pase de estafeta del PRI al PAN efectuado desde el salinato. Nunca hubo acciones en contra de priístas, no las ha habido durante todos estos casi 12 años. La complicidad está pues más que vista.
De ahí que aún quienes no simpatizan con AMLO señalen que está a la vista el nerviosismo que campea en las filas del candidato tricolor, en su cuarto de guerra, la que puede o mejor dicho se manifiesta en la comisión de un error tras otro. ¿Si la diferencia en puntos es tan grande, para que aliarse con aquellos que ya tienen la etiqueta de antidemócratas, oportunistas y trepadoras? ¿Para que organizar marchas que enfrentan a los ciudadanos? Por lo que respecta a las denuncias en estas mismas líneas señalamos que no procedería su denuncia por la reunión de empresarios encabezada por Luis Costa, porque no hubo dinero que pudiera comprobarse se entregó y menos aún que está siendo utilizado. Ahora con eso de las cuentas claras de la asociación civil Honestidad Valiente, según el tabasqueño es producto también de ese estado de nervios en el que se encuentran porque “Peña Nieto va en picada”.
Dice y no hay nada que demuestre lo contrario, que toda la información sobre los recursos recibidos por financiamiento ciudadano y de los partidos que respaldan su candidatura han encontrado “total registro. El CISEN lo sabe perfectamente, me han visto con lupa, me han dado seguimiento durante muchos años”. Hasta hace poco, dijo, no se metían con él pero en el presente sacan desplegados, piden cuentas y cosas “por el estilo”. Y es que, agrega, “ya saben lo que está sucediendo. Yo no digo mentiras, ellos no pueden caer en el autoengaño y ahora hablan de que hay una situación de enrarecimiento. Cuentas claras y chocolate espeso”. Y si estas declaraciones las hizo en el aeropuerto del DF, ya en Puruándiro, Michoacán, expresó que se pretende reeditar la guerra sucia y el fraude electoral de hace 6 años por lo que pidió a sus simpatizantes que aceptaran despensas, chivos, gallinas, cerdos, lo que les den para comprar su voto pero que al final, voten con libertad.
Y a todo este panorama hay que agregarle la declaracionitis, esa que no propone y si predispone. Peña Nieto asegura que ganará más allá de lo que pronostican las encuestas; Diego Fernández de Cevallos de plano se deslinda de Fox y asegura que el no va a apoyar a Peña Nieto como lo aseguró en algún momento Carlos Navarrete, senador perredista y “chucho”. Pronto veremos otros anuncios en los que de nuevo el PAN se ríe de las promesas de Peña Nieto ya que lo muestra en fotografías en donde aparece muy sonriente al lado de Carlos Salinas, de Humberto Moreira, Tomás Yarrington, Mario Marín, Arturo Montiel y Elba Esther Gordillo.
Pero tanto PRI como PAN se unen en otro comercial en el cual recuerdan el plantón de Reforma y la expresión “al diablo con las instituciones”, sale a relucir Rene Bejarano y las célebres ligas, olvidaron los tricolores que precisamente acaban de firmar un pacto con la señora del corruptor, del que le entregó el dinero al que muestran como ejemplo de corrupción en el gobierno capitalino, dejando de lado también que éste sujeto fue a parar con sus huesitos a la cárcel al igual que Ahumada. Ahora que, de no haber sido por ese plantón, quien sabe cual hubiese sido la forma en la que quienes se consideraron robados, defraudados darían cauce a su ira, a su enojo, a la furia por otro despojo.
Así, mientras unos se encuentran nerviosos otros van armando expedientes. Por lo pronto, el Movimiento Progresista presentó una ampliación de queja ante el IFE en contra de los gastos de campaña de Peña Nieto ya que consideran que llevan más de 700 millones invertidos. Jesús Zambrano explicó que ante la inacción en que ha incurrido el IFE en esta denuncia apelarán al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para que les ordene actuar en torno a ella, ya que el exceso de gasto podría impactar en la equidad de la contienda. Finalmente Manuel Clouthier fue muy claro al definir la actuación de Vicente Fox: “hace tiempo que no está “muy bien” y pues hay que tomar sus dichos con esa salvedad. Ya no dice cosas muy coherentes el señor… el que se daña a sí mismo es el propio Vicente Fox”. ¿Será de largo efecto el toloache? ¿Son las reacciones por el consumo prolongado del Prozac? ¿Y la Martita, porque tan calladita?
Ya en el terreno meramente informativo resulta que Juan Zavala, el cuñado que no le resultó para nada incómodo a Calderón, fue nombrado por la Vázquez Mota como su vocero. ¿Será que ya no la quieren dejar hablar? En una total falta de respeto a los jóvenes en la cual los considera faltos de carácter, de aplomo, de seguridad, les pide, a los que se organizan en su contra que no se olviden de apoyar a la Selección Mexicana de Futbol el próximo viernes, día en el que jugarán contra Guyana. O sea que les dice: sigan protestando frente a Televisa pero no olviden encender el aparato porque no dan para más. A la pregunta sobre si su acuerdo con panistas contempla la protección a los hijos de la Martita, buscó salirse por la tangente. O sea que…
Para la Vázquez Mota también llegó el espectáculo con el mentado pase de charola. Dicen que fue en Puebla y que solicitaron desde 3, 5 o 50 mil pesitos, o sea que de acuerdo al sapo que fuera la pedrada. El de la Coparmex de ese estado, Carlos Anaya, confirmó que tal acción se llevó a cabo pero que lo recaudado es para actividades de proselitismo. Muy orgulloso habló de los que asistieron resaltando a quienes están vinculados con Mario Marín, que apoyaron al “chabelo” y que ahora están muy puestos con la chepina; otros panistas revelan que el dinero que se recibió es para los candidatos de Puebla y no para la nacional. El CEN blanquiazul sostuvo que no hubo tal “pase de charola”, que fueron “donaciones”. ¿Usted que cree? Y, mientras no se rebasen los topes que ha marcado la autoridad electoral, ¿en donde está lo malo si son recursos aportados de manera voluntaria y no sustraídos de las arcas gubernamentales? Por todo lo anterior, por esto y por mucho más es que, en efecto, será la historia la que juzgue a Calderón, al presidente que en estos momentos está totalmente reprobado.
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