Apro
Con gritos de “¡presidente! ¡presidente!”, y “¡Es un honor estar con Obrador!”, unos dos mil estudiantes del Tecnológico de Monterrey despidieron al candidato presidencial del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, al terminar su participación en un foro organizado por esa casa de estudios en la capital de Nuevo León.
Acompañado por empresarios y expanistas, y en medio de ovaciones, aplausos y gritos de apoyo, López Obrador habló durante 50 minutos, aproximadamente, sobre sus propuestas en materia de seguridad, educación, narcotráfico y salarios.
En las instalaciones del Tec, la universidad privada de mayor prestigio en el país, fundada en 1943 por el empresario Eugenio Garza Sada, los dos mil estudiantes que abarrotaron el auditorio Luis Elizondo, ovacionaron cada propuesta del tabasqueño.
Los cientos de jóvenes que se quedaron afuera del recinto recibieron a López Obrador de manera efusiva cuando llegó acompañado por cuatro egresados de esta institución: Fernando Turner, propuesto como secretario de Economía en caso de ganar la Presidencia; Adolfo Hellmund, considerado para encabezar la Secretaría de Energía; el empresario Alfonso Romo, asesor del candidato, y el rector David Garza Salazar.
Al evento asistieron la exdiputada Tatiana Clouthier, hija del extinto excandidato presidencial del PAN, Manuel J. Clouthier, Maquío; Fernando Canales, declarado lopezobradorista e hijo del exgobernador panista Fernando Canales Clariond, así como la candidata a senadora Cristina Sada, quien viajó desde la Ciudad de México exclusivamente para acompañarlo a este foro con jóvenes.
En esta sede que alberga el mural de Jorge González Camarena que se ha convertido en uno de los símbolos del Tec, basado en la mitología precortesiana y que representa la cultura y el trabajo, López Obrador fue reconocido por la Federación de Estudiantes –que realizó este foro– con un peluche en forma de borrego, distinción hecha a los presidenciables.
Para comenzar se transmitió un video sobre la carrera política de López Obrador, en el que se evitó hablar del supuesto fraude electoral de 2006 y de cinco años de resistencia civil pacífica para brincar a la constitución de la asociación civil Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Los estudiantes guardaron silencio cuando López Obrador expuso sus sentimientos y propuestas para lograr, dijo, la transformación pública del país y serenarlo ante la ola de violencia desatada por la falta de crecimiento económico fomentado por gobiernos priistas y panistas de corte neoliberal desde hace 30 años.
Moderado, pausado, tranquilo, el candidato desmenuzó una a una sus propuestas para crear un millón 200 mil empleos anuales, ahorrar 300 mil millones de pesos el primer año de gobierno eliminando los privilegios fiscales, brindar oportunidades de estudio y trabajo a los estudiantes para evitar que opten por las conductas antisociales y eliminar los privilegios fiscales. Además, aseguró que no privatizará los pocos bienes nacionales ni expropiará los ya concesionados.
“Nos hicieron creer que si se transferían bienes nacionales habría progreso. Ahora tienen el apetito del petróleo”, indicó. Después lanzó la “fórmula mexicana” para el desarrollo nacional, la cual patentará porque, aseguró, la están plagiando sus contrincantes, el priista Enrique Peña Nieto y la panista Josefina Vázquez Mota. Se trata de las acciones de gobierno para terminar con la corrupción, predicando con el ejemplo, reforzando los valores y gobernando de manera austera, sin lujos.
“Tenemos un gobierno faraónico; un gobierno mantenido y bueno para nada”, indicó.
Puso como ejemplo el sueldo de un ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que gana tres veces más que su similar en Brasil, más que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
“Y no sólo eso. Están colmados de privilegios. Hasta cirugías plásticas a costa del erario”, señaló. En respuesta, los estudiantes rieron y aplaudieron.
“Vamos a convencer, a persuadir a quienes tienen más ingresos para que se terminen los privilegios fiscales. Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”, incluidos sindicatos y sus líderes, a quienes, afirmó, no perseguirá porque no es su función, pero tampoco los protegerá desde Los Pinos.
