Apro
El candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, presentó aquí su plan para combatir la delincuencia y ofreció a los michoacanos atender de manera personal el problema de la inseguridad.
“De ganar las elecciones presidenciales, no delegaré el problema de la inseguridad y lo atendré de manera personal”, puntualizó.
En la plaza central de este municipio, el tabasqueño señaló que su política de seguridad estará basada en tres ejes: atender las causas del delito, terminar con la corrupción y crear una buena coordinación.
Asimismo, se comprometió serenar la región y a todo Michoacán, para que de nueva cuenta –dijo– cobren vigencia los principios de tranquilidad y paz social plasmados por José María Morelos en los Sentimientos de la Nación y en la Primera Constitución de 1814.
Pese a que llegó retrasado una hora y media, miles de simpatizantes esperaron su arribo a este municipio, donde afirmó que encabezará un gobierno itinerante y despachará en Apatzingán o donde sea necesario.
Según el candidato de los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano, combatirá la pobreza y la desigualdad como condición primaria para acabar con la delincuencia y el crimen.
Minutos antes, en Uruapan, arropado por miles de simpatizantes, el aspirante presidencial manifestó que en México se está realizando un “cambio” y los jóvenes son los protagonistas.
Señaló que Peña Nieto no es inalcanzable, como él lo sentía, “y la elección no será sólo un trámite como lo pensaba el priista, porque hay un despertar de la ciudadanía, y los primeros en darse cuenta de la maniobra fueron los jóvenes. “Por eso: ¡que vivan los jóvenes, que vivan los estudiantes!”, lanzó.
Tras ello, mencionó que “dentro del principio de justicia no cabe la impunidad, y por ello mi gobierno castigará por igual los delitos comunes que los delitos de cuello blanco”.
Y fue claro al señalar que “ni el PRI ni el PAN pasarán” en Zitácuaro, Apatzingán y Uruapan, municipios en los que, aseguró, “volverá a ganar el 1 de julio”.
Luego de resaltar que las últimas encuestas le dan prácticamente un empate técnico con el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, dijo que sus oponentes han empezado a ponerse nerviosos, por lo que les recomendó “tomar té de tila”.
Acompañado de los dirigentes estatales del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, Víctor Báez, Reginaldo Sandoval y Aníbal Guerra, respectivamente, destacó que dará “el último jalón todo el mes de junio para ganar por segunda vez la presidencia”.
En Uruapan, el exjefe de Gobierno del Distrito Federal pidió a sus opositores no verlo como un enemigo, porque no tiene “ni quiero tenerlos”.
Aseguró que si bien tiene adversarios, en su gobierno “no habrá persecución para nadie, no habrá venganza”.
Añadió:
“Los priistas están nerviosos porque se enfrentan a la conciencia crítica del país”.
Poco antes, en Zitácuaro, donde inició su gira de trabajo por dos días en tierras de Felipe Calderon, Andrés Manuel López Obrador aseguró que no ha pedido recursos extras en su campaña y que su estrategia para ganar las elecciones es la organización del pueblo.
“Yo no he pedido dinero a nadie. Mi estrategia es que sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación”, expresó.
La declaración la hizo luego de la polémica que se desató tras darse a conocer que Luis Creel organizó una reunión en la que un grupo cercano a López Obrador “pasó la charola” y solicitó 6 millones de dólares para que el tabasqueño obtenga la victoria electoral el 1 de julio próximo.
En respuesta, el aspirante presidencial aseguró que tiene honestidad y autoridad moral en sus actos.
“Me pueden llamar peje, pero no soy lagarto”, soltó, y consideró que los ataques de sus opositores es porque están nerviosos ante su crecimiento en las preferencias electorales.
El candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, presentó aquí su plan para combatir la delincuencia y ofreció a los michoacanos atender de manera personal el problema de la inseguridad.
“De ganar las elecciones presidenciales, no delegaré el problema de la inseguridad y lo atendré de manera personal”, puntualizó.
En la plaza central de este municipio, el tabasqueño señaló que su política de seguridad estará basada en tres ejes: atender las causas del delito, terminar con la corrupción y crear una buena coordinación.
Asimismo, se comprometió serenar la región y a todo Michoacán, para que de nueva cuenta –dijo– cobren vigencia los principios de tranquilidad y paz social plasmados por José María Morelos en los Sentimientos de la Nación y en la Primera Constitución de 1814.
Pese a que llegó retrasado una hora y media, miles de simpatizantes esperaron su arribo a este municipio, donde afirmó que encabezará un gobierno itinerante y despachará en Apatzingán o donde sea necesario.
Según el candidato de los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano, combatirá la pobreza y la desigualdad como condición primaria para acabar con la delincuencia y el crimen.
Minutos antes, en Uruapan, arropado por miles de simpatizantes, el aspirante presidencial manifestó que en México se está realizando un “cambio” y los jóvenes son los protagonistas.
Señaló que Peña Nieto no es inalcanzable, como él lo sentía, “y la elección no será sólo un trámite como lo pensaba el priista, porque hay un despertar de la ciudadanía, y los primeros en darse cuenta de la maniobra fueron los jóvenes. “Por eso: ¡que vivan los jóvenes, que vivan los estudiantes!”, lanzó.
Tras ello, mencionó que “dentro del principio de justicia no cabe la impunidad, y por ello mi gobierno castigará por igual los delitos comunes que los delitos de cuello blanco”.
Y fue claro al señalar que “ni el PRI ni el PAN pasarán” en Zitácuaro, Apatzingán y Uruapan, municipios en los que, aseguró, “volverá a ganar el 1 de julio”.
Luego de resaltar que las últimas encuestas le dan prácticamente un empate técnico con el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, dijo que sus oponentes han empezado a ponerse nerviosos, por lo que les recomendó “tomar té de tila”.
Acompañado de los dirigentes estatales del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, Víctor Báez, Reginaldo Sandoval y Aníbal Guerra, respectivamente, destacó que dará “el último jalón todo el mes de junio para ganar por segunda vez la presidencia”.
En Uruapan, el exjefe de Gobierno del Distrito Federal pidió a sus opositores no verlo como un enemigo, porque no tiene “ni quiero tenerlos”.
Aseguró que si bien tiene adversarios, en su gobierno “no habrá persecución para nadie, no habrá venganza”.
Añadió:
“Los priistas están nerviosos porque se enfrentan a la conciencia crítica del país”.
Poco antes, en Zitácuaro, donde inició su gira de trabajo por dos días en tierras de Felipe Calderon, Andrés Manuel López Obrador aseguró que no ha pedido recursos extras en su campaña y que su estrategia para ganar las elecciones es la organización del pueblo.
“Yo no he pedido dinero a nadie. Mi estrategia es que sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación”, expresó.
La declaración la hizo luego de la polémica que se desató tras darse a conocer que Luis Creel organizó una reunión en la que un grupo cercano a López Obrador “pasó la charola” y solicitó 6 millones de dólares para que el tabasqueño obtenga la victoria electoral el 1 de julio próximo.
En respuesta, el aspirante presidencial aseguró que tiene honestidad y autoridad moral en sus actos.
“Me pueden llamar peje, pero no soy lagarto”, soltó, y consideró que los ataques de sus opositores es porque están nerviosos ante su crecimiento en las preferencias electorales.
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