Apro
El asesor en materia de seguridad del priista Enrique Peña Nieto, el exjefe de policía colombiano Óscar Naranjo, admitió su responsabilidad en la promoción para general de Mauricio Santoyo, quien ahora es acusado por Estados Unidos de vínculos con el narcotráfico.
El general retirado Naranjo reconoció en entrevista radiofónica que “soy responsable de haber asumido la fase final del general Santoyo, su postulación ante el Senado y el gobierno colombiano para ser ascendido a brigadier general”, en 2007.
El asesor del candidato presidencial priista explicó que “si al momento de recibir la dirección, hubiese tenido información seria, no hubiera permitido el ascenso del general Santoyo”.
Santoyo Velasco, quien fue jefe de seguridad del expresidente colombiano Álvaro Uribe de 2002 a 2006, es acusado, según un documento judicial difundido el lunes 18 en una Corte federal de Virginia, de recibir 5 millones de dólares en sobornos por parte de grupos narcotraficantes, a cambio de darles información sobre las indagaciones de autoridades estadunidenses, británicas y colombianas en su contra.
Este mismo martes, el presidente colombiano Juan Manuel Santos dijo que espera que el general Santoyo Velasco responda ante el llamado de la justicia de Estados Unidos.
Desde Los Cabos, Baja California Sur, donde participa en la cumbre del G-20, Santos dijo que “la información que tengo es que las autoridades norteamericanas lo están requiriendo. Sería muy importante que el general Santoyo fuera y respondiera ante la justicia norteamericana por sus actos.
“Yo no puedo presumir, pero si lo están requiriendo es por algo. Lo importante es que vaya y responda, por bien de la institución y por bien del país”, concluyó el jefe del Estado colombiano.
Al presentar a Naranjo la semana pasada como su virtual asesor, Peña Nieto destacó el desempeño del colombiano en la lucha contra el narcotráfico y el crimen en la región.
“La necesidad de nuestro país demanda la mejor experiencia para que recupere los niveles de seguridad”, mencionó el candidato presidencial el 14 de junio, acompañado por su coordinador de campaña, Luis Videgaray.
Óscar Naranjo es reconocido en la región por su papel crucial en el desmantelamiento de los principales cárteles de Colombia durante su carrera de 36 años en la Policía, tarea en la cual sostuvo una coordinación estrecha con agentes antinarcóticos y de espionaje de Estados Unidos.
Sin embargo, el proceso que enfrenta Santoyo Velasco en Estados Unidos pone en escrutinio el desempeño de Óscar Naranjo y la estrategia antidrogas emprendida por el gobierno de Álvaro Uribe.
El asesor en materia de seguridad del priista Enrique Peña Nieto, el exjefe de policía colombiano Óscar Naranjo, admitió su responsabilidad en la promoción para general de Mauricio Santoyo, quien ahora es acusado por Estados Unidos de vínculos con el narcotráfico.
El general retirado Naranjo reconoció en entrevista radiofónica que “soy responsable de haber asumido la fase final del general Santoyo, su postulación ante el Senado y el gobierno colombiano para ser ascendido a brigadier general”, en 2007.
El asesor del candidato presidencial priista explicó que “si al momento de recibir la dirección, hubiese tenido información seria, no hubiera permitido el ascenso del general Santoyo”.
Santoyo Velasco, quien fue jefe de seguridad del expresidente colombiano Álvaro Uribe de 2002 a 2006, es acusado, según un documento judicial difundido el lunes 18 en una Corte federal de Virginia, de recibir 5 millones de dólares en sobornos por parte de grupos narcotraficantes, a cambio de darles información sobre las indagaciones de autoridades estadunidenses, británicas y colombianas en su contra.
Este mismo martes, el presidente colombiano Juan Manuel Santos dijo que espera que el general Santoyo Velasco responda ante el llamado de la justicia de Estados Unidos.
Desde Los Cabos, Baja California Sur, donde participa en la cumbre del G-20, Santos dijo que “la información que tengo es que las autoridades norteamericanas lo están requiriendo. Sería muy importante que el general Santoyo fuera y respondiera ante la justicia norteamericana por sus actos.
“Yo no puedo presumir, pero si lo están requiriendo es por algo. Lo importante es que vaya y responda, por bien de la institución y por bien del país”, concluyó el jefe del Estado colombiano.
Al presentar a Naranjo la semana pasada como su virtual asesor, Peña Nieto destacó el desempeño del colombiano en la lucha contra el narcotráfico y el crimen en la región.
“La necesidad de nuestro país demanda la mejor experiencia para que recupere los niveles de seguridad”, mencionó el candidato presidencial el 14 de junio, acompañado por su coordinador de campaña, Luis Videgaray.
Óscar Naranjo es reconocido en la región por su papel crucial en el desmantelamiento de los principales cárteles de Colombia durante su carrera de 36 años en la Policía, tarea en la cual sostuvo una coordinación estrecha con agentes antinarcóticos y de espionaje de Estados Unidos.
Sin embargo, el proceso que enfrenta Santoyo Velasco en Estados Unidos pone en escrutinio el desempeño de Óscar Naranjo y la estrategia antidrogas emprendida por el gobierno de Álvaro Uribe.
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