Con gritos de “¡presidente! ¡presidente!”, y “¡Es un honor estar con Obrador!”, unos dos mil estudiantes del Tecnológico de Monterrey despidieron al candidato presidencial del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, al terminar su participación en un foro organizado por esa casa de estudios en la capital de Nuevo León.
Acompañado por empresarios y expanistas, y en medio de ovaciones, aplausos y gritos de apoyo, López Obrador habló durante 50 minutos, aproximadamente, sobre sus propuestas en materia de seguridad, educación, narcotráfico y salarios.
En las instalaciones del Tec, la universidad privada de mayor prestigio en el país, fundada en 1943 por el empresario Eugenio Garza Sada, los dos mil estudiantes que abarrotaron el auditorio Luis Elizondo, ovacionaron cada propuesta del tabasqueño.
Los cientos de jóvenes que se quedaron afuera del recinto recibieron a López Obrador de manera efusiva cuando llegó acompañado por cuatro egresados de esta institución: Fernando Turner, propuesto como secretario de Economía en caso de ganar la Presidencia; Adolfo Hellmund, considerado para encabezar la Secretaría de Energía; el empresario Alfonso Romo, asesor del candidato, y el rector David Garza Salazar.
Al evento asistieron la exdiputada Tatiana Clouthier, hija del extinto excandidato presidencial del PAN, Manuel J. Clouthier, Maquío; Fernando Canales, declarado lopezobradorista e hijo del exgobernador panista Fernando Canales Clariond, así como la candidata a senadora Cristina Sada, quien viajó desde la Ciudad de México exclusivamente para acompañarlo a este foro con jóvenes.
En esta sede que alberga el mural de Jorge González Camarena que se ha convertido en uno de los símbolos del Tec, basado en la mitología precortesiana y que representa la cultura y el trabajo, López Obrador fue reconocido por la Federación de Estudiantes –que realizó este foro– con un peluche en forma de borrego, distinción hecha a los presidenciables.
Para comenzar se transmitió un video sobre la carrera política de López Obrador, en el que se evitó hablar del supuesto fraude electoral de 2006 y de cinco años de resistencia civil pacífica para brincar a la constitución de la asociación civil Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Los estudiantes guardaron silencio cuando López Obrador expuso sus sentimientos y propuestas para lograr, dijo, la transformación pública del país y serenarlo ante la ola de violencia desatada por la falta de crecimiento económico fomentado por gobiernos priistas y panistas de corte neoliberal desde hace 30 años.
Moderado, pausado, tranquilo, el candidato desmenuzó una a una sus propuestas para crear un millón 200 mil empleos anuales, ahorrar 300 mil millones de pesos el primer año de gobierno eliminando los privilegios fiscales, brindar oportunidades de estudio y trabajo a los estudiantes para evitar que opten por las conductas antisociales y eliminar los privilegios fiscales. Además, aseguró que no privatizará los pocos bienes nacionales ni expropiará los ya concesionados.
“Nos hicieron creer que si se transferían bienes nacionales habría progreso. Ahora tienen el apetito del petróleo”, indicó. Después lanzó la “fórmula mexicana” para el desarrollo nacional, la cual patentará porque, aseguró, la están plagiando sus contrincantes, el priista Enrique Peña Nieto y la panista Josefina Vázquez Mota. Se trata de las acciones de gobierno para terminar con la corrupción, predicando con el ejemplo, reforzando los valores y gobernando de manera austera, sin lujos.
“Tenemos un gobierno faraónico; un gobierno mantenido y bueno para nada”, indicó.
Puso como ejemplo el sueldo de un ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que gana tres veces más que su similar en Brasil, más que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
“Y no sólo eso. Están colmados de privilegios. Hasta cirugías plásticas a costa del erario”, señaló. En respuesta, los estudiantes rieron y aplaudieron.
“Vamos a convencer, a persuadir a quienes tienen más ingresos para que se terminen los privilegios fiscales. Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”, incluidos sindicatos y sus líderes, a quienes, afirmó, no perseguirá porque no es su función, pero tampoco los protegerá desde Los Pinos.
Comentarios