Francisco Montaño / OEM
Antes de las 21:00 horas la explanada del Zócalo capitalino enloqueció. El escenario se apagó y un collage de imágenes retro de todos los colores comenzó a deslizarse por las pantallas gigantes. Fotografías de Paul, de The Beatles, de Wings, de otros grandes como Mick Jagger de The Rolling Stones. Imágenes de la cultura pop de la década de 1960 y 1970 con las que todos los asistentes nos identificamos, sin importar la edad, sin importar que a la mayoría no nos hubiera tocado esta época. Con esa propuesta visual, que encerraba lo mejor de la beatlemanía, comenzó el concierto.
El video terminó con una imagen de un bajo formado con destellos y las luces del escenario se apagaron. En medio de los gritos de los asistentes salió Paul, con un saco rojo y con el bajo en sus manos. Al igual que los 90,000 asistentes, la mayoría no creíamos lo que veíamos. El ex beatle, al frente nuestro, comenzó su repertorio con "Magical Mistery Tour".
De ahí en adelante, cada canción, cada momento, parecía mejor que el anterior. Todos enloquecimos con "Paperback Writer", muchas parejas se abrazaron con "My Valentine", y algunos que le entendían reían ante los chistes que intentó hacer en español y quedamos en silencio con la emotiva interpretación de "Here Today" que, como él mismo dijo, escribió después de la muerte de John Lennon.
El público se comunicó muy bien con el inglés y después de ponerse de acuerdo corearon "olé olé olé...sir Paul, Sir Paul...", algo que agradeció con un grito muy especial "Viva México cabrones", lo que provocó el grito más fuerte de la noche.
Siguieron otros temas como el que le dedicó a su ex compañero John Lennon "The Long and Winding Road"
La noche que transcurría con tranquilidad empezó a agitarse con "Eleanor Rogby" lo que obligó a los presentes a seguir elritmo con la luz de sus celulares.
En su español Paul McCartney se dio a entender lo mejor posible y agradeció la asistencia de los 90 mil chilangos que se dieron cita en la plancha del Zócalo, sin contar a los aproximadamente cien mil que lo observaron a través de las pantallas en calles alrededor, según comentó el jefe de gobierno capitalino Marcelo Ebrard.
Al final, luego de casi tres horas en el escenario, Paul explicó a los mexicanos que ya tenía que irse, que él y su equipo debían dormir y que nos veríamos una "próxima vez".
Pero no fue cierto, la pila del inglés aún estaba a buen nivel ya que no sólo cantó algunos popurris que incluyeton temas como "Lady Madonna", "Day Tripper" y "Get Back", Esto sólo encendió más al público que no paró de gritar "otra, otra", obligando al ex beatle a salir nuevamente al escenario para interpretar "Yesterday", "I Saw Her Standing There", "Golden Slumbers", "Carry That Weight", entre otras, pero no fue suficiente para los casi doscientos mil que asístieron al primer cuadro de la ciudad para disfrutar de la música de McCartney.
El cariño del público no lo dejó irse tan fácil, en más de tres ocasiones regresó para interpretar en un total meas de 38 canciones pero claro, no podía faltar el mariachi que en figura del Gamma Mil lo acompañó con el tema "Obladi Oblada"
Y es que, como se comentó al final, no hubo canción que no emocionara. Todas, de alguna forma, están relacionadas íntimamente con algún momento de nuestras vidas, fue la interpretación de la mayoría del público que estuvo presente en esta noche tan mágica y que alegró el corazón de muchas mamás a las que McCartney dedicó "Hope of Deliverance" en el transcurso de su recital y que así culminaron el festejo del 10 de mayo.
Antes de las 21:00 horas la explanada del Zócalo capitalino enloqueció. El escenario se apagó y un collage de imágenes retro de todos los colores comenzó a deslizarse por las pantallas gigantes. Fotografías de Paul, de The Beatles, de Wings, de otros grandes como Mick Jagger de The Rolling Stones. Imágenes de la cultura pop de la década de 1960 y 1970 con las que todos los asistentes nos identificamos, sin importar la edad, sin importar que a la mayoría no nos hubiera tocado esta época. Con esa propuesta visual, que encerraba lo mejor de la beatlemanía, comenzó el concierto.
El video terminó con una imagen de un bajo formado con destellos y las luces del escenario se apagaron. En medio de los gritos de los asistentes salió Paul, con un saco rojo y con el bajo en sus manos. Al igual que los 90,000 asistentes, la mayoría no creíamos lo que veíamos. El ex beatle, al frente nuestro, comenzó su repertorio con "Magical Mistery Tour".
De ahí en adelante, cada canción, cada momento, parecía mejor que el anterior. Todos enloquecimos con "Paperback Writer", muchas parejas se abrazaron con "My Valentine", y algunos que le entendían reían ante los chistes que intentó hacer en español y quedamos en silencio con la emotiva interpretación de "Here Today" que, como él mismo dijo, escribió después de la muerte de John Lennon.
El público se comunicó muy bien con el inglés y después de ponerse de acuerdo corearon "olé olé olé...sir Paul, Sir Paul...", algo que agradeció con un grito muy especial "Viva México cabrones", lo que provocó el grito más fuerte de la noche.
Siguieron otros temas como el que le dedicó a su ex compañero John Lennon "The Long and Winding Road"
La noche que transcurría con tranquilidad empezó a agitarse con "Eleanor Rogby" lo que obligó a los presentes a seguir elritmo con la luz de sus celulares.
En su español Paul McCartney se dio a entender lo mejor posible y agradeció la asistencia de los 90 mil chilangos que se dieron cita en la plancha del Zócalo, sin contar a los aproximadamente cien mil que lo observaron a través de las pantallas en calles alrededor, según comentó el jefe de gobierno capitalino Marcelo Ebrard.
Al final, luego de casi tres horas en el escenario, Paul explicó a los mexicanos que ya tenía que irse, que él y su equipo debían dormir y que nos veríamos una "próxima vez".
Pero no fue cierto, la pila del inglés aún estaba a buen nivel ya que no sólo cantó algunos popurris que incluyeton temas como "Lady Madonna", "Day Tripper" y "Get Back", Esto sólo encendió más al público que no paró de gritar "otra, otra", obligando al ex beatle a salir nuevamente al escenario para interpretar "Yesterday", "I Saw Her Standing There", "Golden Slumbers", "Carry That Weight", entre otras, pero no fue suficiente para los casi doscientos mil que asístieron al primer cuadro de la ciudad para disfrutar de la música de McCartney.
El cariño del público no lo dejó irse tan fácil, en más de tres ocasiones regresó para interpretar en un total meas de 38 canciones pero claro, no podía faltar el mariachi que en figura del Gamma Mil lo acompañó con el tema "Obladi Oblada"
Y es que, como se comentó al final, no hubo canción que no emocionara. Todas, de alguna forma, están relacionadas íntimamente con algún momento de nuestras vidas, fue la interpretación de la mayoría del público que estuvo presente en esta noche tan mágica y que alegró el corazón de muchas mamás a las que McCartney dedicó "Hope of Deliverance" en el transcurso de su recital y que así culminaron el festejo del 10 de mayo.
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